Agresión en patota en una escuela de Montevideo generó alarma en maestros y autoridades: “Es un antes y un después”

Un enfrentamiento entre niñas motivó que la madre llegue acompañada de otros adultos a la escuela y se enfrente a otros padres, docentes y hasta estudiantes

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Grupo de adultos ingresa a escuela de Uruguay y se pelea con maestros y alumnos

Un grupo de adultos ingresó en patota a la escuela 123 de Montevideo, ubicada en el barrio periférico Jardines del Hipódromo. Allí se encontraron con padres que habían ido a retirar a alumnos del día anterior, maestros y niños que todavía estaban en el centro educativo y los agredieron. El nerviosismo que generó esta situación se mantuvo en las horas siguientes y los maestros decidieron paralizar la actividad y establecer algunas jornadas de reflexión.

Cada vez que hay una agresión a una maestra, hay un paro en la actividad ya que así está establecido en los protocolos. Sin embargo, en este caso hubo un quiebre: se trató de una agresión masiva, que para los maestros marca un antes y un después y también preocupa a las autoridades.

La agresión fue después de que una niña regresara a su casa con moretones tras pelearse con otra estudiante. Su madre fue al día siguiente a la escuela junto a otras personas para buscar a la menor que había golpeado a su hija. Fue entonces que padres y maestras quisieron intervenir para frenar la situación, pero todos fueron agredidos.

Fue una situación inédita. De hecho, las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) quedaron sorprendidas porque nunca se habían enfrentado a algo así. Algunos padres terminaron amenazados tras el episodio y decidieron presentar una denuncia penal. La Fiscalía de Flagrancia comenzó una investigación.

La fiscal Patricia Rodríguez es quien está investigando el caso y ya ordenó las primeras directrices para avanzar, informó el noticiero Telemundo de Canal 12. En primer lugar, dispuso la identificación de la madre que ingresó al local escolar y que agredió a la maestra y varios alumnos, además de algunos padres.

Esta mujer ya fue identificada y se encuentra a disposición de la Fiscalía.

Además, la fiscal también solicitó que las víctimas sean examinadas por un médico forense, con el objetivo de constatar las lesiones que sufrieron. Hasta el momento, no se ha emitido ninguna orden de detención ni citación a declarar, y se aguardan los resultados de las primeras pericias médicas.

La Asociación de Maestros del Uruguay (Ademu) expresó que esta agresión significó un quiebre porque, hasta ahora, la violencia en los centros educativos se había concentrado en los maestros. “Este es el quinto episodio en lo que va del año, pero con estas características es el primero”, dijo Paola López, la secretaria general de Ademu, al Canal 12 local. “Es una bisagra. Es un antes y un después con lo que veníamos viviendo. Lamentamos decir pero es parte de las denuncias que veníamos señalando sobre el nivel del incremento de la violencia”, expresó.

Los maestros piden mayores garantías y piden a las autoridades que los protocolos sean modificados.

Asamblea del sindicato de maestros
Asamblea del sindicato de maestros del Uruguay tras agresión en patota en una escuela (@ademu.montevideo)

Lo sucedido ayer es una denuncia a nivel de la sociedad, de entender que la escuela pública necesita ser respetada y valorada. Hoy no está siendo”, criticó López.

Ademu es crítica con la actuación de las autoridades en este tema. En particular, cuestionaron que el Ministerio del Interior, a cargo de la seguridad en el país, no actuó de la manera que entienden que debería haberlo hecho. También piden que la Justicia se expida más rápido cuando analiza este tipo de situaciones.

Una de las medidas que piden es la contratación de psicólogos y asistentes sociales de manera permanente en los centros educativos. Hoy, estos profesionales trabajan en varios centros.

Para las autoridades de la educación, en tanto, el hecho es “inadmisible”. “Cuando entrás a la escuela, la primera regla que aprendés es que no se puede resolver pegando”, dijo Pablo Caggiani, el presidente de la ANEP.