Armando Benedetti reveló que había senadores dispuestos a “inmolarse” por la consulta popular: estos serían los que se iban a sacrificar

El ministro del Interior contó que, al ver que se hundía la propuesta del presidente Gustavo Petro, un grupo de congresistas, que inicialmente se había apartado de la votación para no ir en contra de sus partidos, intentaron regresar al recinto para apoyar al Gobierno

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El ministro del Interior, Armando
El ministro del Interior, Armando Benedetti, hizo revelaciones sobre lo que tenían planeado durante la fallida jornada para el Gobierno de la consulta popular - crédito Andrea Puentes/Presidencia

La sesión del Senado de la República del miércoles 14 de mayo de 2025, en la que se hundió la consulta popular, el mecanismo con el que el presidente Gustavo Petro quería sacar adelante la hoy resucitada reforma laboral, continúa generando fuertes reacciones entre los que fueron protagonistas -para bien o para mal- de una agitada jornada: en la que por solo dos votos fracasó la intención del Ejecutivo de convocar los colombianos a las calles para decidir sobre este trascendental asunto para los trabajadores del país.

En efecto, la balanza quedó con 49 votos en favor de que la iniciativa no prosperara, frente a 47 que querían que tuviera éxito; en un lapso en el que el ministro del Interior, Armando Benedetti, acusó al presidente de la corporación, Efraín Cepeda, de impedir que algunos de los senadores ejercieran su derecho; pese a que se abrió el registro por 2 minutos y 12 segundos, previo aviso de que se llevaría cabo la sesión. El funcionario, de hecho, también acusó al secretario general, Diego González, de fraude, por la confusión generada con el voto del senador Édgar Díaz Contreras.

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En este escenario, y frente a la preocupación -que terminó haciéndose real- de que la consulta tuviera un fuerte revés, Benedetti confesó en entrevista a medios radiales que, pese a que hubo seis senadores que decidieron apartarse de la decisión, algunos de ellos para no violar la ley de bancadas que los obliga a acogerse a la postura en bloque, hubo algunos que, según él, estaban dispuestos a “inmolarse” por el éxito de la consulta, pues de haber participado se sometían a fuertes sanciones.

La oposición logró superar en votos a la bancada de Gobierno, derribando la posibilidad de hacer una consulta popular para revivir la reforma laboral - crédito Prensa senador Esteban Quintero

Cabe destacar que si iban en contravía a lo dispuesto por sus colectividades, serían objeto de duras sanciones, como la pérdida del derecho a voz y voto en el cuerpo legislativo, en periodos que serían definidos por cada representatividad. De ahí el término usado por el ministro, pues representaba anteponer sus intereses personales por los del Gobierno; aunque en medio de la incertidumbre de si detrás habría algún tipo de beneficio por esta determinación.

“Yo sé, ellos estaban pensando en tomar la decisión y déjeme usar esta palabra: la de inmolarse por la consulta, votar sí y asumir las consecuencias”, dijo Benedetti en diálogo con Blu Radio, e insistió en que la determinación no estaba atada a ninguna prebenda. “Yo siempre tuve como seis que se querían inmolar por la consulta. Por eso el señor (Cepeda) cierra a los dos minutos, apenas ven entrando al recinto, el señor Efraín Cepeda se da cuenta y cierra la votación. Actúa como malandrín”, apuntó el ministro.

El secretario General del Senado,
El secretario General del Senado, Diego González, fue el encargado de anunciar el hundimiento de la consulta popular - crédito X

¿Cuáles serían los senadores que estaban dispuestos a ‘inmolarse’ por el Gobierno?

Según dijo el mismo Benedetti al medio radial, dos de esos senadores que estaban listos para intentar salvar la consulta, pero se encontraron con el registro cerrado, fueron Temístocles Ortega, del partido Cambio Radical, aunque cercano a las propuestas de Petro; y, del mismo modo, Ana María Castañeda. “Teníamos los votos (...) a mí me avisan que ya venían en camino”, reiteró Benedetti, que contó como, según su versión, Cepeda cerró el tablero “al segundo” de que se dio cuenta de que tenía ventaja.

En su explicación, el ministro insistió, una y otra vez, que pese a que la ley de bancadas pone una especie de talanquera a los congresistas que quieran irse a una voluntad contraria a la colectividad, ellos pudieron haberse declarado en rebeldía; aunque ello les implicara perder sus derechos políticos. En total fueron nueve los senadores que no depositaron su sufragio por diferentes motivos; entre ellos Peralta, que pese a las acusaciones del periodista Néstor Morales de que estaba en un salón de belleza, indicó que atendía un problema médico.

Temístocles Ortega, senador de Cambio
Temístocles Ortega, senador de Cambio Radical, que habría estado dispuesto a "inmolarse" por el Gobierno, según Armando Benedetti - crédito Sergio Acero/Colprensa

Es válido precisar que el único senador que se sometió a la objeción de conciencia para no participar de la votación de la consulta fue Didier Lobo, de Cambio Radical. Mientras que Angélica Lozano, del partido Alianza Verde, y Richard Fuelantala, de las Autoridades Indígenas de Colombia (Aico), tampoco votaron, por motivos que aún no han quedado claros ante la opinión pública. Por su parte, Carlos Andrés Trujillo, del partido Conservador y que también sería fiel a Petro, al igual que sus compañeros, Carlos Benavides y Óscar Barreto, decidieron apartarse de la decisión de su bancada que se fue en contra de la consulta.

Nosotros sabíamos que (Angélica) se iba... Yo la había puesto entre los del no y lo más seguro era que no fuera a votar”, precisó Benedetti sobre este caso.