El caso que divide a Italia y la UE: una eurodiputada se salvó de ser juzgada en Hungría por un voto

El Parlamento del bloque rechazó levantar la inmunidad de Ilaria Salis, acusada de agredir a neonazis en Budapest en 2023. La ajustada votación desató un enfrentamiento entre los viceprimeros ministros Salvini y Tajani, que se acusan mutuamente de traición

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La eurodiputada italiana Ilaria Salis
La eurodiputada italiana Ilaria Salis celebra tras la votación del Parlamento Europeo que rechazó levantar su inmunidad. (X/laria Salis/@SalisIlaria)

Por un solo voto. Ilaria Salis se salvó este martes de ser juzgada en Hungría gracias a una ajustadísima votación en el Parlamento Europeo que rechazó levantar su inmunidad parlamentaria. El resultado —306 votos a favor de mantenerla, 305 en contra y 17 abstenciones— ha desatado tensiones políticas en Italia, donde los socios de la coalición gubernamental de Giorgia Meloni se acusan mutuamente de haber traicionado la línea oficial.

La decisión permite que Salis, militante de Alianza Verde e Izquierdas (AVS) y eurodiputada desde junio de 2024, no pueda ser juzgada en Budapest mientras mantenga su escaño. La activista italiana, de 40 años, fue detenida en febrero de 2023 acusada de agredir a varios neonazis durante las manifestaciones del llamado “Día del Honor”, un evento anual que conmemora a soldados alemanes y húngaros caídos durante el intento de ruptura del asedio soviético de Budapest en febrero de 1945. La conmemoración atrae a centenares de militantes de organizaciones neonazistas y neofascistas de toda Europa y suele ir acompañada de contramanifestaciones y eventos organizados por grupos pacifistas o antifascistas.

La italiana, que niega las acusaciones, pasó casi un año en prisión preventiva en un centro de alta seguridad húngaro, donde las condiciones de reclusión generaron indignación internacional. Las imágenes de Salis compareciendo ante el tribunal encadenada de pies y manos dieron la vuelta al mundo. Fue liberada tras resultar elegida al Parlamento Europeo, lo que le otorgó automáticamente inmunidad parlamentaria.

Ilaria Salis compareciendo ante un
Ilaria Salis compareciendo ante un tribunal húngaro encadenada de pies y manos en 2023.

Al conocerse el resultado, Salis se puso en pie en el hemiciclo con el puño en alto, rodeada de sus compañeros del grupo de La Izquierda, que la abrazaron y le entregaron un ramo de flores. “Es una victoria del antifascismo, de la Europa antifascista”, declaró tras la votación. En un comunicado posterior, la eurodiputada celebró que su caso “demuestra que la resistencia funciona” y que “cuando los representantes políticos, activistas y ciudadanos defienden juntos los valores democráticos, se puede confrontar y derrotar a fuerzas autoritarias”.

Voto secreto clave

El voto secreto fue clave en el desenlace. Aunque los grupos de centroderecha y extrema derecha —Conservadores y Reformistas Europeos, Patriotas por Europa y Europa de las Naciones Soberanas— habían anunciado su intención de votar a favor de retirarle la inmunidad, el resultado final sugiere que algunos eurodiputados del Partido Popular Europeo (PPE), el grupo más numeroso de la Eurocámara, rompieron la disciplina de voto.

El presidente del PPE, el alemán Manfred Weber, había indicado públicamente que su grupo apoyaría la revocación, argumentando que el supuesto delito se cometió antes del inicio del mandato de Salis y que “no hay que politizar la cuestión”. Sin embargo, fuentes parlamentarias reconocieron que fue necesario un intenso trabajo hasta el último minuto para convencer a eurodiputados del centroderecha de que mantuvieran la inmunidad. El último en decidirse fue un popular rumano que dio su apoyo apenas 15 minutos antes de la votación.

La decisión seguía la recomendación de la Comisión de Asuntos Jurídicos, que había determinado la existencia de un fumus persecutionispruebas concretas de persecución política— y que el procedimiento judicial buscaba “comprometer la actividad política” de Salis como eurodiputada.

En la misma sesión, el Parlamento también votó por amplia mayoría mantener la inmunidad del húngaro Péter Magyar, líder del principal partido opositor a Viktor Orbán y miembro del PPE.

El Parlamento también votó por
El Parlamento también votó por amplia mayoría mantener la inmunidad del húngaro Péter Magyar, líder del principal partido opositor a Viktor Orbán (REUTERS/Marton Monus)

Magyar enfrenta tres denuncias en Hungría, incluida una por supuestamente haber arrojado el teléfono móvil de un hombre al río Danubio tras ser grabado en una discoteca. Los sondeos sitúan a su partido Tisza con un 40% de intención de voto frente al 34% del Fidesz de Orbán de cara a las elecciones legislativas de abril de 2026.

Choque en la derecha italiana

La primera ministra italiana, Giorgia
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, flanqueada por el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani (izquierda) y el viceprimer ministro Matteo Salvini (a la derecha).(REUTERS/Matteo Minnella)

El resultado ha provocado un duro enfrentamiento entre los socios de la coalición de Meloni. El vicepremier y líder de la Liga, Matteo Salvini, arremetió en redes sociales: “Con el truco del voto secreto, pedido por grupos de izquierda, también algunos de los que se hacen llamar ‘centroderecha’ han votado para salvarla del juicio. ¡Vergüenza!”.

La alusión velada de Salvini fue interpretada como una acusación directa contra Forza Italia, el partido del otro vicepremier, Antonio Tajani, que forma parte del PPE en Estrasburgo. Tajani respondió con dureza: “Las calumnias, los insultos no los aceptamos. No hay nadie que traiciona ni hace juegos raros. Hemos sido siempre leales y coherentes”.

La eurodiputada leghista Silvia Sardone insistió: “No hay dudas de que ha sido el PPE quien ha salvado a Ilaria Salis”. Desde Forza Italia replicaron señalando que entre los Patriotas, grupo al que pertenece la Liga, se registraron 15 ausencias de 84 miembros, “que se han revelado determinantes”.

Hermanos de Italia, el partido de Meloni que forma parte del grupo Conservadores y Reformistas Europeos, también mostró su indignación. El eurodiputado Nicola Procaccini denunció que la decisión “humilla a Italia” y que “el Parlamento Europeo no es un lugar para eludir responsabilidades”.

La izquierda italiana, por el contrario, celebró el resultado. Los líderes de AVS, Angelo Bonelli y Nicola Fratoianni, declararon que se trata de “una hermosa jornada para quien cree en el Estado de derecho” y recordaron que “Ilaria nunca quiso esquivar el juicio, pero un proceso debe garantizar el derecho a la defensa y en Hungría esto habría sido imposible”.

En una entrevista publicada este martes por el Corriere della Sera, Salis reveló que durante la votación llevaba en el bolsillo “unos trozos de hierro” a modo de amuleto. “Estaba muy tensa, más que nada tenía terror de volver a Hungría, no tanto a la cárcel en sí”, confesó. La eurodiputada reiteró su disposición a ser procesada, pero en Italia: “La inmunidad sirve para protegerme del régimen húngaro, no de la justicia italiana”.