Noboa y González se enfrentarán en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Ecuador

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La ciudad de Machala está llena de carteles de los dos candidatos presidenciales de Ecuador, sus caras sonrientes miran hacia los negocios cerrados y a las calles que se vacían después de las 6 de la tarde, debido a las bandas rivales que atormentan la ciudad.

Machala, una ciudad portuaria al sur de Guayaquil, es un microcosmos de los retos a los que se enfrenta el país sudamericano --incluidos el desempleo crónico y una crisis de seguridad provocada por el aumento de la violencia del narcotráfico-- que, según muchos votantes, son sus mayores preocupaciones de cara a la segunda vuelta electoral del domingo.

Las elecciones enfrentan al presidente en ejercicio, Daniel Noboa, el heredero de un magnate multimillonario del sector bananero que salió de la oscuridad política para ganar un mandato truncado después de que el mandatario previo se enfrentara a un juicio político, contra Luisa González, la sucesora elegida a dedo por un titán populista de la política ecuatoriana.

Noboa se ha posicionado como el candidato de la mano dura contra el crimen, y como el político mejor preparado para liderar Ecuador en la escena global y negociar con líderes mundiales como el presidente Donald Trump.

González ha sido definida por su asociación con el expresidente ecuatoriano Rafael Correa que, a pesar de los escándalos y la controversia, sigue siendo venerado por muchos en el país, ocho años después de que dejó el cargo.

La presidencia de Correa se caracterizó por un auge económico, bajos índices de delincuencia e inversiones en sanidad y educación. Pero también fue condenado por corrupción y fue acusado de tendencias autoritarias.

En febrero, Noboa superó por poco a González en la primera vuelta, pero no superó el 50 por ciento de los votos necesarios para evitar una segunda vuelta. Las encuestas muestran un empate en las elecciones del domingo.

Y en ningún lugar esa división es más evidente que en Machala, la capital de El Oro, uno de las provincias más peligrosas de Ecuador. Esta ciudad portuaria de unos 288.000 habitantes es uno de los mayores puntos de embarque de plátanos en el mundo: a veces se la llama "la capital mundial del banano".

Pero lo que solía ser un bullicioso destino turístico y centro gastronómico se ha convertido en gran medida en una ciudad fantasma.

Los Choneros y Los Lobos son dos bandas rivales que luchan por el control del tráfico local de drogas mientras asesinan a residentes a plena luz del día, hacen estallar bombas en las calles y extorsionan a comerciantes y políticos.

Noboa ha sido criticado por su postura de línea dura frente a la violencia de las bandas del país, que algunos grupos de derechos civiles consideran como una extralimitación de la autoridad presidencial y una violación de los derechos humanos.

Pero en Machala, tanto partidarios como detractores del presidente dicen que les gustaría ver más acción por parte de las fuerzas del orden, no menos. En toda la ciudad, días antes de unas elecciones en un país donde un candidato presidencial fue asesinado hace dos años, no se veía ni un solo policía o soldado patrullando las calles.

Erika González, de 36 años, estaba en la puerta de su casa cuando un desfile organizado por simpatizantes de Luisa González pasó por la calle. Un voluntario le entregó un calendario con la cara de la candidata. Lo cogió por cortesía, dijo, pero pensaba votar por Noboa.

Su sobrino de 17 años, Carlos Choez, fue asesinado a tiros el año pasado, según ella, cuando salía de la escuela porque se resistió a ser reclutado por una banda criminal.

Dijo que creía que Noboa podría frenar la violencia. "Tengo fe de que, si le damos el tiempo que necesita, él va a poder controlar eso", dijo.

También cree que Ecuador necesita ayuda de Estados Unidos para enfrentarse a las bandas de narcotraficantes, algo que es más probable que ocurra con Noboa, dijo.

Durante el mandato de Correa, Ecuador mantuvo una relación antagónica con Estados Unidos, y los expertos afirman que su expulsión de las fuerzas estadounidenses del país obstaculizó la capacidad de Ecuador para controlar sus fronteras y facilitó el tráfico de drogas a través del territorio por parte de grupos criminales transnacionales.

Sin embargo, la tasa de homicidios de Ecuador se redujo durante su gobierno debido al aumento de la vigilancia policial y al auge de las materias primas, que permitió destinar más dinero a la aplicación de la ley. Desde que Noboa asumió el cargo en noviembre de 2023, la tasa de homicidios disminuyó al principio de su mandato, pero luego comenzó a aumentar.

En la sede de la campaña de González en Machala, un cartel muestra su rostro junto al de Correa con el lema "El resurgir de la patria"

El correísmo está muy arraigado en Machala y, para muchos, es algo muy personal.

Muchos recuerdan la inversión del gobierno de Correa en infraestructuras sanitarias, y dicen que las mejoras de uno de los principales hospitales de la ciudad cambiaron sus vidas.

Silvia Endara, de 42 años, dijo que acudió al hospital en 2012 para que le extirparan un quiste cerebral que le provocaba convulsiones, y los médicos le dijeron que estaba embarazada de cinco semanas. Debido a las reformas, el hospital aún no estaba autorizado para realizar operaciones, pero ella afirma que los médicos obtuvieron permiso del gobierno de Correa para realizar la operación de todos modos.

Los médicos le extirparon el quiste, pero le advirtieron que la intervención y sus efectos secundarios podían hacer que su bebé naciera con problemas de salud. Sin embargo, dio a luz a Gema, su hija que nació sana y ahora tiene 12 años.

"Voy a agradecer siempre la vida mía y de mi hija a ese hombre que es Rafael Correa", dijo.

Incluso dentro de la industria bananera, donde la familia Noboa se hizo un nombre, los trabajadores están divididos sobre a quién apoyan.

Los aranceles universales del 10 por ciento de Trump para muchos países están destinados a afectar a Ecuador, que es uno de los principales exportadores de plátano hacia Estados Unidos.

Pero los partidarios de Noboa señalan que Noboa tiene una relación relativamente cálida con Trump, lo que podría ayudar al país.

El presidente fue uno de los pocos líderes latinoamericanos invitados a la toma de posesión de Trump, y ambos mantuvieron una reunión el mes pasado en Mar-a-Lago, el club privado de Trump en Palm Beach, Florida.

La reelección de Noboa podría conducir a "una posición más amena" entre los dos países, dijo Shirley Morocho, de 30 años, quien trabaja en control de calidad para una empresa privada, visitando fincas bananeras en toda la región.

Aunque González ha intentado mostrar un tono más amistoso hacia Estados Unidos durante su campaña, muchos críticos se muestran escépticos.

"Prácticamente Luisa es la sombra de Correa", dijo Morocho, "entonces no creo que vayan a tener muy buena relación".

Jonathan Chacha, de 35 años, concejal de la cercana localidad de El Guabo y partidario de González, afirma que su distrito, dominado por la industria bananera, se verá muy afectado por los aranceles. Sin embargo, considera que González es la mejor opción.

Dijo que la relación entre Noboa y Trump es más que nada un espectáculo, y aún no ha producido ningún beneficio tangible.

Chacha dijo que González estaba mejor situada para aprovechar la buena relación que Correa tenía con China, lo que aportó importantes proyectos al país.

"Son los mayores exportadores de desarrollo en todo el mundo", afirmó.

Días antes de las elecciones, Carlos Banchón, de 56 años y operador de barcos, seguía indeciso. Durante mucho tiempo ha sido simpatizante del partido de Correa, pero estaba considerando cambiar su lealtad al de Noboa.

Prefiere la postura del presidente frente a la delincuencia. La violencia ha ahuyentado a los visitantes de la región, perjudicando su negocio de transporte de turistas entre Puerto Bolívar, una comunidad portuaria ubicada a las afueras de Machala, y el refugio costero de Jambelí.

Pero siente un compromiso con el partido de Correa por el hospital renovado, donde dijo que su mujer recibió cuidados vitales tras caerse y entrar en labores de parto prematuramente.

"No puedo escoger uno u otro", dijo. "Es complicadísimo".