Casi 150 personas denuncian haber sido pinchadas con agujas en un festival en Francia

Las autoridades policiacas dijeron que toman en serio las denuncias, pero también con cautela. Algunos casos resultaron ser solo rasguños.

Las autoridades francesas dijeron el domingo que 145 personas de todo el país, 13 de ellas en París, habían denunciado haber sido picadas con agujas en un festival anual de música de ámbito nacional celebrado el sábado. Doce personas fueron detenidas en relación con estas agresiones.

"Algunas víctimas fueron trasladadas al hospital para realizarles análisis toxicológicos", dijo el ministerio. Las autoridades francesas no dieron detalles sobre las personas detenidas ni sobre qué sustancias podían contener las jeringuillas.

Aunque el número de víctimas fue pequeño en comparación con los millones de personas que asistieron a los actos de la Fiesta de la Música en toda Francia, los informes se encuentran entre una serie de episodios alarmantes ocurridos en los últimos años, en los que personas han denunciado haber sido inyectadas sin su conocimiento o consentimiento en espacios concurridos como clubes o bares.

Un informe del Parlamento británico, publicado en 2022 tras un repentino aumento de los incidentes con agujas, dijo que se habían producido más de 1000 casos de ataques con agujas en el país entre septiembre de 2021 y finales de diciembre de 2022. El informe, que encuestó a más de 3000 víctimas y testigos, citaba datos policiales que mostraban que alrededor del 90 por ciento de los incidentes de pinchazos con agujas se producían por la noche en locales como bares y discotecas, aunque algunos también ocurrían en festivales y fiestas caseras.

El informe señalaba que no había suficiente información para determinar la prevalencia general del pinchazo con agujas y que podría haber muchos más ataques que no se denuncian.

La Fiesta de la Música es un acontecimiento anual en Francia desde hace más de cuatro décadas. El 21 de junio, solsticio de verano, se anima a músicos de todos los niveles a actuar en aceras, parques y otros espacios públicos, y se organizan conciertos gratuitos en todo el país y en los territorios franceses de ultramar.

Según Le Monde y otros medios de comunicación franceses, antes del festival circularon por las redes sociales mensajes en los que se pedían agresiones de este tipo contra las mujeres.

Laurent Núñez, prefecto de policía de París, dijo en una entrevista en la cadena francesa de noticias CNews que la policía tomaba en serio las denuncias, pero también con cautela. "No es un fenómeno nuevo", dijo. La Voix du Nord, periódico regional del norte de Francia, informó el lunes el caso de una chica que dijo haber sido pinchada con una aguja y, después de un examen más detallado, parecía haber sido arañada.

Adam Winstock, fundador de la Encuesta Mundial sobre Drogas, que estudia las tendencias de las drogas, y profesor del University College de Londres, dijo que el pinchazo con agujas es un "hecho extraordinariamente raro".

Incluso cuando se trata de inyectar bebidas, una forma más común de drogar a la gente, los análisis toxicológicos han demostrado que solo un porcentaje muy pequeño de las bebidas que la gente cree que les han echado drogas realmente las tienen, dijo. Del mismo modo, solo "en muy raras ocasiones" la policía ha recibido confirmación de que se ha administrado una droga mediante pinchazos con agujas, dijo.

Winstock advirtió que algunos de los informes en Francia pueden haber sido consecuencia del pánico al difundirse las noticias sobre los pinchazos. "Hasta que no haya pruebas toxicológicas, la historia podría ser que un grupo de personas se contagiaron de algo que oyeron que le había ocurrido a otra persona", dijo. "Que sientas un pinchazo agudo no significa que te hayan inyectado una droga".

Los pinchazos con agujas "no son la mayor amenaza que existe", dijo, y señaló que una amenaza mucho mayor en las salidas nocturnas era que se aprovecharan de la gente cuando estaba borracha o drogada.

Aurelien Breeden colaboró con reportería desde París.

Aurelien Breeden colaboró con reportería desde París.