Quién es Rafael Curruchiche, el fiscal que pidió orden de captura contra Luz Adriana Camargo e Iván Velásquez por Odebrecht

El lunes 2 de junio de 2025, la Sala Tercera de la Corte de Apelaciones de Guatemala emitió órdenes de captura contra Iván Velásquez Gómez, exjefe de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) y actual embajador de Colombia en el Vaticano, así como contra Luz Adriana Camargo Garzón, fiscal General de la nación de Colombia.

Según los documentos emitidos por la entidad guatemalteca, ambos funcionarios estarían involucrados con el escándalo de la compañía multinacional Odebrecht, por lo que fueron acusados por los delitos de asociación ilícita, obstrucción de justicia, tráfico de influencias y colusión.

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Las órdenes de captura fueron emitidas por el jefe de la Feci, (Fiscalía Especial contra la Impunidad) Rafael Curruchiche, en el que ha manifestado que Velásquez permitió acuerdos de cooperación eficaz con directivos de la constructora brasileña, lo que habría facilitado la pérdida de más de 380 millones de dólares en el país centroamericano.

“Hemos logrado establecer que, desde aproximadamente el mes de enero del año 2017, hay comunicaciones vía correo electrónico del señor Iván Velásquez y la señora Luz Adriana Camargo, con la fiscal general, Thelma Aldana, con el fiscal de la Feci, Juan Francisco Sandoval, con los abogados y con empresarios de Odebrecht (...) Toda esa relación de hecho nos ha permitido solicitar hace aproximadamente dos semanas a una sala de apelaciones del ramo Penal, la orden de captura por los delitos de asociación ilícita, obstrucción de justicia, tráfico de influencias y corrupción”, declaró el fiscal guatemalteco en diálogo con Caracol Radio.

Además, en declaraciones a Blu Radio, el fiscal centroamericano aseguró que en su país “hay suficiente jurisprudencia tanto de las salas de la Corte Suprema de Justicia y los fallos de la Corte de Constitucionalidad, donde se establecen de que cuando un juez natural está recusado, la Sala hace acopio de esa jurisdicción y de esa competencia y de hecho tiene facultad para hacerlo”.

En cuanto a la posible inmunidad de Iván Velásquez y Luz Adriana Camargo para su eventual captura, Curruchiche señaló: “El artículo diez del Decreto 35 2007 que emitió el Congreso de la República de Guatemala, específicamente se refiere a que el comisionado de la Cicig gozará de los privilegios e inmunidades como agente diplomático (...) el señor Iván Velásquez tenía la calidad de diplomático y esta es al momento que deja el cargo. Recuérdese que él se le declaró non-grato en el año 2018 o 2019”.

Su trayectoria en el Ministerio Público comenzó en 2005, donde desempeñó funciones en fiscalías dedicadas a la trata de personas y al robo de vehículos.

En 2016, asumió la dirección de la Fiscalía contra Delitos Electorales, y en agosto de 2021 fue designado como jefe de la Feci tras la destitución de Juan Francisco Sandoval, que había liderado investigaciones de alto impacto contra la corrupción.

Desde su llegada a la Feci, Curruchiche ha enfrentado acusaciones de utilizar su posición para proteger a figuras políticas y perseguir a opositores.

Entre los casos más destacados bajo su gestión se encuentra el del periodista José Rubén Zamora, fundador de El Periódico (Guatemala), condenado por lavado de dinero en un proceso que, según diversos organismos internacionales, constituyó una represalia por sus investigaciones periodísticas.

Además, Rafael Curruchiche también ha sido señalado por archivar investigaciones que involucraban al expresidente Alejandro Giammattei y por iniciar acciones legales contra fiscales y jueces que participaron en casos anticorrupción.

Estas actuaciones han sido interpretadas por analistas y organizaciones internacionales como parte de una estrategia para desarticular los esfuerzos anticorrupción en Guatemala.

En 2022, el Departamento de Estado de Estados Unidos incluyó a Curruchiche en la Lista Engel, que identifica a actores corruptos y antidemocráticos en Centroamérica. El gobierno estadounidense lo acusó de obstruir investigaciones de corrupción y de iniciar procesos judiciales considerados espurios contra fiscales y exinvestigadores de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig).

Frente a su inclusión en dicho listado de la entidad norteamericana, Curruchiche señaló que la investigación se origina por una donación de 2 millones de quetzales a una asociación de desarrollo social por parte de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid, por sus siglas en inglés).

“Resulta que los directivos de esta asociación eran también directivos de un banco y este dinero, en vez de invertirlo en las comunidades, lo que hicieron fue comprar acciones de ese banco y esas acciones le generaron intereses. Y estas personas tienen un peso financiero y un peso político en Guatemala, y a raíz de eso es que se da esa vinculación con un ex embajador de Estados Unidos en Guatemala, y por eso es que lo que tengo entendido que se me incluye en esa lista”, declaró el fiscal de Guatemala en Caracol Radio.

El papel de Curruchiche en la judicialización de procesos políticos y en la desarticulación de iniciativas anticorrupción ha generado preocupación sobre el estado de la democracia y el Estado de derecho en Guatemala.

En Colombia, la decisión de Curruchiche ha provocado reacciones divididas. Algunos celebraron la medida, mientras que otros la critican por considerarla un ataque a quienes han liderado la lucha contra la corrupción en la región. La controversia en torno a la figura de Curruchiche refleja las tensiones existentes en el ámbito judicial y político de Guatemala, así como el impacto de sus decisiones en el contexto internacional.