Gustavo Petro dijo que domiciliarios marcharon “por orden del patrón contra la reforma que les va a dignificar el trabajo”

El presidente comparó las protestas de los trabajadores de aplicaciones de domicilios con los tiempos en los que se hablaba de abolir la esclavitud, diciendo que “los esclavistas le decían a sus esclavos que si quedaban libres iban a morir de hambre”

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La carrera 5 con calle
La carrera 5 con calle 6 B fue obstruida por manifestaciones de los domiciliarios, generando una afectación vial en la calzada. Tránsito Bogotá.

El 28 de marzo, los domiciliaros salieron a marchar, una vez más, en contra de la reforma laboral del Gobierno de Gustavo Petro, que busca regular las plataformas digitales y formalizar a sus trabajadores. El presidente Petro, desde Twitter, se refirió a las manifestaciones en contra de la reforma, y dijo que los domiciliarios saliron a las calles a marchar “por orden del patrón”, y comparó la protesta en contra de la reforma laboral con los tiempos en los que los esclavistas se oponían a la liberación.

Gustavo Petro se pronunció sobre
Gustavo Petro se pronunció sobre la movilización cumplida por los colaboradores de Rappi. Cortesía: Gustavo Petro.

Las marchas de los rappitenderos comenzaron sobre las 11:00 de la mañana, cuando un numeroso grupo, en bicicletas y motos, se reunió en el Parque Nacional, para dirigirse, en protesta, al Congreso, por los cambios a la contratación que se incluyen en la reforma laboral, que podrían ocasionar el despido en masa de cerca de 130 mil repartidores, de acuerdo con el CEO de la empresa Rappi, Simón Borrero.

Borrero, en una entrevista con Semana, advirtió que, en caso de que la reforma se apruebe como está, el precio de los domicilios sufriría un aumento considerable:

Además, dijo que la reforma tiene dos temas peligrosos y tremendamente injustos: laboralidad forzosa y un freno a la flexibilidad de los rappitenderos al ofrecer sus servicios.

Borrero señaló que esto forzaría a las plataformas a quedarse con un grupo pequeñito que trabaje entre 40 y 42 horas por semana, pero eso solo lo pueden hacer unos pocos.

En cuanto a cotizar la seguridad social por esas horas que efectivamente pueden trabajar, el director ejecutivo de Rappi explicó a Semana que el sistema colombiano no lo permite y requiere que solo se pueda cotizar sobre un salario mínimo entero. Así las cosas, el sistema no le recibe los aportes al que trabaja unas cuantas horas a la semana y gana $300.000 al mes, y es la explicación de la alta informalidad en Colombia.

En relación a que la reforma busca mejorar las condiciones de los trabajadores de la economía colaborativa, pero no incluiría a los de las plataformas de transporte, solo a los de domicilios, puntualizó que esta parte les extraña mucho y no encuentran una explicación para que a algunos trabajadores digitales los obliguen a la laboralidad, les quiten la flexibilidad, y a otros no.