Cancillería publicó borrador de resolución que elimina requisito de inglés para ser embajador de Colombia

La iniciativa, solicitada por el presidente Gustavo Petro, ha suscitado fuertes críticas desde distintos sectores políticos y diplomáticos

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La Cancillería propuso eliminar el
La Cancillería propuso eliminar el manejo del inglés como requisito para ser embajador en Colombia - crédito Cancillería de Colombia

La Cancillería colombiana subió al Sistema Único de Consulta Pública (Sucop) el borrador de una resolución que plantea eliminar del Manual de Funciones y Competencias Laborales el requisito de dominar el idioma inglés —o cualquier otro idioma oficial de las Naciones Unidas— para quienes aspiren a ser embajadores extraordinarios y plenipotenciarios.

El documento, que permanecerá en etapa de consulta pública hasta el 9 de agosto, modifica los parámetros establecidos en el Manual de Funciones del Ministerio de Relaciones Exteriores, lo que implicaría un cambio sustancial en la preparación exigida a los designados en estas posiciones diplomáticas.

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Esta iniciativa es resultado de una instrucción expresa del presidente Gustavo Petro, que considera que el conocimiento de idiomas extranjeros no constituye una tarea fundamental para el desarrollo de dichos cargos.

Argumentos del Gobierno: simplificación y equidad

El Gobierno argumenta acciones afirmativas
El Gobierno argumenta acciones afirmativas y simplificación administrativa - crédito @CancilleriaCol/X

De acuerdo con la memoria justificativa del proyecto, “se propone modificar los conocimientos básicos o esenciales del Manual para el cargo de Embajador extraordinario y plenipotenciario” debido a que, según la entidad, “no son fundamentales para el desempeño del empleo público de embajador como agente directo de presidente de la República en la dirección de la relaciones internacionales”.

El Gobierno plantea que esta modificación se ajusta a una política de acciones afirmativas. Dichas acciones, según la argumentación oficial, buscaneliminar y reducir las desigualdades de tipo social, cultural o económico o para lograr que los miembros de un grupo subrepresentado, que usualmente ha sufrido de una discriminación histórica, tengan mayor representación”.

El Ejecutivo también sostiene que esta medida responde a directrices presidenciales orientadas a “simplificar las designaciones, fortalecer la seguridad jurídica y facilitar la defensa judicial de los actos administrativos”, con el objetivo de agilizar los procesos de nombramiento y reducir posibles controversias legales asociadas a los mismos.

El borrador, además de la eliminación del requisito de idioma, compila y actualiza en un solo cuerpo normativo las funciones y competencias laborales de los empleos del Ministerio de Relaciones Exteriores. Esta actualización se ajusta al Decreto 1083 de 2015, que regula los manuales específicos de funciones y competencias laborales en las entidades públicas del orden nacional. De acuerdo con el borrador, los cargos deben cumplir sus funciones “con criterios de eficiencia y eficacia en orden al logro de la misión, objetivos y funciones que la Constitución y la ley le señalan al Ministerio”.

Para el cargo de embajador, aunque se suprime el dominio del inglés, se mantienen conocimientos básicos en política exterior, relaciones internacionales y negociación internacional, además de competencias como liderazgo efectivo, orientación a resultados y visión estratégica.

Críticas desde el Congreso y el cuerpo diplomático

Sectores diplomáticos y políticos critican
Sectores diplomáticos y políticos critican la medida por afectar la profesionalización - crédito Luisa González/REUTERS

La propuesta ha despertado críticas en distintos sectores. Julián Silva, presidente de la Asociación Diplomática y Consular de Colombia (Asodiplo), afirmó: “Lo que hemos peleado es que ese manejo de las relaciones exteriores del país debe hacerse en uso de un personal idóneo, de un personal especializado que trabaje y que tenga experiencia en los temas relacionados con política exterior”.

La representante a la Cámara Carolina Giraldo, del partido Alianza Verde, también cuestionó la iniciativa: “Esto es una cachetada al ya manoseado servicio exterior y en especial a la carrera diplomática. Debería ser al contrario: tener una diplomacia cada vez más profesional e idónea. Quitar requisitos no es democratizar la diplomacia: es convertir el servicio exterior en un club de favores políticos”.

En el mismo sentido, la senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, señaló: “¿Trabajando para que Laura Sarabia y otros que no dominen el idioma puedan ser embajadores de Colombia? Nos cuesta menos tener gente que hable inglés y está preparada para la diplomacia del país. ¿Qué pasó con la carrera diplomática que juraron impulsar?”

Estándares actuales y próximos pasos

Actualmente, los diplomáticos de carrera están obligados a acreditar un nivel B2 o equivalente en idiomas de uso diplomático para ingresar al servicio exterior y someterse a evaluaciones periódicas cada cuatro o cinco años. Para Asodiplo, esta exigencia no es solo un requisito: es una herramienta clave para ejercer funciones en el servicio exterior”.

El borrador estará abierto a comentarios ciudadanos hasta el 9 de agosto. Tras este proceso, la Cancillería evaluará las observaciones y decidirá si procede con la expedición de la resolución. De aprobarse, se marcaría un cambio significativo en el perfil requerido para quienes representen a Colombia en el exterior.