Crece la preocupación de Rusia ante el posible envío de misiles Tomahawk de EEUU a Ucrania: “Un nuevo nivel de escalada”

El Kremlin dijo que la transferencia de proyectiles de largo alcance a Kiev aumentaría la tensión y ampliaría los riesgos para la seguridad nacional

Guardar
Un misil de ataque terrestre
Un misil de ataque terrestre Tomahawk es lanzado desde el crucero de misiles guiados USS Cape St. George (REUTERS/Archivo)

El Kremlin advirtió este jueves que entregar misiles estadounidenses Tomahawk a Ucrania sería una “escalada sin precedentes” en el conflicto, en vísperas del encuentro entre los presidentes Donald Trump y Volodimir Zelensky en la Casa Blanca. Además, surgieron rumores de un posible llamado de último momento entre el mandatario estadounidense y su par ruso Vladimir Putin.

Dmitri Peskov, portavoz de la presidencia rusa, aseguró que el tema Tomahawk está “presente todo el tiempo” en las discusiones bilaterales y que la transferencia de ese armamento sería “un paso significativo de cara a un nuevo nivel de escalada”.

La postura rusa al respecto es muy clara y bien conocida tanto en Washington como en Kiev”, sostuvo Peskov en declaraciones al canal Izvestia. Moscú asegura que este tipo de misiles amplía considerablemente el radio de acción de las fuerzas ucranianas y aumenta el riesgo para la seguridad nacional rusa, dado que tienen capacidad para alcanzar la capital y otros objetivos estratégicos.

Rusia también puso en duda que las fuerzas armadas de Ucrania puedan operar armamento tan avanzado sin la participación directa de aliados occidentales.

El portavoz del Kremlin, Dmitry
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov (REUTERS/Archivo)

Los ucranianos no podrían hacerlo por sí mismos”, dijo Peskov refiriéndose tanto al empleo de los Tomahawk como a los recientes ataques contra infraestructuras energéticas y fábricas militares en territorio ruso. El portavoz mencionó explícitamente a los servicios de inteligencia del Reino Unido como participantes activos en la planificación de estos ataques.

El diario británico Financial Times reveló que desde julio la administración Trump ha aumentado la cooperación con Kiev, proporcionando información de inteligencia y elementos para la planificación de ataques ucranianos sobre instalaciones claves en Rusia, como refinerías y fábricas de armamento. Este apoyo ha sido un factor relevante en los golpes recientes a la infraestructura rusa.

En paralelo, Donald Trump dejó abierta la posibilidad de suministrar misiles Tomahawk a Ucrania. Durante una declaración pública, el presidente estadounidense manifestó que Kiev contempla lanzar una ofensiva de mayor envergadura y que Estados Unidos deberá decidir si incrementa su respaldo militar en consecuencia.

“Todo lo que queremos de Putin es esto: deje de matar ucranianos y rusos, ya que está matando a muchos rusos”, planteó Trump, quien también cuestionó la solidez de la maquinaria de guerra rusa.

La administración rusa dijo que
La administración rusa dijo que la transferencia de proyectiles de largo alcance a Kiev aumentaría la tensión y ampliaría los riesgos para la seguridad nacional

Por el lado ucraniano, Volodimir Zelensky presentará a Trump una estrategia cuyo eje es reforzar las capacidades de ataque a larga distancia de Kiev. La delegación ucraniana, encabezada por el jefe de la oficina presidencial Andrí Yermak y la primera ministra Yulia Sviridenko, llegó a Estados Unidos para sostener encuentros con altos funcionarios y exponer la propuesta de aumentar el costo de la guerra para Rusia.

El asesor presidencial Mijailo Podoliak explicó en la red social X que Ucrania apuesta por “menos palabras y más capacidad de ataque de larga distancia”.

Podoliak insistió en que, tras el colapso de anteriores conversaciones diplomáticas, Washington busca “una nueva vía a la paz” basada en el poder de disuasión militar. Según el asesor, la estrategia ucraniana incluye la adquisición de misiles Tomahawk, la producción conjunta de drones y el fortalecimiento de la defensa aérea de Ucrania.

Los instrumentos son bien conocidos: misiles de crucero, producción conjunta de drones y defensas aéreas reforzadas”, resumió.

Podoliak también señaló que la ayuda de Estados Unidos no solo es económica, sino tecnológica y de inteligencia, facilitando los continuos ataques ucranianos a refinerías y fábricas rusas. Acerca de los Tomahawk, reconoció que no son una “arma universal” y que tienen limitaciones técnicas, pero subrayó la importancia estratégica de contar con ellos para profundizar la presión militar sobre Moscú.

Volodimir Zelensky presentará a Trump
Volodimir Zelensky presentará a Trump una estrategia cuyo eje es reforzar las capacidades de ataque a larga distancia de Kiev

“No se trata de si algo es posible o no. Se trata de lo que es necesario”, declaró.

Además, Podoliak dijo que Ucrania promueve un modelo de reparto de riesgos y beneficios: Kiev ayudaría a reducir la amenaza sobre Occidente, Europa financiaría parte del gasto militar y Estados Unidos consolidaría su posición como principal proveedor de armamento. “Queremos paz, así que debemos proyectar poder bien adentro en el corazón de Rusia”, puntualizó.

(Con información de EFE)