
Mientras en el escenario público del Congreso la atención se ha centrado en la reforma laboral y la consulta popular, dentro del Pacto Histórico ha comenzado a gestarse una disputa interna.
El eje del conflicto está en cómo se estructurarán las listas para Senado y Cámara en las elecciones legislativas de 2026.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel

La definición de candidatos ya genera tensiones entre los sectores que integran esta coalición política.
A pesar de los intentos de consolidar un único partido de izquierda, el rechazo a la reforma que permitía el transfuguismo, archivada en sexto debate, ha complicado el proceso. La expectativa ahora recae en las decisiones que adopte el Consejo Nacional Electoral (CNE) sobre la posibilidad de que el Pacto Histórico pueda convertirse en partido único.
Mientras se resuelve ese punto legal, la atención de los diferentes sectores del Pacto gira en torno a las candidaturas al Congreso. Los partidos que integran la coalición coinciden en que las listas serán cerradas y deberán cumplir con criterios de paridad de género. No obstante, el debate se concentra en cómo se definirán los nombres y las posiciones dentro de las listas.
La experiencia de las elecciones de 2022 ha generado prevención entre los movimientos que hacen parte del Pacto. En aquella ocasión, el armado de las listas fue cuestionado por la concentración de poder en algunos líderes, y ahora las colectividades quieren evitar que se repita ese escenario. La idea es asegurar una participación equitativa para todos los sectores.
Se ha conocido que, dentro de la coalición, hay una propuesta de realizar una consulta interna el 26 de octubre. En esa jornada se definirían tanto los candidatos como el orden en las listas al Congreso. Según fuentes del Pacto Histórico, esa consulta es vista como una fórmula para reducir los conflictos internos y garantizar transparencia en la asignación de los cupos.
Actualmente, el Pacto Histórico cuenta con 20 senadores y 29 representantes a la Cámara. La apuesta es ampliar esa representación en 2026. Sin embargo, el orden de los aspirantes genera debate. Cada colectividad quiere ocupar los primeros lugares en las listas. Desde el Polo Democrático insisten en que, como fuerza tradicional de izquierda, les corresponde una participación destacada. “Somos el partido de izquierda histórica y debemos estar representados con al menos ocho nombres entre los primeros puestos al Senado”, afirman dirigentes de esa colectividad.
Colombia Humana, por su parte, sostiene que avaló la candidatura de Gustavo Petro a la Presidencia y por ello también tiene derechos dentro de las listas. La Unión Patriótica (UP) recuerda su respaldo constante al presidente y reclama que esa lealtad se traduzca en escaños en el Congreso.
La definición de la cabeza de lista no genera mayor disputa, pues todos coinciden en que el presidente Gustavo Petro dará la línea sobre quién liderará las candidaturas al Senado y a la Cámara en cada departamento. “El guiño del presidente Gustavo Petro será fundamental para determinar la cabeza de lista al Senado y en los departamentos para la Cámara”, aseguran sectores del petrismo.
Los lugares a partir del segundo puesto serían definidos con base en los resultados de la consulta. Allí comenzarán los movimientos internos para asegurar representación. La dificultad es que muchos congresistas actuales desean repetir, al tiempo que nuevos aspirantes buscan entrar en la lista, lo que genera una alta congestión de nombres.
Entre los que pretenden escalar al Senado figuran María Fernanda Carrascal y David Racero, mientras que Heráclito Landinez permanecería en la Cámara por Bogotá y podría liderar esa lista. María José Pizarro, si no se postula a la Presidencia, volvería a buscar un escaño en el Senado.
A pesar del entusiasmo, hay incertidumbre entre los actuales legisladores. Los especialistas en política electoral proyectan que el respaldo electoral del Pacto podría reducirse, debido al desgaste del Gobierno. La consecuencia sería que no todos los actuales congresistas lograrían repetir y varios quedarían fuera del Congreso si se ubican en posiciones bajas dentro de las listas.
Otro factor en juego es la viabilidad jurídica del partido único. Si el CNE no aprueba la integración, las colectividades tendrían que ir por separado en 2026, lo que implicaría riesgos como no alcanzar el umbral electoral y perder la personería jurídica. El éxito de 2022 se debió, en gran parte, a que las fuerzas se unieron en una sola lista. Por eso, los sectores que integran el Pacto esperan que la decisión del CNE permita seguir en bloque.
La conformación de las listas legislativas, más allá de ser un trámite administrativo, se ha convertido en un punto de tensión interna. La consulta de octubre y la resolución del CNE definirán si el petrismo logra cohesionar su base para 2026 o si se fragmenta antes de las urnas.
Más Noticias
“¿Corrupción o abuso de poder?”: senador petrista denuncia a Satena, pero le recuerdan que es estatal
Al senador Muñoz se le impidió abordar un vuelo en el aeropuerto de Carepa-Apartadó, a pesar de tener el proceso de registro finalizado y de encontrarse a tiempo en la terminal aérea

Camilo Trujillo fue el eliminado ‘La casa de los famosos Colombia’: así fue su paso por el concurso
El actor sorprendió con su regreso a las pantallas después de ingresar al concurso y aunque inicialmente no tuvo mayor relevancia, fue ganándose el cariño del público

Ocho personas siguen desaparecidas en Guaviare tras ser citadas por disidencias de las Farc
El 3 de abril, uno de los desaparecidos recibió una videollamada en la que se le solicitaba que, junto a otra persona, acudiera a una reunión en la vereda Puerto Nuevo

A 17 años de su debut, SHINee lidera el ranking de K-Pop en Colombia
BoA, TVXQ y Rain fueron de los primeros idols en impulsar la expansión del K-pop fuera de Corea del Sur

Sinuano Noche: revise los resultados del último sorteo del domingo 25 de mayo
Esta lotería nocturna es un juego de azar con gran popularidad en Colombia con raíces en la Costa del Caribe
