Cómo se consiguió que ‘Betty, la fea’ tuviera su apariencia fea y bonita: una diseñadora aclaró el misterio

Bettina Spitz, una de las diseñadoras más renombradas de la época, aseguró en una entrevista que fue todo un reto hacer que el personaje se viera feo

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Bettina Spitz fue la encargada
Bettina Spitz fue la encargada de diseñar el vestido de novia de Beatriz Pinzón - crédito Canal RCN

Uno de los personajes que más quieren los colombianos, fue el que interpretó Ana María Orozco como Beatriz Pinzón Solano, en la exitosa novela de Fernando Gaitán, Yo soy Betty, la fea. Sin embargo, poca información se tenía sobre la manera en la que se eligió su vestuario para la producción.

Sin lugar a duda, lo llamativo de su peinado que consistía en un flequillo o copete engominado, de aspecto mojado todo el tiempo, sus gafas y su sonrisa metalizada, hicieron que se comenzara a interrogar cómo se llegó a esa apariencia. Por eso, una de las mujeres que participó en la elección de vestuario habló sobre este dato de la novela que emociona a generaciones desde que se transmitió su primer episodio en Colombia.

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Los colores que predominaban en
Los colores que predominaban en el armario de Beatriz eran los colores tierra - crédito RCN Televisión

Se trata de Bettina Spitz, diseñadora de modas bogotana que apareció en uno de los episodios de la telenovela cuando Beatriz Pinzón preparaba todo para su matrimonio con Armando Mendoza. Fue la encargada de tomarle las medidas y diseñar el vestido de la presidenta de Ecomoda para su gran día junto al que desde su llegada a la empresa fue el amor de su vida.

Según dijo la bogotana, que trabajó en la construcción del vestuario de Betty incluso los que llevó Patricia Fernández, esto implicó un reto en su carrera, pues en el inicio de la novela la protagonista tenía que verse muy fea y luego tuvo un giro de 180 grados en su imagen. De acuerdo con Spitz, la elección de los colores en el vestuario fue fundamental, por lo que se eligieron atuendos que no tuvieran match con Ana María Orozco.

Betty la fea se caracterizó
Betty la fea se caracterizó por ser una mujer fea, mal vestida y una figura poco agraciada - crédito Canal RCN

Para el cambio de look de Beatriz a ser una alta ejecutiva, renovada y dejando atrás su desprolija apariencia, se logró que la Ana María Orozco llevara colores más frescos, haciendo referencia al verano, algo similar a los colores de la Barbie. Siendo rosados, azules y grises claros, los mismos que vistieron las integrantes del cuartel de las feas, los preferidos por Spitz para vestir a la nueva presidenta de Ecomoda.

Cuál fue el capítulo más difícil de grabar en ‘Betty, la fea’

Uno de los episodios que varios recuerdan es el que se desarrolla en el interior de un museo, cuando los protagonistas visitan las obras insignia de Pablo Picasso.

La actriz contó una de las peores grabaciones de la novela más vista - crédito @estefigomez11/IG

Este episodio despertó risas, porque Patricia Fernández, que fue interpretada por la actriz Lorna Cepeda, lanzó un comentario jocoso acerca de las obras artísticas que allí se exhibían. De repente, el personaje pregunta:

“¿Tú sabes cuándo Picasso planea sacar más pinturas?”, a lo que le responden que sería imposible, ya que el artista había fallecido, por lo que nuevamente interviene y dice: “Pero eso fue de repente, tuvo que ser hace muy poco, yo no me enteré”, mientras Hugo y Marcela detrás de ella se reían.

Pues bien, la actriz Estefanía Gómez contó una anécdota de las grabaciones de esta escena que, según mencionó, fue una de las más terribles, dolorosas e incómodas de toda la serie. De acuerdo con su revelación, las grabaciones se llevaron a cabo en las instalaciones del Museo Nacional en una noche lluviosa, pero con algunas dificultades adicionales.

Aura María hizo parte del
Aura María hizo parte del cuartel de las feas en ‘Yo soy Betty, la fea’ - crédito @canalrcn/Instagram

“Nos tocó grabar de noche en el Museo Nacional. No nos permitían cobijas, ni almohadas, ni nada de esto. Alrededor no dejaban parquear las motorhome. Entonces nos tocó grabar 24 prácticamente porque solo ese día estaba en el museo la exposición de Picasso. Nos tocó dormir en el piso, en el frío del piso, estaba lloviendo, estaba haciendo demasiado frío”, relató.

Después de eso, confesó que cuando hacían los llamados para las grabaciones se despertaban con cara de sueño, por lo que aprovechaban los espacios entre escenas para dormir un poco más.