
your-feed-sciencePetrova, Kseniia (Scientist)Colleges and UniversitiesImmigration DetentionDeportationUnited States Politics and GovernmentFederal Courts (US)Harvard UniversityHomeland Security DepartmentImmigration and Customs Enforcement (US)RussiaTrump, Donald JSmugglingResearchReiss, Christina (1962- )
El miércoles se anunciaron cargos penales por contrabando contra Kseniia Petrova, científica de Harvard. Un abogado del gobierno declaró que planean deportarla.
El gobierno del presidente Donald Trump anunció el miércoles cargos penales por contrabando contra Kseniia Petrova, una científica de Harvard que fue detenida hace tres meses tras no declarar las muestras científicas que llevaba en su equipaje.
En una audiencia celebrada más temprano ese día en un tribunal federal de distrito, un abogado del gobierno dijo a una jueza federal que el gobierno de Trump pretende deportar a Petrova a Rusia, país del que huyó en 2022, a pesar de su temor a que la detengan allí por su historial de protestas políticas.
La medida representa una escalada en el caso del gobierno contra Petrova, que en las últimas semanas ha atraído la atención de científicos y académicos de todo el mundo.
También ha enfrentado al gobierno con la jueza federal de Vermont, que ha programado una audiencia para la libertad bajo fianza de Petrova a finales de este mes, preparando aparentemente el terreno para su liberación.
Petrova ha admitido que no declaró las muestras, pero su abogado ha argumentado que esto normalmente se trataría como una infracción menor, sancionable con una multa. En lugar de ello, el funcionario de aduanas canceló inmediatamente el visado J-1 de Petrova e inició el procedimiento de deportación.
Christina Reiss, jueza jefa del Tribunal de Distrito de Estados Unidos en Vermont, interrogó repetidamente a los abogados del gobierno sobre sus motivos para cancelar el visado de Petrova y detenerla.
"¿Dónde está esa autoridad?", preguntó. "¿Dónde tiene autoridad por sí mismo un agente de aduanas y de la patrulla fronteriza para revocar una visa?", dijo. "Tiene que estar en alguna parte. Porque no hay forma de que esa persona tenga una especie de determinación ilimitada".
Los cargos penales complicarán aún más el deseo de Petrova de permanecer en Estados Unidos y regresar a su laboratorio en la Facultad de Medicina de Harvard. El miércoles por la tarde, Petrova dijo a sus colegas que le habían dicho abruptamente que recogiera sus cosas porque iba a salir de la custodia del ICE.
El abogado de Petrova, Gregory Romanovsky, dijo que la acusación penal, "presentada tres meses después de la supuesta infracción aduanera, tiene claramente la intención de hacer que Kseniia parezca una delincuente para justificar sus esfuerzos por deportarla".
Dijo que la audiencia de Vermont había establecido que Petrova fue detenida ilegalmente.
"Casi inmediatamente después de la audiencia, nos sorprendió la publicación de una denuncia penal sin fundamento", dijo Romanovsky. "El momento en que Kseniia fue trasladada de la custodia del ICE a la custodia penal es especialmente sospechoso porque ocurrió justo después de que el juez fijara una audiencia para ser puesta en libertad bajo fianza".
En caso de que Petrova sea declarada culpable, el cargo de contrabando podría conllevar una pena de hasta 20 años de prisión, o una multa de hasta 250.000 dólares. En la denuncia penal, un agente federal afirma que Petrova importó "fraudulenta y conscientemente" especímenes biológicos no declarados, incluidas muestras en portaobjetos y "embriones de rana en microcentrifugadoras".
La denuncia detalla mensajes de texto entre Petrova y sus colegas en los que dice que "no tiene ningún plan" para llevar las muestras a través de la aduana. La denuncia también señala que, antes de salir de Rusia, Petrova trabajó para un centro de investigación genética vinculado al gobierno ruso.
En el juzgado de Vermont, las acciones de Petrova y del funcionario de aduanas fueron vistas de manera muy distinta. Reiss señaló que había revisado el estatuto que establece los motivos por los que los funcionarios de aduanas pueden declarar a alguien inadmisible en Estados Unidos, y "no veo nada sobre infracciones aduaneras".
Jeffrey Hartman, abogado representante del Departamento de Justicia, dijo que "es potestad del secretario de Estado" anular una visa, y que el secretario ha delegado esa potestad a los funcionarios de aduanas.
"La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza era nuestra primera línea de defensa contra materiales biológicos desconocidos procedentes de un ciudadano extranjero fuera de un puerto de entrada", dijo.
Hartman argumentó que el tribunal federal de Vermont no tenía jurisdicción sobre la detención de Petrova. Dijo que Petrova puede impugnar su detención, pero solo ante un tribunal de inmigración de Luisiana, donde la retiene el ICE.
"No es algo que un tribunal de distrito pueda considerar", dijo. "Creemos que el lugar adecuado para esa cuestión es Luisiana, donde está detenida y donde está su custodio".
"Pero solo está detenida allí porque ustedes la trasladaron", dijo la jueza.
Reiss pidió al gobierno que aclarara si planeaba o no deportar a Petrova a Rusia.
"¿Están pidiendo su expulsión a Rusia?", preguntó.
"Sí, su señoría", respondió Hartman.
Los tribunales federales de Vermont han dictado una serie de decisiones que frustran la política de inmigración del presidente Trump.
El 9 de mayo, la estudiante de doctorado de la Universidad Tufts Rumeysa Ozturk fue puesta en libertad por orden de un juez, William K. Sessions III, quien dijo que su detención prolongada podría helar "el discurso de los millones y millones de individuos de este país que no son ciudadanos".
Y el 30 de abril, el juez Geoffrey W. Crawford ordenó la puesta en libertad de Mohsen Mahdawi, organizador estudiantil de la Universidad de Columbia, quien fue detenido por las autoridades de inmigración durante una entrevista para su naturalización. Tanto Ozturk como Mahdawi fueron señalados porque habían protestado abiertamente contra la campaña militar de Israel en Gaza.
El caso de Petrova no está basado aparentemente en ningún activismo político. Sin embargo, la fiscal general de Massachusetts, Andrea Joy Campbell, quien presentó un escrito amicus curiae en el caso, dijo que la detención de Petrova, al igual que la de Ozturk, representaba "un abuso de poder imprudente y cruel para castigar y aterrorizar a miembros no ciudadanos de la comunidad académica".
Adam Sychla, investigador postdoctoral que organizó un grupo de alrededor de 20 estudiantes y profesores de Harvard que viajaron desde Cambridge hasta el tribunal de Burlington, Vermont, dijo que no conocía a Petrova, pero que había decidido inmediatamente hacer el viaje.
"Que la conozca personalmente o no es irrelevante", añadió. "Podría haberme reunido fácilmente con ella la semana pasada para iniciar una colaboración. En lugar de eso, Kseniia está injustamente detenida".
Miles J. Herszenhorn colaboró con reportería desde Cambridge, Massachusetts.
Ellen Barry es una periodista que cubre salud mental para el Times.
Últimas Noticias
Las delegaciones de Ucrania y Rusia llegaron a Turquía, pero aún no hay conversaciones de paz
Reportajes Especiales - News

Harvard pagó 27 dólares por un ejemplar de la Carta Magna sin saber que era un original
Reportajes Especiales - News

4 conclusiones del segundo día de testimonio de Cassie en el juicio de Sean Combs
Reportajes Especiales - Lifestyle

Delegaciones de Ucrania y Rusia llegaron a Turquía. Pero ¿se reunirán?
Reportajes Especiales - News

Estudiantes provocan cortocircuitos en sus Chromebooks para unirse a un reto de redes sociales
Reportajes Especiales - Lifestyle
