Hijo de Miguel Rodríguez Orejuela aclaró la fecha en que su padre quedaría libre en Estados Unidos y habló de su interés en el América de Cali: “Hace tiempo lo habíamos hecho”

William Rodríguez Abadía desmintió rumores sobre la libertad anticipada del excapo del Cartel de Cali y su posible vínculo futuro con el club vallecaucano

Guardar
Miguel Rodríguez Orejuela seguirá preso en Estados Unidos hasta 2028, según su hijo - crédito @JaimeDinas/TelePacífico

Miguel Rodríguez Orejuela, uno de los líderes del Cartel de Cali, permanece recluido en una prisión de Estados Unidos mientras cumple una condena que marcó a su familia y sigue generando preguntas en Colombia.

William Rodríguez, su hijo, abordó las especulaciones recientes que han circulado tanto sobre una supuesta liberación inminente de su padre como sobre la intención de los Rodríguez de retomar el control o participación en el América de Cali, club con el que estuvieron fuertemente ligados en décadas anteriores.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp

A través de una entrevista para Telepacífico, William fijó postura e introdujo detalles inéditos sobre la situación procesal y personal del excapo.

Miguel Rodríguez Orejuela fue capturado en agosto de 1995 y extraditado a Estados Unidos en 2005, junto a su hermano Gilberto, tras una decisión oficial del Gobierno colombiano.

La familia busca reducir la
La familia busca reducir la condena de Miguel Rodríguez Orejuela por motivos de edad - crédito Fernando Llano/AP

Desde entonces, ha enfrentado un proceso judicial por narcotráfico que materializó una de las extradiciones más comentadas y controvertidas en el país.

En los últimos meses, diferentes versiones señalaban que la libertad de Miguel Rodríguez podría llegar este mismo año, pero su hijo fue enfático en desmentir dicha hipótesis.

“No, son especulaciones que se han tejido, él todavía tiene tres años por hacer, sale en el 2028”, confirmó Rodríguez Abadía.

Durante los casi veinte años de detención en Estados Unidos, la figura de Miguel Rodríguez se mantuvo en la opinión pública tanto por su papel en el narcotráfico como por su relación con el América de Cali, uno de los equipos más emblemáticos del fútbol colombiano.

William Rodríguez profundizó en estas versiones sobre un supuesto interés por retomar vínculos con el club. “No es cierto. Son rumores como tantos que siempre aparecen en torno a nuestra familia. Si hubiéramos querido, hace tiempo ya lo habríamos hecho, pero no”, precisó.

Los hermanos Miguel y Gilberto
Los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela fueron extraditados a Estados Unidos por delitos de narcotráfico y lavado de activos - crédito Colprensa

El entrevistado también reveló que la familia inició algunas gestiones para pedir una reducción de pena, citando razones humanitarias y de salud. “Estamos tratando de presentar algunas mociones, a ver si se puede lograr alguna rebaja y de pronto bajar un año o algo. Es un hombre ya de 82 años, cumple ahora en agosto y pues siempre vienen los achaques de la vejez”, detalló William Rodríguez a Telepacífico.

Esta afirmación recalca que, aunque existe la intención de adelantar una posible salida, las posibilidades aún dependen de decisiones legales en manos de la justicia estadounidense.

A pesar de estas gestiones, la realidad inmediata para Miguel Rodríguez se mantiene vinculada a la condena que debería finalizar en el año 2028. Según lo señalado por William, tras concluir este periodo y por normas migratorias, el excapo sería deportado directamente a Colombia. “Mi padre sería deportado para Colombia, ojalá pueda salir y poder vivir sus últimos años con su familia en Colombia”, expresó.

La relación entre los Rodríguez y América de Cali ha sido materia de controversia durante décadas. El club, durante el apogeo del cartel de Cali, alcanzó logros deportivos que lo posicionaron en el panorama nacional e internacional, aunque cargó con el estigma de pertenecer a la “lista Clinton”, que impidió transacciones económicas con la institución en el exterior.

William Rodríguez Abadía, hijo de
William Rodríguez Abadía, hijo de Miguel Rodríguez Orejuela confirmó que su familia no tiene intenciones de adquirir nuevamente al cuadro escarlata - crédito América de Cali

La historia de la familia Rodríguez dentro del fútbol colombiano nunca dejó de ser motivo de análisis, teoría y rumor, especialmente cuando se trata del posible retorno de antiguos directivos al club.

William Rodríguez abordó este tema, subrayando que ni él ni su padre tienen intenciones de involucrarse nuevamente con el equipo vallecaucano. “Nosotros queremos lo mejor para el equipo y sabemos que los Rodríguez ya somos una historia que pasó y volver sería dramático para la institución”, aseguró.

Esta declaración busca distanciar definitivamente a la familia del entorno deportivo del América de Cali y cortar con los rumores que reaparecen regularmente.

Miguel Rodríguez Orejuela fue una figura central en la estructura de poder del cartel de Cali en las décadas de los años 80 y 90. Su arresto y posterior extradición a Estados Unidos formó parte de la ofensiva judicial y policial internacional contra los carteles de la droga en Colombia.

En la actualidad, según lo expuesto por William Rodríguez, la preocupación principal de la familia radica en el estado de salud del excapo y en garantizar que pueda regresar al país para pasar sus últimos años en compañía de sus seres cercanos.

La noticia de que Miguel Rodríguez Orejuela permanecerá privado de la libertad hasta 2028 despeja las dudas sobre un posible regreso a Colombia en el corto plazo.

Por otra parte, su eventual deportación posterior abre la interrogante sobre cuál será el destino público de una figura que, pese al tiempo y a los cambios profundos en el país, aún genera debate en la sociedad colombiana.

Para América de Cali, las palabras de William Rodríguez constituyen un deslinde enfático respecto al pasado y cierran, al menos desde la óptica de la familia, cualquier posibilidad de reingreso o influencia en la vida institucional y deportiva de uno de los equipos más tradicionales del país.

La entrevista también reavivó el interés público en torno al desenlace de una historia que mezcla narcotráfico, deporte y justicia transnacional, y cuyo desenlace final aún está por escribirse cuando, tras cumplir su condena, Miguel Rodríguez regrese a Colombia después de más de dos décadas de encierro en Estados Unidos.