Alias el Mono y alias Julieth: esta es la pareja capturada como responsables del asesinato del expresidente de Tigres FC

La Policía Metropolitana de Bogotá confirmó la captura de un hombre y una mujer que serían los responsables del asesinato de Édgar Jesús Páez Cortés, expresidente del club de fútbol Tigres FC, ocurrido en Bogotá el 23 de septiembre de 2023.

Mediante la materialización de dos órdenes de captura en Bogotá y Pereira, alias el Mono y alias Julieth fueron detenidos en diligencias de allanamiento y registro, adelantadas por la Policía Nacional a través de la Seccional de Investigación Criminal, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación.

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El proceso de recopilación de elementos materiales probatorios tuvo una duración aproximada de 18 meses, durante los cuales se analizaron “200 horas de análisis de video, búsquedas selectivas en bases de datos, declaraciones juradas, reconocimientos fotográficos, vigilancias, análisis link y triangulación de comunicaciones. Nuestros investigadores lograron identificar el actuar criminal de estos delincuentes”, detalló el boletín entregado por las autoridades.

Juan Sebastián Cruz Álvarez, alias el Mono, fue capturado mientras se movilizaba en una motocicleta con los sistemas de identificación regrabados. En ese momento debía estar cumpliendo una medida de prisión domiciliaria por el delito de hurto. Se desempeñaba como sicario.

Por su parte, Julieth Zuluaga Aguirre, alias Julieth, fue detenida en la capital de Risaralda. Según las autoridades, su función durante el crimen fue realizar seguimiento constante a la víctima hasta que llegó al lugar donde ocurrieron los hechos.

Posteriormente, decidió trasladarse a Pereira, donde se refugiaba para evadir a las autoridades.

Ambos detenidos utilizaban el cambio frecuente de líneas telefónicas para evitar ser rastreados con facilidad por los organismos de seguridad.

En las diligencias se incautaron tres celulares, licencias de conducción, cédulas de ciudadanía, municiones para armas de fuego calibre .38 y otros documentos. Tanto “El Mono” como “Julieth” ya figuraban en el Sistema Penal Oral Acusatorio (Spoa) por los delitos de lesiones personales, hurto calificado y agravado, extorsión, receptación, cohecho por dar u ofrecer, y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego.

Tras confirmarse su captura, fueron presentados por la Fiscalía General de la Nación ante un juez de la República, quien les dictó medida de aseguramiento en centro penitenciario y carcelario.

Los dos hombres habrían seguido a la víctima con anterioridad, y cuando salía del estadio Metropolitano de Techo, en el sur de la ciudad, en dirección a la localidad de Puente Aranda, fue interceptado por la pareja en dos motocicletas. El ataque ocurrió mientras se movilizaba a bordo de un vehículo en compañía de su hija, en la Avenida Américas con carrera 50, una de las vías más concurridas de ese sector de Bogotá.

Allí, de manera indiscriminada y sin pronunciar palabra, le dispararon en repetidas ocasiones, causándole la muerte de manera inmediata.

De acuerdo con El Tiempo, una de las hipótesis que más fuerza cobró fue la de un posible ajuste de cuentas relacionado con apuestas clandestinas al interior del fútbol profesional colombiano. No obstante, las autoridades no confirmaron las verdaderas razones del homicidio.

El medio de comunicación reveló que la suma de 30 millones de pesos fue suministrada para contratar a los sicarios, lo que indicaría que se trató de un acto premeditado.

En su momento, Tigres FC emitió un comunicado en el que lamentó el asesinato de su máximo dirigente: “La familia Tigres y la comunidad deportiva estamos devastados por este suceso. Édgar Páez Cortés era un apasionado defensor del fútbol y un líder ejemplar. Su compromiso con el equipo y su dedicación al desarrollo del deporte en nuestra región dejaron una huella indeleble en todos los que tuvieron el privilegio de conocerlo”, decía el documento.