Firu huyó tras robar un kilo de carne en el sur de Bogotá: aunque escapó con éxito, todo quedó en video

Las imágenes muestran el instante preciso en que el animal aprovecha un descuido, toma el paquete y se da a la huida, mientras la víctima intenta reaccionar

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El curioso incidente, que no dejó heridos salvo el perjuicio económico para la dueña del producto, propició una lluvia de reacciones entre los internautas - crédito @ColombiaOscura / X

Una escena poco común alteró la rutina en el sur de Bogotá, cuando un inesperado robo fue captado en video y rápidamente se hizo viral en redes sociales.

El inusual protagonista de la historia fue Firu, un perro conocido en la zona, que se las ingenió para arrebatarle a una mujer el kilo de carne destinado a su almuerzo y salir a la carrera con su botín.

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El curioso incidente, que no dejó heridos salvo el perjuicio económico para la dueña del producto, propició una lluvia de reacciones entre los internautas.

El caso de “Firu” no
El caso de “Firu” no es el primero que involucra a animales y hechos insólitos en la capital colombiana - crédito @ColombiaOscura / X

El suceso fue grabado por un testigo que observó cómo Firu ejecutó su travesura. El video muestra el instante preciso en que el animal aprovecha un descuido, toma el paquete de carne y huye mientras la víctima intenta reaccionar, protagonizando una persecución tan breve como infructuosa. Lejos de generar indignación, el robo suscitó una ola de comentarios humorísticos y empatía hacia la mujer, pero sobre todo hacia el perrito, cuya espontaneidad y rapidez fueron destacadas por cientos de usuarios.

Reacciones de los internautas

Las imágenes del animal, capturadas durante la huida, reforzaron el tono ligero de la anécdota. “Sólo perdió el bolsillo, no el buen humor”, señalaron algunos seguidores del caso, que no tardaron en repartir mensajes de consuelo y risas a la mujer afectada. La fotografía que retrata a Firu en plena carrera con el alimento en el hocico se convirtió en el símbolo de la jornada y encabezó cadenas de publicaciones en diferentes plataformas digitales.

La reacción generalizada en la comunidad virtual fue la de tomar la historia con simpatía, en el que destaca la creatividad y astucia del perro, así como la actitud de resignación de la propietaria, que se vio imposibilitada para recuperar lo que había comprado. “Nadie salió lastimado, salvo el almuerzo de la señora”, resumió uno de los comentarios, en el que celebra el desenlace sin mayores consecuencias.

Estas fueron algunas de las
Estas fueron algunas de las reacciones de los internautas - crédito @ColombiaOscura / X

El caso de Firu no es el primero que involucra a animales y hechos insólitos en la capital colombiana, pero sí ilustra el alcance que pueden tener episodios cotidianos cuando son difundidos por testigos y viralizados en las redes sociales. El impacto del video, que acumuló un elevado número de visualizaciones en pocas horas, demuestra la capacidad de este tipo de situaciones para captar la atención del público y generar conversación en torno al día a día en barrios bogotanos.

Una historia para el recuerdo

Además de la anécdota en sí, las reflexiones de los usuarios giraron en torno al ingenio de los animales callejeros, el ambiente social del sur de la ciudad y el sentido de comunidad que puede surgir en torno a pequeños dramas urbanos. Si bien la protagonista recibió palabras de aliento, muchos resaltaron la necesidad de apoyar la protección y el bienestar de los perros que deambulan por la capital del territorio nacional, por lo que sugieren que las historias como la de Firu también sean una oportunidad para recordar la importancia de la convivencia armónica con estos animales.

Las imágenes del animal, capturadas
Las imágenes del animal, capturadas durante la huida, reforzaron el tono ligero de la anécdota - crédito @ColombiaOscura / X

El episodio, más allá del infortunio de la mujer por la carne perdida, terminó generando solidaridad y buen humor entre los vecinos y en la red. Cabe destacar, que la mezcla de sorpresa, resignación y simpatía con que fue narrada e interpretada la travesura reveló una vez más la capacidad de los habitantes de Bogotá para hacer frente a las adversidades cotidianas con creatividad y una sonrisa. Así, la jornada en el sur de la ciudad dejó una historia para el recuerdo y un nuevo personaje callejero, el ingenioso Firu, que logró lo que pocos pueden, arrancar carcajadas, incluso tras provocar un pequeño perjuicio.