Primeras imágenes de la liberación de Lyan Hortúa, el niño que estuvo 18 días en poder de las disidencias de las Farc

En la tarde del miércoles 21 de mayo, tras 18 días de cautiverio, el niño Lyan José Hortúa, de 11 años, recobró la libertad en Jamundí (Valle del Cauca).

Las primeras imágenes del menor llegan desde la Clínica Valle de Lili, en el sur de Cali, donde fue recibido con cariño y atención médica tras el traumático secuestro que conmocionó a la región.

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Lyan José fue secuestrado el sábado 3 de mayo en su vivienda del corregimiento de Potrerito, zona rural de Jamundí. El hecho fue atribuido por las autoridades al frente Jaime Martínez de las disidencias de las Farc, un grupo armado ilegal que opera en la zona.

El rescate del menor fue posible gracias a la mediación de la Defensoría del Pueblo, que facilitó el proceso para que Lyan pudiera regresar con su familia. En las imágenes que se difundieron desde la clínica, se observa al niño llegando acompañado por personal médico y de seguridad, mostrando signos de agotamiento, pero ya en compañía de sus seres queridos.

En el clip, familiares y amigos lo reciben con abrazos y palabras de aliento. Se ve a Lyan bajando de una camioneta con una camisa roja y pantalón oscuro, luego camina entre quienes lo reciben para luego refugiarse con su familia y recibir atención médica oportuna.

La defensora del Pueblo, Iris Marín, confirmó que el niño se encuentra en buen estado de salud, aunque sigue en observación médica. Marín hizo un enérgico llamado a los grupos armados ilegales para que dejen al margen a los niños, niñas y jóvenes del país en el conflicto armado.

“Quiero aprovechar esta situación para hacer un llamado a todos los grupos armados, a que respeten el derecho internacional humanitario, a que respeten la vida, la libertad de todas las personas, pero especialmente el de los niños y las niñas que tienen que estar fuera de la guerra,fuera de la violencia, que sea esto una oportunidad para renovar ese compromiso y realmente sacar a los niños de la guerra”, enfatizó la defensora.

Este caso ha generado amplio rechazo en diversos sectores sociales y gubernamentales, que han condenado el secuestro y exigido garantías para la protección de la niñez en zonas afectadas por el conflicto.

Tras la liberación de Lyan, la prioridad inmediata ha sido su bienestar y la reunión con su familia, según confirmó el brigadier Oviedo de la Policía Nacional. Sin embargo, el proceso judicial y de investigación contra los responsables del secuestro continúa firme y en marcha.

El brigadier destacó que, junto con la Fiscalía General de la Nación, las autoridades seguirán avanzando en la línea investigativa que ya ha permitido identificar a los integrantes del frente Jaime Martínez de las disidencias de las Farc involucrados en el delito. “Lo más importante es que hoy se dio la liberación del menor, en este momento ya se encuentra con su familia y es la prioridad. Lo que sigue es que, con la Fiscalía vamos a seguir avanzando en la línea investigativa que nos van a permitir tener las órdenes de captura de los integrantes del frente Jaime Martínez, responsables de estos hechos”, explicó.

Esta investigación ha sido clave para desmantelar la estructura criminal que operó en Jamundí y colaboró en el secuestro de Lyan Hortúa. El brigadier Oviedo subrayó la importancia del trabajo coordinado con la Fiscalía: “La línea investigativa nos ha permitido identificar quienes ordenaron el secuestro y quienes materializaron, por eso es fundamental el trabajo con el ente acusador”.

Desde la Policía Nacional reafirmaron su compromiso de actuar con prontitud para evitar que hechos como este se repitan y garantizar la seguridad en las zonas afectadas por el conflicto armado.