David Racero respaldó a María José Pizarro ante el “matoneo” del que denunció ser víctima por Jota Pe Hernández

En un nuevo episodio de tensiones dentro del Senado de la República de Colombia, el representante a la Cámara David Racero, miembro del Pacto Histórico, expresó su apoyo a la senadora María José Pizarro, de su mismo partido, que denunció lo que considera una constante situación de acoso y “matoneo” por parte de su colega Jota Pe Hernández. Este episodio provocó una ola de reacciones en el ámbito político y reavivó el debate sobre la violencia política y el respeto entre congresistas.

La senadora María José Pizarro utilizó su intervención en la Comisión Primera del Senado para manifestar su inconformidad frente a lo que ella describe como “tergiversaciones constantes” de parte de Hernández. Durante su discurso, la congresista se refirió a la actitud de su homólogo, a quien acusó de manipular información con el fin de obtener beneficios políticos y generar un ambiente hostil dentro del Congreso.

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“Yo creo que lo que estamos es ante un tergiversador profesional. Lo que hace el senador siempre es utilizar las palabras, tergiversarlas, editarlas, editar rostros, editar caras, editar palabras y coger las palabras de uno a su acomodo. Esa es la realidad. Así que quien miente, senador, es usted”, señaló Pizarro en su intervención.

Según Pizarro, este tipo de prácticas buscan desacreditar a sus oponentes políticos y generar confusión en el debate público. Además, enfatizó que el congresista en cuestión actúa como si fuese “el dueño de la verdad” y un “juez” que “se cree con el derecho de juzgar a todo el mundo si no actúa como a él le conviene o como él quiere”.

María José Pizarro también mencionó que la Comisión de Ética, presidida por Jota Pe Hernández, ya acumula varias quejas en su contra, lo que, según ella, pone en evidencia un patrón de comportamiento que debe ser revisado por las instancias pertinentes por lo que la legisladora petrista exigió al senador que no se dirigiera a ella fuera de los espacios formales del Congreso.

A esta situación respondió David Racero, que señaló su respaldo a su colega de partido, condenando lo que considera un “uso indebido” del poder político para atacar y desacreditar a otros congresistas, en particular a las mujeres en el ejercicio de sus funciones. El congresista utilizó su cuenta en la red social X para expresar su solidaridad a Pizarro y hacer un llamado a la justicia para que intervenga en esta situación.

“No pueden seguir cabalgando en falsa popularidad sobre el irrespeto, la injuria, la difamación, el acoso, la calumnia, el hostigamiento, el señalamiento y, en general, la mentira. Y no debe ser aceptable que sean las víctimas de estas prácticas las que tienen que salir a dar explicaciones de sus infamias. Confiamos en la justicia para hacer respetar el derecho a hacer política decente y a que se sancione esa nueva ola de querer trasladar al escenario político sus tentaciones criminales. Solidaridad @PizarroMariaJo!”, escribió el representante.

Las palabras de Racero reflejaron un creciente malestar dentro de ciertos sectores del Congreso, en los que se considera que el debate político cruzó límites que afectan la convivencia y la discusión democrática. Su declaración se suma a otras voces dentro del Pacto Histórico y partidos afines, que denunciaron una escalada de ataques y descalificaciones personales que desvirtúan el propósito del debate legislativo.

Por su parte, el senador Jota Pe Hernández no ha respondido de manera directa a las acusaciones de Pizarro ni al mensaje de Racero, aunque en anteriores ocasiones ha defendido su estilo de hacer política, bajo el argumento de que su crítica es hacia las estructuras de poder y que su intención es evidenciar lo que considera incoherencias dentro del Congreso.

No obstante, la discusión escaló hasta un punto en el que se plantea la posibilidad de acciones legales o disciplinarias contra el senador, dependiendo de las investigaciones que puedan surgir a raíz de estas denuncias.