Periodista cayó por los encantos de una mujer: terminó drogado, robado y con su carro estrellado en Bogotá

Ni tres meses de charlas fueron suficientes para advertir al periodista Edwin Alejandro Ávila, de 28 años, sobre el tipo de persona con la que se había relacionado en un bar de Bogotá, en diciembre del 2024.

Según denunció, tras ser víctima del robo con escopolamina: “Hace unos meses salí con un primo y conocí a una muchacha, con quien intercambié datos. Estuvimos hablando por unos tres meses, hasta que me propuso vernos el 14 de febrero. No le vi problema, ella me dijo que estaba con otras personas y que querían que los asesorara con una cuenta de Instagram, así que confié en ellos. Llegué como a las 11:00 p. m. Esa noche no estaba tomando porque iba manejando, y cuando fui al baño me di cuenta de que ya era la 1 a. m. y me tenía que ir”.

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Ávila sostiene que no es muy “rumbero”, pero, aquella noche, decidió ayudar a la mujer con la que había estado hablando desde el año pasado y, a cambio, aceptó una bebida sin alcohol que le ofreció para “acompañarlos” mientras tomaban.

“Fui al baño y me di cuenta de que ya era la 1:00 a.m. y me tenía que ir, pero me comencé a sentir mal”, lamentó. Según su relato, confiando en su “amiga”, se acercó a ella cuando la vio en la puerta y, desde entonces, no recuerda lo que sucedió después.

Pasadas las horas, se despertó en medio de una turba furiosa que quería golpearlo por un accidente de tránsito que, en medio de su confusión, habría generado: “Lo último que recuerdo es que estaba en el carro accidentado por La Castellana. No entendía qué estaba pasando, la gente me quería golpear porque pensaban que estaba borracho, era la madrugada del sábado”.

Sin saber cómo llegó a su casa y recordando solo fragmentos de la noche anterior, el joven se percató del golpe en su carro y de las pertenencias que le faltaban: dos celulares, su equipo de trabajo, que incluía micrófono y computador, y los accesos a sus cuentas bancarias, de las que habrían retirado 20 millones de pesos.

“Ya puse la denuncia y la verdad es injusto porque ni siquiera acostumbro a salir de rumba y justo me pasa esto. Es importante que la gente no confíe tanto, menos cuando alguien los cita por primera vez en un bar. También la Policía debería poner más atención a estos casos, que haya más cámaras y se revisen bien estas denuncias”, lamentó, ya que, incluso, le impidieron acceder a las redes sociales que administraba por su trabajo.

Una joven que buscaba conocer a alguien especial a través de Facebook Dating, la herramienta de citas lanzada por Meta en septiembre de 2018, vivió una experiencia aterradora que ha encendido las alarmas sobre la seguridad en las plataformas de citas en línea. Según relató en la sección “Las peores citas de mis seguidores” el tiktoker colombiano Santiago Rodríguez, conocido como Santcholo, la mujer fue víctima de un intento de robo tras aceptar una invitación para salir con un hombre que conoció en la aplicación.

De acuerdo con el relato compartido por Rodríguez, la joven habría hecho “match” con un hombre que le propuso encontrarse para tomar un café y conversar. Aunque inicialmente no vio inconvenientes en aceptar la invitación, lo que parecía ser una cita casual se transformó rápidamente en una situación peligrosa.

Según detalló el tiktoker, el hombre intentó llevarla a una zona de moteles, lo que generó incomodidad en la joven, quien pidió cambiar el plan y dirigirse a un área de restaurantes.

El hombre accedió a la solicitud de la joven y ambos se dirigieron a un restaurante. Durante la cena, él pidió un plato de carne y ella optó por una hamburguesa. Sin embargo, el comportamiento del hombre comenzó a levantar sospechas. Según el relato, se mostró ansioso y, en un momento, se levantó de la mesa con la excusa de ir al baño. Al regresar, sorprendió a la joven abrazándola y besándola sin previo aviso, un gesto que la dejó desconcertada.

El relato compartido por Rodríguez no detalla qué ocurrió inmediatamente después de este incidente, pero el contexto sugiere que la situación escaló hasta convertirse en un intento de robo con el uso de escopolamina, una sustancia conocida por ser utilizada en delitos de este tipo. La joven logró salir ilesa, pero el caso ha generado preocupación sobre los riesgos asociados con las citas en línea y la vulnerabilidad de los usuarios frente a este tipo de situaciones.