Tragedia en La Guajira: niña de 3 años resultó herida por una bala perdida en una celebración

La menor de edad participaba en actividades recreativas del Día del Niño cuando fue impactada por el proyectil

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La bebé permanece internada en
La bebé permanece internada en centro médico tras lo ocurrido - crédito Freepik

Una celebración comunitaria en el municipio de Fonseca, ubicado en el departamento de La Guajira, terminó en tragedia, pues una niña de tan solo 3 años de edad resultó gravemente herida por una bala perdida, mientras participaba de un evento organizado para conmemorar el Día del Niño en el parque infantil del barrio El Campo, donde la menor compartía con otros niños en actividades lúdicas.

De acuerdo con la información publicada por el medio local La Guajira Hoy, la actividad fue organizada por la ‘Unión Temporal Construyendo Paz’ y contó con la participación de niños de varias Unidades Comunitarias de Atención del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), entre ellas la del Castillito de Colores Número Uno de la urbanización Villa Hermosa, donde la niña recibe educación inicial.

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En medio de un ambiente de juegos y música, un disparo inesperado interrumpió la jornada, dejando a la pequeña gravemente herida, lo que detuvo de inmediato las actividades y causó pánico entre los presentes. La víctima fue identificada como Elismar Esther Garizabal Villa.

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Lo que parecía ser una tarde de juegos terminó en tragedia - crédito Pixabay

El relato de los presentes indica que el desconcierto se apoderó del lugar cuando Mónica Isabel Contreras, abuela de la menor, y las madres comunitarias notaron que la niña comenzó a sangrar. Según detalló el medio, el pánico se extendió entre los asistentes al no saber de dónde provenía el disparo ni quién lo había efectuado, por lo que la situación se tornó crítica mientras intentaban auxiliar a la niña.

En medio de la confusión, la pequeña fue trasladada de urgencia al hospital San Rafael de San Juan del Cesar, donde ingresó a la Unidad de Cuidados Intensivos. El neurocirujano Juan Miranda, fue el encargado de atender el caso y explicó que la bala, aparentemente disparada por una pistola de nueve milímetros, ingresó por el cuero cabelludo y quedó alojada en el hueso temporal izquierdo.

Por esta razón, la víctima tuvo que ser sometida a una cirugía, que fue descrita por el especialista como delicada, pero necesaria para estabilizar a la paciente y salvar su vida.

El médico señaló que, aunque el proyectil no afectó estructuras vitales, provocó inflamación cerebral y un sangrado importante, por lo que la niña permanece intubada y sedada para garantizar su reposo absoluto. Según el reporte médico, difundido por el medio local, su condición es estable, pero sigue siendo delicada. Así que en tres días se le realizará una nueva tomografía para evaluar su evolución.

Con cámaras de seguridad los
Con cámaras de seguridad los investigadores buscan dar con la identidad del agresor - crédito Freepik y Colprensa

Ante la gravedad de los hechos, la Policía Judicial del tercer distrito, Sijín, se encuentra llevando a cabo la respectiva investigación para esclarecer los hechos, teniendo en cuenta que las circunstancias del disparo aún son confusas, y no se ha identificado al responsable ni el origen del proyectil, por lo que es necesario contar con la colaboración de la comunidad para obtener cualquier tipo de información que permita dar con su paradero y conducirlo a la justicia.

Este nuevo acto de violencia dejó a la familia de la pequeña Elismar sumida en la angustia y a la comunidad exigiendo respuestas sobre cómo ocurrieron los hechos en medio de un evento que estaba destinado a llevar alegría a los pequeños y terminó en una tragedia.

La menor fue impactada en
La menor fue impactada en la cabeza por el proyectil - crédito iStock

Entre tanto, la ciudadanía está a la espera de la evolución médica de la niña que resultó lesionada y exigen celeridad en las investigaciones que se adelantan por parte de los uniformados, pues temen que el criminal involucrado en esta situación pueda volver a actuar y terminar afectando la seguridad de más pequeños o, incluso, acabando con su vida de no llegar a controlarse la situación.