
Llegamos a la mitad del primer gobierno progresista en la historia de Colombia, un país que jamás conoció la alternancia política y que depositó en nuestro proyecto la posibilidad de materializar el cambio que por tanto tiempo buscó. Todavía recuerdo los rostros, la emoción y la alegría de aquel 7 de agosto de 2022, cuando llenamos la Plaza de Bolívar y en tantas otras plazas para presenciar la posesión de Gustavo Petro como presidente.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
Llegamos con la promesa de ser un gobierno de derechos, que fuese coherente con las necesidades de la gente y que dedicara sus esfuerzos para cerrar las brechas construidas tras tantos años de violencia e indiferencia. Y al respecto, puedo sostener sin temor que, por sobre todas las dificultades, lo estamos cumpliendo.
El Gobierno ha trabajado por reducir la desigualdad y la pobreza, hechos que se reflejan en que, en medio de un año de estancamiento económico, 1,6 millones de personas salieron de la pobreza y 120.000 de la pobreza extrema. En este mismo escenario, también redujimos el coeficiente de Gini, es decir, hoy tenemos un país menos desigual.
Esta reducción ha venido de la mano, no de más subsidios, sino de dos políticas de este Gobierno: el incremento de la producción agrícola, lo que ayudó a controlar la inflación de los alimentos de la canasta familiar, y de la mejora del salario mínimo y las condiciones laborales. Siempre nos dijeron que al aumentar el sueldo acabaríamos con el empleo; sin embargo, hoy hay mejores ingresos y más trabajo formal.
En cuanto a los derechos, hemos avanzado con la aprobación de la reforma pensional, para que nuestras abuelas y abuelos jamás vuelvan a vivir en la pobreza extrema, para mejorar las pensiones de la gente y para ampliar la cobertura. No obstante, para mejorar aún más las jubilaciones a futuro, debemos avanzar hacia más y mejores empleos, por lo que seguiremos construyendo y concertando una reforma laboral que así lo permita.
También hemos trabajado por las juventudes, incrementando el presupuesto en educación y logrando la gratuidad en la educación superior pública, para que nadie deba escoger entre comer o estudiar; también apoyamos a nuestra Fuerza Pública, brindándole mejores condiciones salariales, facilidades para tener mejores carreras y devolviendo la mesada 14 que injustamente les había sido arrebatada.

Otro aspecto que ha trabajado el Gobierno, ha sido la protección de la naturaleza y la búsqueda de alternativas al modelo extractivista que nos está llevando a la extinción. Logramos controlar la deforestación y cumplir 6 años antes la meta de reducción propuesta para 2030. El liderazgo del presidente es reconocido a nivel mundial y desde Colombia estamos empujando por la transición energética, buscando alternativas para estos ingresos como, por ejemplo, con el turismo, que en 2023 ya igualó al carbón, así como con proyectos para generar energías limpias que permitan superar la dependencia de los combustibles fósiles.
Nuestro campo también ha sido prioritario. La reforma agraria avanza y desde el Congreso hemos apoyado aprobando el reconocimiento del campesinado como sujeto de derechos y de especial protección, así como la creación de la jurisdicción agraria, cuya reglamentación sigue en trámite, para así permitir la resolución rápida de los problemas de tenencia. Asimismo, el Gobierno ha entregado cerca de 100.000 hectáreas a campesinos, campesinas y víctimas del conflicto ¡sin expropiar a nadie!
Podría seguir enumerando situaciones significativamente positivas para el país, sin embargo, tampoco podemos desconocer que en el camino ha habido errores y situaciones por las que tenemos que seguir trabajando.
El presidente Gustavo Petro ha tenido una destacada trayectoria de lucha contra la corrupción, destapando casos como la Parapolítica, el Carrusel de la Contratación y sus denuncias sobre el caso Odebrecht, entre otras. Por lo mismo, no titubeó al pedir perdón ante la nación el 20 de julio por los casos que han sido descubiertos. Sabemos que la corrupción es la muerte de la democracia, por lo que necesitamos fortalecer la transparencia y la independencia de las instituciones. Las investigaciones deben avanzar para erradicar este mal estructural del Estado colombiano, caiga quien caiga.

Tenemos también una deuda en seguridad. La política de paz total ha sabido ser efectiva y las incautaciones de droga están en máximos históricos. Estos ataques a las grandes mafias han despertado una reacción violenta que tiene atemorizadas a varias zonas del país, mostrando una incoherencia ante la gente, pues no es posible que sostengan por un lado una supuesta voluntad de diálogo cuando por otro atentan contra el pueblo colombiano. Nuestra vocación como Gobierno siempre será la paz, por lo que debemos trabajar aún más para avanzar en garantizar las condiciones para que toda persona pueda tener la tranquilidad necesaria para desarrollar su proyecto de vida.
Y por supuesto hay una deuda con las mujeres, pues siguen las brechas salariales, las violencias basadas en género, los ataques en contra de nuestra participación en política y la necesidad de más garantías y protección para nuestros derechos. En tiempos en que la vida y la democracia están en peligro, el cuidado debe ser garantizado y reconocido, y hacia allá debe seguir caminando este gobierno.
Por lo anterior, sabemos que hemos tenido desafíos y los seguiremos teniendo. Sin embargo, sabemos que también hemos cumplido y tenemos la certeza de que podremos seguir avanzando en las transformaciones por las que votó en 2022. Tenemos el deber de encontrar las formas de continuar construyendo desde el amor y la esperanza para construir juntos y juntas una mejor Colombia.
Más Noticias
EN VIVO Bahía vs. Atlético Nacional, fecha 3 de la Copa Libertadores 2025: siga el minuto a minuto del verde en Brasil
Luego de la goleada 3-0 en Porto Alegre, el equipo de Javier Gandofi, sin Marino Hinestroza, visita al conjunto del defensor colombiano Santiago Arias para volver a los primeros lugares del grupo F

Incidentes por caída de árboles en Bogotá aumentan: más 10.500 están en estado de amenaza
Suba, localidad con más de un millón de habitantes, es la zona de la ciudad donde más riesgo se registra

Motociclista de ‘app’ fue captado discutiendo y realizando maniobras peligrosas mientras transportaba una pasajera
Un conductor de transporte alternativo con infracciones acumuladas y sin Soat, puso en peligro a una usuaria; además incurrió en expresiones discriminatorias durante el enfrentamiento con otros moteros

Dayro Moreno quiere volver a la selección Colombia, pero James Rodríguez y Falcao no le contestan el teléfono: qué pasó
El delantero de Once Caldas pasa por un gran momento y los aficionados piden que sea llamado por el técnico Néstor Lorenzo, sin importar su edad ni que juegue en la Liga BetPlay

Realismo mágico puro, en un pueblo colombiano afirman que el rostro del papa Francisco apareció en un pescado: “Respeten”
Las críticas no se hicieron esperar, pues los ciudadanos consideran que lejos de ser un “milagro” es una “broma de mal gusto”
