Emergencia en Bello: aseguran que la Ungrd se comunicó tarde tras el deslizamiento de tierra que ha dejado 14 muertos

Las intensas lluvias presentadas en el Valle de Aburrá provocaron en la madrugada del martes 24 de junio un deslizamiento de tierra en la vereda Granizal, ubicada en el municipio de Bello, en el norte del departamento de Antioquia.

Según información de las autoridades locales, el derrumbe, causado por el desbordamiento de la quebrada La Negra, destruyó decenas de viviendas y ha dejado hasta el momento 14 personas fallecidas y al menos 12 desaparecidos, mientras continúan las labores de búsqueda y rescate.

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Carlos Ríos, director del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Antioquia (Dagran), afirmó que la respuesta de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) fue tardía frente a la emergencia.

“La Ungrd se comunicó hoy, ya no es ni oportuno, porque uno llega a las emergencias desde el momento cero para atender. Ahí es donde tenemos que ser óptimos en la respuesta. Después de dos días anuncian que mañana van a acompañarnos, yo no lo veo pertinente”, expresó Ríos en entrevista con Blu Radio.

Fue así como el funcionario explicó que las autoridades han georreferenciado siete perímetros en la zona afectada, tarea que facilita el trabajo de los organismos de emergencia para ubicar a las trece personas reportadas como desaparecidas.

Ríos detalló que no habían recibido reportes de riesgo por parte del municipio de Bello, primer respondiente en este tipo de casos, y explicó que los sistemas de monitoreo SIATA y el Área Metropolitana del Valle de Aburrá reportaron que la cantidad de agua caída superó la capacidad diaria, saturando el suelo e incrementando el riesgo de deslizamientos.

Ríos advirtió que las lluvias continuarán en la región y resaltó la importancia de mantener la atención constante: “En este periodo de transición es importante resaltar que no va a dejar de llover. Todas las capacidades ya están contratadas. La información no es estática, se va moviendo de acuerdo al sistema operacional en el punto”.

El director de Dagran señaló que la Gobernación de Antioquia ha quintuplicado los recursos para la atención de emergencias y permanece activa en todo el territorio, “hemos atendido más de 380 emergencias. En todas hemos estado presentes, con o sin la Ungrd. Pero los recursos de la Gobernación no son infinitos y posiblemente otros programas se van a ver afectados”.

En cuanto a las familias evacuadas por el deslizamiento, Ríos aclaró que la salida de los hogares es definitiva y que trabajan en soluciones permanentes junto con VIVA y el municipio, incluida la entrega de subsidios de arrendamiento y el desarrollo de alternativas habitacionales: “La idea es darle subsidio de arrendamiento y, junto con VIVA y el municipio, brindar un resultado final para que estas familias tengan su propio hogar”.

La emergencia en la vereda Granizal de Bello se mantiene activa mientras las autoridades intensifican la búsqueda de los desaparecidos y refuerzan la alerta ante el riesgo de nuevos deslizamientos por las condiciones meteorológicas persistentes.

Según informes técnicos, precipitaciones prolongadas durante más de 36 horas saturaron el terreno en una zona de ladera entre Medellín y Bello, provocando el colapso de una parte de la montaña.

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) reportó que en ese sector se registraron más de 100 milímetros de agua en poco más de un día, a causa de un sistema de baja presión que impacta ampliamente el área metropolitana.

El daño fue mayor debido a las condiciones precarias del asentamiento de Granizal, donde la urbanización informal se ha dado sin control ni planificación orientada a la mitigación de riesgos naturales. Granizal forma parte de los numerosos barrios que se han levantado en los cerros de la zona, caracterizados por la vulnerabilidad de sus infraestructuras.