Masacre en Bulevar de Oriente, en Cali: una de las víctimas habría muerto por ir a comprar helado junto a una amiga

Como parte de la investigación que adelantan las autoridades en Cali (Valle del Cauca), luego de la primera masacre que se registró en 2025 en el país, por el sector del Bulevar de Oriente, y en donde tres personas fueron asesinadas, se han conocido algunos detalles por parte de los familiares de una de las víctimas, que según el relato de una de sus allegadas, habría estado en el lugar equivocado a la hora incorrecta.

De las tres personas que murieron en el ataque armado, dos eran miembros de una misma familia: Nohelia López, de 74 años; y su hijo Julián López, de 41 años y que tenía Síndrome de Down.

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En tanto que la tercera persona fue María del Mar Mosquera Panameño. Una joven de 23 años que venía procedente de Buenaventura, y había llegado hace dos años a la capital vallecaucana con el objetivo de forjar un mejor futuro para ella y su niña de cinco años, y que sería la persona que llegó hasta la zona en un momento infortunado donde las balas sembraron el terror en inmediaciones del barrio Marroquín, la noche del 12 de enero 2025.

En ese momento, y producto del diálogo que varios familiares de la joven boaerense tuvieron con Caracol Radio, se supo que la joven había salido con una amiga a comprar un helado de fresa, y además expresaron que María del Mar no tenía ninguna relación con los integrantes de la familia López, a la que según el reporte que entregó el coronel Germán Manrique, subcomandante de la Policía Metropolitana de Cali, habría sido dirigido el ataque armado.

“Las primeras hipótesis sugieren que el ataque fue dirigido específicamente contra la familia López, aunque aún se investiga si María del Mar Mosquera tenía alguna relación con ellos o si simplemente se encontraba en el lugar por coincidencia”, fue lo que expresó el oficial de la Policía.

Sumado a esto, “también se está evaluando si este caso pudiese estar relacionado con otro homicidio que afectó a la familia (López) el año pasado”, destacó el coronel Manrique. Esto refuerza las recientes declaraciones que brindó a Telepacífico una de las nietas de la mujer de la tercera edad que murió, Valentina Bedoya, que también le contó al diario El Tiempo que denunció haber recibido amenazas en contra de su vida y la de su familia, días previos a la masacre en el Bulevar de Oriente.

Todo habría sido a raíz de la muerte de su exnovio. “Era un narcotraficante, no un angelito, y lo mataron de una forma horrible delante de sus hijos y de mí. Después de eso, comenzaron las amenazas. Publicaron fotos íntimas mías, crearon perfiles falsos en redes sociales y dijeron que iban a acabar con toda mi familia”, indicó Bedoya al noticiero local vallecaucano.

El relato de Bedoya al periódico dejó entrever que este triple homicidio podría ser el resultado de una venganza que, se está investigando, habría sido perpetrado por una banda criminal conocida como Los Pescados, procedente de Buenaventura. Sin embargo, y mientras avanzan las pesquisas donde se tendrá en cuenta este testimonio, y por lo que se ofreció una recompensa de 50 millones de pesos, se siguen recolectando evidencias que puedan ayudar a dar con el sicario que huyó de la escena en una motocicleta.

En medio del duelo y las investigaciones que no cesan su marcha, se conoció que María del Mar Mosquera Panameño había llegado a Cali, donde se encontraba ad portas de obtener su diploma como profesional de la carrera de Administración Financiera en la Universidad del Quindío.

Según detalló El País, la joven estaba realizando sus prácticas profesionales en la empresa Cosmitec y estaba a pocas semanas de obtener su título profesional.

“María era una joven muy alegre, buena hija, estudiosa y con muchos sueños...Que se haga justicia, ya es necesario que pare tanta violencia... Ella había salido con una amiga a comprar un helado de fresa esa noche. Estudiaba Administración Financiera en la Universidad del Quindío, se iba a graduar en febrero de un técnico y estaba terminando sus prácticas. Ella es de Buenaventura, por ello estamos gestionando su traslado. No tenía nada que ver y deja un niño de 5 años”, dijo uno de sus familiares a Caracol Radio.

“Nunca imaginamos que esto fuera a ocurrir. Solo esperamos que las autoridades no dejen esto en la impunidad”, cerraron los integrantes de la familia de María del Mar en la entrevista concedida al diario caleño.

A través de un comunicado con fecha del lunes 13 de enero de 2025, el grupo delincuencial conocida como Los Shottas, y cuya área de operación comprende el área urbana de Buenaventura y algunos municipios vecinos en el departamento de Valle del Cauca (según un informe de InSight Crime), aseguró no tener ninguna responsabilidad en la masacre que se registró la noche del 12 de enero de 2025 en el Bulevar de Oriente.

“Los Shottas no tienen ningún tipo de injerencia en la ciudad de Cali, ni en nada que nos pueda comprometer en hechos que usted menciona”, inicia el documento, donde precisaron que su organización solo opera en Buenaventura.

“Debido a las acusaciones de la señora Valentina Bedoya López en relación con los hechos que lamentamos, por situaciones que afectan su integridad física y emocional, de ante mano y sin causar molestia le pedimos a la señora y persona alrededor dándole instrucciones de lo que debe decir, si tienen pruebas que puedan involucrar a Los Shottas, le pedimos con el mayor respeto que las hagan saber a las autoridades competentes”, añadió el comunicado oficial, mientras que las investigaciones del caso avanzan con el fin de dar con los responsables y determinar qué grupo delincuencial está detrás de la primera masacre del año que registró en Colombia durante 2025.

Este es el comunicado: