Alcaldía de Medellín ordenó la demolición de 23 viviendas ante los riesgos por las lluvias

La Alcaldía de Medellín intensificó las acciones de evacuación humanitaria y control territorial en el barrio Villatina, ubicado en la comuna Villa Hermosa, debido a los deslizamientos de tierra que se produjeron el 21 y 22 de mayo, producto de la ola invernal que afectó a la ciudad.

En este caso, 53 viviendas fueron evacuadas debido al alto riesgo que implicaban los deslizamientos, y las autoridades locales decidieron intervenir de manera urgente para evitar tragedias en el futuro.

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La Alcaldía de Medellín ordenó la demolición de 23 viviendas que se encuentran ubicadas en zonas de alto riesgo no mitigable. Esta medida está respaldada por el Decreto 0363 de 2025, el cual declaró la calamidad pública en el distrito, y se apoya también en un informe técnico del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Medellín (Dagrd), que alertó sobre un movimiento en masa en el terreno. Según las autoridades, este deslizamiento podría afectar gravemente la infraestructura vial, las viviendas colindantes y el cauce de la quebrada La Gallinaza, lo que incrementaría aún más los riesgos para la comunidad.

Manuel Villa, secretario de Seguridad y Convivencia de Medellín, señaló que el riesgo de un desastre estructural es severo y que, de no tomarse medidas inmediatas, el área podría enfrentarse a una tragedia aún mayor. Según sus declaraciones a medios de comunicación, la demolición y evacuación de las viviendas en peligro son esenciales para proteger las vidas de las familias residentes en esta zona de alto riesgo. “Esta es una medida urgente y necesaria para evitar, sobre todo, una tragedia, para proteger la vida de las familias asentadas en esta zona de riesgo y para garantizar una respuesta rápida, planificada y respaldada jurídicamente”, indicó Villa.

El proceso de demolición y reubicación de los afectados se lleva a cabo bajo un plan integral que no solo aborda el aspecto operativo, sino que incluye una intervención social y ambiental. Entre los componentes del plan se encuentran la contingencia social, manejo de escombros, disposición adecuada de los materiales desechados y atención especial a los hogares damnificados. Estos hogares serán incorporados a un Plan de Acción Específico para la Recuperación, que incluye acompañamiento psicosocial, subsidios temporales y atención a grupos vulnerables, por lo que garantiza que los afectados reciban el apoyo necesario para superar la situación.

La intervención cuenta con el respaldo de más de 10 dependencias interinstitucionales, que incluye el Dagrd, el Sistema de Alerta Temprana de Medellín (Siata), la Gerencia de Espacio Público, Inclusión Social, Gestión y Control Territorial, así como la Policía Metropolitana, que trabajan de manera conjunta para asegurar una respuesta efectiva ante la emergencia. Además, se llevan a cabo acciones para asegurar que los hogares afectados cuenten con una solución habitacional y con las condiciones mínimas necesarias para iniciar su recuperación.

Este esfuerzo de las autoridades locales tiene como objetivo mitigar el impacto de la ola invernal y los deslizamientos de tierra. La intervención en Villatina es un ejemplo de la importancia de la acción inmediata y la coordinación interinstitucional en situaciones de desastre, lo que destaca el compromiso del gobierno de Medellín en la protección de sus ciudadanos y en la atención de las comunidades más vulnerables.

El Informe de Predicción Climática a Corto, Mediano y Largo Plazo del Ideam indica que, durante el periodo comprendido entre junio y agosto de 2025, las lluvias en la mayor parte del territorio nacional se presentarán en niveles cercanos a los habituales. Este pronóstico sugiere que, en general, se mantendrá una estabilidad en los patrones climáticos en la mayoría del país durante este trimestre.

No obstante, algunas regiones podrían experimentar condiciones diferentes. El modelo determinístico del Ideam señala que en áreas como La Guajira, así como en partes específicas de Tolima, Huila, Vaupés y Amazonas, las precipitaciones podrían ser significativamente menores, con una reducción estimada entre un 10% y un 40% respecto a los promedios históricos.

• San Andrés y Providencia: se prevé un incremento en las lluvias de entre 10% y 20% con respecto a los promedios históricos.
• Región Caribe: en la Península de La Guajira y el litoral del Magdalena, se anticipan déficits de lluvias entre 10% y 30%.
• Región Andina: se espera una disminución de aproximadamente 30% en sectores de Cundinamarca, Tolima, Huila, el centro de Cauca y Nariño. Para el resto de la región, las precipitaciones estarán cercanas a los niveles normales.
• Región Pacífica: en esta región, se prevé que el clima se mantenga similar a las precipitaciones históricas, es decir, que no habrá un cambio significativo en los patrones de lluvias.
• Orinoquía: para esta región, el Ideam prevé que las lluvias se alineen con los valores climatológicos de referencia de 1991 – 2020.
• Amazonía: se estima que las precipitaciones serán cercanas a los promedios históricos, sin grandes variaciones.

Este pronóstico establece un panorama general para las lluvias en diferentes regiones del país durante el próximo trimestre, aunque algunos sectores experimentarán variaciones dependiendo de las condiciones climáticas locales.