
La justicia rusa impuso medidas cautelares sobre activos pertenecientes a Gennady Sakharov, ex director de una división de la corporación estatal Rosatom, y al empresario Elgudzhi Kokosadze, ambos condenados por corrupción. Los bienes incautados incluyen propiedades inmobiliarias, efectivo, joyas y otros activos, con un valor total que supera los 284,4 millones de rublos, equivalentes a aproximadamente 3.7 millones de dólares estadounidenses.
Según informó la agencia TASS, el Tribunal Meshchansky de Moscú condenó a Sakharov a 12 años de prisión en una colonia penal de máxima seguridad y le impuso una multa de aproximadamente 228,2 millones de rublos (cerca de 2,9 millones de dólares) por aceptar un soborno de unos 32,6 millones de rublos (alrededor de 414.000 dólares) en su calidad de funcionario público. Kokosadze recibió una sentencia de 8 años de prisión y una multa de aproximadamente 98 millones de rublos (unos 1,2 millones de dólares) por ofrecer el soborno.
Durante la investigación, se confiscaron a Sakharov y su esposa alrededor de 26 tarjetas bancarias de diversas instituciones financieras en Moscú. A Kokosadze se le incautaron más de 20 tarjetas bancarias y acciones de la empresa JSC Institute Orgenergostroy, valoradas en más de 1 millón de rublos (aproximadamente 12.700 dólares). Además, se encontraron y confiscaron dispositivos electrónicos, incluyendo tabletas y teléfonos móviles, así como dos pasaportes extranjeros a nombre de Kokosadze.

Las joyas y relojes de lujo hallados en posesión de Kokosadze están valorados en aproximadamente 10 millones de rublos (alrededor de 127.000 dólares). Los bienes inmuebles incautados, que incluyen apartamentos, casas, garajes y terrenos, están ubicados en Moscú y en la región circundante. También se incautó un vehículo Land Rover Range Rover, propiedad de la empresa “Intens Engineering”, con un valor aproximado de 15,4 millones de rublos (cerca de 196.000 dólares).
El tribunal ordenó la suspensión de todas las operaciones en las cuentas bancarias de Sakharov y Kokosadze, dentro de los límites de 2.300 millones de rublos (aproximadamente 29,2 millones de dólares) y 2.000 millones de rublos (alrededor de 25,4 millones de dólares), respectivamente. Estas medidas permanecerán vigentes hasta que las sentencias sean definitivas.

El proceso judicial contra Sakharov comenzó el 27 de noviembre del año pasado. Fue acusado de aceptar un soborno de aproximadamente 32,6 millones de rublos (unos 414.000 dólares) en su rol como director de inversiones de capital y supervisión de construcción estatal en Rosatom. Kokosadze fue acusado de ofrecer el soborno. Sakharov fue detenido preventivamente a finales de marzo de 2024, mientras que Kokosadze fue liberado bajo compromiso de no abandonar el país tras declararse culpable.
Sakharov admitió parcialmente su culpabilidad, alegando que el dinero recibido correspondía a servicios de consultoría relacionados con la construcción de la planta MSU Valley y otros servicios fuera de Rosatom. La sentencia aún no ha entrado en vigor y puede ser apelada.
Últimas Noticias
A horas de la reunión con Witkoff, Putin se mostró con uniforme militar y anunció la toma de una ciudad clave en Ucrania
El presidente ruso calificó la supuesta captura de Pokrovsk como crucial para avanzar hacia el control completo de la región de Donetsk. Kiev dijo que la ciudad no cayó y que se trata de pura propaganda
Adolescentes australianos llevan al gobierno a los tribunales por la ley de redes sociales
Dos jóvenes de 15 años presentaron una demanda ante el Tribunal Superior para frenar la entrada en vigor de la prohibición de acceso a plataformas digitales para menores de 16 años en Australia

La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos recomendó una “prohibición total de viaje” desde varios países
Kristi Noem sostuvo que la medida apuntará a ciudadanos de naciones que “inundan de asesinos, sanguijuelas y adictos a los subsidios” el territorio norteamericano
“Como si me comiera desde dentro”: la enfermedad que ataca los huesos en el norte de Kenia
Los habitantes del norte del país sufren por la escasez de fármacos y diagnósticos adecuados, mientras las organizaciones humanitarias intentan suplir la ausencia de apoyo estatal y la falta de datos oficiales sobre la enfermedad


