
En la tarde del miércoles 21 de mayo hubo júbilo y esperanza tras la liberación de Lyan José Hortúa, un niño de apenas 11 años, que a su corta edad tuvo que vivir la crudeza de la violencia que azota el país.
El proceso se llevó a cabo gracias al apoyo de la Defensoría del Pueblo, que habría llegado hasta Villacolombia, zona rural de Jamundí (Valle del Cauca), para recoger al menor y trasladarlo a la Clínica Valle del Lili, en Cali, donde se reunió con sus familiares y fue sometido a una valoración médica para confirmar su buen estado de salud.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.
Aunque la teoría más fuerte que han manejado las autoridades públicamente, es que Lyan José fue secuestrado por el frente Jaime Martínez de las disidencias de las Farc, en un contexto del conflicto armado que ha afectado de distintas formas al municipio y, en general, al Valle del Cauca, lo cierto es que también surgió la hipótesis de que el rapto fue motivado por una millonaria deuda de la familia del menor a un temido capo del narcotráfico.
Disidencias de las Farc habrían secuestrado al menor por orden del capo extraditado Diego Rastrojo
De acuerdo con información conocida por Semana, el secuestro de Lyan José Hortúa no fue producto de una extorsión común, sino parte de una compleja disputa entre grupos criminales ligados al capo conocido como “Diego Rastrojo”.
De acuerdo con testimonios citados por el medio, el frente Jaime Martínez de las disidencias de las Farc cumplían una orden de “Diego Rastrojo”, que habría pagado para capturar a Jorsuar Suárez, padrastro de Lyan, o a su madre, Angie Bonilla. Sin embargo, al no encontrar a ninguno de los dos, “se llevaron al menor de apenas 11 años” por error, reconoció la estructura criminal.
Este error se convirtió en una presión económica para la familia. Angie Bonilla, madre del menor, habría accedido a las pretensiones financieras para la liberación del niño superaba los $37.000 millones, suma que correspondería a la antigua deuda familiar con el capo.

Angie Bonilla, según el medio, habría sido testaferra de “Diego Rastrojo” y de José Leonardo Hortúa, alias Mascota, su expareja y padre de Lyan, que fue asesinado en Cali en 2013.
Posteriormente, Angie Bonilla se casó con Jorsuar Suárez, reconocido joyero de la capital vallecaucana, y se volvió influencer bajo el nombre de Barbie Vanesa, alejándose públicamente de su supuesto pasado criminal.
Tras la muerte y extradición de ambos, esos bienes habrían sido trasladados a terceros, generando un conflicto cuando varios alfiles de “Los Rastrojo” regresaron al Valle del Cauca y detectaron la ausencia de los recursos. “La plata y los bienes no estaban”, afirmó una fuente oficial citada.
Ante esta situación, Los Rastrojos habrían contratado a la disidencia Jaime Martínez para presionar por el pago, ordenando el secuestro de Suárez o Bonilla, que terminó en el rapto del niño.
También se conoció que, a través de intermediarios desde cárceles, la familia habría podido enviar un medicamento vital para Lyan y mantener comunicación vía videollamadas. El padrastro confirmó al medio: “Sí, hablamos en un par de ocasiones. A él lo tuvieron amarrado los primeros cuatro días”.
Un investigador, citado por el medio, comentó que, incluso, intentaron la intermediación de narcotraficantes presos del Valle del Cauca: “Ellos le dijeron que no se podían meter, que lo único que podían hacer es velar por la vida del niño, pero la plata se debía pagar completa”.

Esta información del secuestro fue conocida por la Policía Nacional, lo que descartó operativos de rescate y provocó la retirada de organismos de derechos humanos por la complejidad y peso de los involucrados. “Aquí estamos hablando de pesos muy pesados”, indicó una fuente citada.
El jueves siguiente a la liberación, Sebastián Bonilla, tío de Lyan, criticó la actuación estatal y el proceso de negociación: “Muchas personas del Estado nos decían que había que negociar con ellos y eso fue lo que hicimos, porque no nos ofrecieron más soluciones que esa. Sentimos un total abandono del gobierno de Gustavo Petro”.
Bonilla afirmó que tuvieron que pagar el rescate debido a la “poca eficiencia de la autoridad” y a la preocupación por la seguridad del niño. “El valor me lo reservo por seguridad del niño y de nosotros, pero nos vimos en la obligación de pagar un rescate (...). En este momento nos dejaron endeudados”.
No obstante, la investigación confirmaría que ese pago, finalmente pactado por $4.000 millones, fue el primer abono de la vieja deuda con Diego Rastrojo.
El dinero fue entregado en efectivo en Jamundí el 21 de mayo y recogido por un emisario de la disidencia Jaime Martínez. Luego, se verificó la suma y se notificó a Los Rastrojos, quienes coordinaron la entrega del niño a la Cruz Roja Internacional y la Defensoría del Pueblo.
El proceso de pago habría fracasado días antes, ya que los captores exigían que la madre o el padrastro subieran a la zona rural alta de Jamundí para el intercambio. La familia se negó y pidió que intermediarios oficiales llevaran el dinero, pero estas entidades declinaron, lo que llevó a su retiro del proceso de negociación.
Más Noticias
Ministerio de Minas propone que zona minera de Jericó (Antioquia) se convierta en reserva ambiental
Además el ministro de Defensa, el general (r) Pedro Sánchez, anunció el plan para combatir la minería en el departamento

Ministerio de Defensa ofrece $ 1.000 millones por quienes fraguan atentado contra el director de la Policía Nacional
El general (r) Pedro Sánchez apeló a la solidaridad de la ciudadanía para proteger a los uniformados que son los que les garantizan la seguridad y la libertad

Day Vásquez, exesposa de Nicolás Petro, denunció nueva intimidación
La testigo estrella en el proceso penal contra el hijo del presidente de la República aseguró que llegaron hasta su casa a preguntar por ella y luego le enviaron un mensaje atemorizante

Pico y Placa Bogotá: evita multas este viernes
¿Cuáles son los autos que no tienen permitido circular este día? Revísalo y evita una multa

Fuerte temblor sacó de la cama a los habitantes del Cauca y del Valle
No se reportan personas o edificaciones tras el recio sismo que tuvo epicentro en el océano Pacífico
