Exministra Susana Muhamad envió mensaje a aspirantes políticos de cara a las elecciones de 2026: “No debe llevar a la violencia”

La exministra de Ambiente Susana Muhamad ha comenzado una gira por distintas regiones del país con el propósito de abrir espacios de diálogo ciudadano y posicionar propuestas de transformación social, económica y ambiental.

Aunque no ha oficializado su aspiración a la Presidencia en las elecciones de 2026, la dirigente política ha señalado que su presencia en los territorios responde a una intención de fortalecer la agenda progresista y profundizar el cambio iniciado en el actual gobierno.

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En diálogo con el diario El País de Cali, Muhamad se refirió a la coyuntura política nacional, las metas del gobierno del presidente Gustavo Petro, y las ideas que está promoviendo en los encuentros con distintos sectores sociales.

Uno de los temas que marcó la conversación fue el atentado contra el senador Miguel Uribe, hecho que calificó como una señal alarmante sobre la posibilidad de que actores violentos vuelvan a intervenir en la política colombiana.

“Yo no creo que sea tan simple como decir que la causa de esto es lo álgido del debate político, pues este siempre será álgido porque de eso se trata la política. Creo que hay intereses mucho más de fondo, intereses que tienen que ver con la posibilidad de profundizar o no el cambio, que tienen que ver con la democracia, con intereses potencialmente ilícitos en las instituciones y en la economía del país”, señaló.

Para Muhamad, si bien el debate político debe ser vigoroso y marcado por la confrontación de ideas, la violencia no puede convertirse en una herramienta para incidir en el rumbo del país.

Enfatizó que hay intereses estructurales en juego, y que la defensa de la democracia requiere una acción constante y comprometida de la ciudadanía.

En cuanto al balance del gobierno del presidente Petro, del cual hizo parte como ministra de Ambiente, reconoció que han existido obstáculos institucionales y dificultades operativas que han limitado el alcance de algunas reformas.

“Me parece un gran avance el incremento del salario mínimo y demostrar que la capacidad de los trabajadores de invertir más, porque aumenta su salario, ha sido un motor para la economía; me pareció un éxito el control de la inflación de alimentos, la reforma agraria, el medio millón de tierras ya entregadas, y algo que no es menor, el cambio se ha visto reflejado en que los sectores populares de este país, por fin, se ven representados en una voz política en el Gobierno Nacional, que no había pasado antes”, dijo.

Aun así, destacó avances en indicadores sociales como la reducción de la pobreza y el desempleo, así como políticas puntuales como el aumento del salario mínimo, el control de la inflación en alimentos y la redistribución de tierras a través de la reforma agraria.

A su juicio, también es relevante que por primera vez amplios sectores populares se sientan representados políticamente desde el Ejecutivo.

Sobre su rol dentro del Pacto Histórico, Muhamad expresó a El País de Cali su intención de aportar a una estrategia electoral que permita consolidar y extender el proyecto de cambio.

Una de sus principales banderas es la transición hacia un modelo de desarrollo que priorice la vida, el respeto por la naturaleza y el acceso equitativo a recursos básicos como el agua.

“Yo quisiera comprometerme a cambiar la lógica del manejo del agua en este país, garantizar el derecho al agua, al saneamiento básico y que eso se convierta en una agenda de transformación social y económica y territorial”, añadió.

Subrayó la urgencia de transformar la gestión del recurso hídrico en el país, tanto desde el punto de vista ambiental como en el acceso universal y el saneamiento básico.

Además de su enfoque ambiental, la exministra planteó la necesidad de fomentar economías emergentes centradas en la diversidad social y cultural, con protagonismo de asociaciones, cooperativas y poblaciones históricamente excluidas.

Considera que la transformación económica debe ir de la mano de la participación ciudadana activa y de alianzas entre lo público y lo popular.

Al ser consultada por posibles diferencias con el estilo de gobierno del presidente Petro, Muhamad afirmó compartir principios fundamentales como la importancia del poder popular, pero señaló que su enfoque estaría marcado por una mayor apertura al diálogo, el pragmatismo en la gestión pública y un esfuerzo pedagógico por explicar a la sociedad las transiciones propuestas.

A su juicio, las transformaciones profundas implican disputas de poder, pero también requieren construir consensos y visiones compartidas que movilicen amplias mayorías.

Durante su paso por el Valle del Cauca, la exministra se reunió con movimientos sociales, especialmente de mujeres y juventudes, así como con líderes urbanos que surgieron del estallido social de 2021.

En este marco, se instaló un consejo territorial para promover la transición hacia modelos de desarrollo centrados en la vida y el bienestar colectivo. Según anticipó, tiene previsto regresar a la región para reunirse con sectores productivos, emprendedores y la academia que están impulsando iniciativas basadas en la biodiversidad y el conocimiento.

Muhamad destacó el potencial económico del departamento, al tiempo que reconoció los desafíos en materia de seguridad, derivados de la presencia de economías ilícitas. Sin embargo, afirmó que existen condiciones para pensar en una transformación estructural que parta de la articulación de fuerzas sociales y productivas.