Vacaciones de Semana Santa: esto es lo que debe tener en cuenta a la hora de planificar sus viajes y evitar gastos inesperados

La Semana Santa es una de las temporadas más esperadas por los colombianos para disfrutar de unos días de descanso, reflexión y, en muchos casos, para viajar dentro o fuera del país.

De acuerdo con la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato), durante esta misma temporada en 2024, más de 460.000 viajeros salieron de Colombia con Estados Unidos, México y España como los destinos preferidos en el ámbito internacional.

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Sin embargo, en un contexto de alta demanda, variaciones en el tipo de cambio y costos asociados al turismo internacional, organizar un viaje dejó de ser solo un reto logístico para convertirse en un verdadero ejercicio de planeación financiera.

Aspectos como el manejo de divisas, las comisiones por retiros en el exterior y las tarifas dinámicas de vuelos y hospedajes influyen de manera directa en el presupuesto de las vacaciones.

“Ya no se trata solo de tener el pasaporte en regla o empacar la maleta. Hoy, la clave está en cómo usamos nuestro dinero en distintos países y monedas. Es ahí donde se define si unas vacaciones se disfrutan o se convierten en una carga financiera”, explicó Santiago Mejía, country manager de Global66 en Colombia.

Durante temporadas como Semana Santa, las aerolíneas y los alojamientos suelen ajustar sus tarifas de manera constante, con variaciones de hasta un 30% de un día para otro.

A esto se suma la fluctuación del dólar y el euro, que puede encarecer el viaje de forma inesperada.

Por lo tanto, un error frecuente es asumir que pagar en pesos colombianos siempre será más barato, dado que muchas plataformas en línea convierten la moneda de origen a pesos, pero aplican tasas de conversión poco competitivas o comisiones ocultas, lo que incrementa el valor final de la transacción.

“Creer que pagar en pesos es siempre más económico es un error común. Contar con herramientas que permitan pagar en la moneda del comercio, sin costos ocultos, puede representar un ahorro inmediato y significativo”, agregó Mejía.

Basados en la experiencia de miles de usuarios en toda Latinoamérica, existen cuatro recomendaciones esenciales para quienes buscan optimizar sus finanzas durante la Semana Santa:

• Monitorear el tipo de cambio con anticipación: el dólar y el euro fluctúan constantemente, por lo que seguir sus movimientos días o semanas antes del viaje puede ayudarte a convertir divisas en el mejor momento y evitar así pagar más por la misma cantidad de dinero.
• Evita soluciones con costos ocultos: muchas tarjetas o plataformas aplican comisiones internacionales, recargos por conversión o tasas de cambio poco favorables.
• Minimiza los retiros en efectivo: retirar dinero en cajeros del exterior puede generar cargos de hasta un 10% adicional, lo recomendable es llevar una cuenta con saldo en la moneda del destino y priorizar los pagos digitales en puntos de venta que acepten tarjetas sin comisiones por transacciones internacionales.
• Blindarse de fraudes: al usar plataformas digitales, es vital proteger los datos financieros así se puede comprar de forma segura en comercios de todo el mundo que acepten pagos sin contacto.

Además, es fundamental realizar un análisis de las finanzas personales antes de viajar, dado que identificar ingresos, gastos y los posibles costos que demandarán las vacaciones ayuda a establecer límites claros y previene caer en gastos innecesarios.

“Viajar en Semana Santa cuidando el bolsillo no solo es posible, es cada vez más necesario. Las herramientas están al alcance: el reto es usarlas con inteligencia y convertir la planeación financiera en un pasaporte más para moverse con libertad”, concluyó Mejía.

Con la llegada de la Semana Santa, que para 2025 se celebra entre el 14 y el 20 de abril, algunos destinos han registrado reducciones significativas en el precio de los tiquetes, mientras otros muestran incrementos considerables.

Entre los destinos nacionales más solicitados se destacan Santa Marta, con una disminución de 41% en el costo promedio de los pasajes, que para 2025 es de $529.846, frente a los $894.000 de 2024; Cartagena, con un recorte de 29,5%, ubicándose en $460.350 y Montería, con un costo promedio de $517.062, lo que representa un descenso del 34,5%.

Por su parte, Medellín registra una caída del 12%, con un valor promedio de $282.386, mientras que Barranquilla presenta una reducción del 19,5%, situándose en $434.040.