Con funerales masivos y dolor en las calles, República Dominicana despidió a las víctimas de la tragedia en la discoteca Jet Set

República Dominicana despidió este jueves a parte de las más de 200 víctimas mortales que dejó el colapso del techo de la discoteca Jet Set, ocurrido la madrugada del martes 8 de abril en Santo Domingo durante una presentación del merenguero Rubby Pérez. Mientras tanto, familiares continúan aguardando por la entrega de los cuerpos de sus seres queridos, en medio de escenas de dolor, incertidumbre y tensión.

El siniestro, que también dejó al menos 190 heridos, fue catalogado por el gobierno como la mayor tragedia ocurrida en el país en años recientes. Las labores de rescate y recuperación de cuerpos concluyeron este jueves tras tres días de intensa búsqueda entre estructuras colapsadas de zinc, concreto y acero.

Más de 300 socorristas, apoyados por grúas, martillos hidráulicos y perros de búsqueda, participaron en las tareas de remoción de escombros. Desde el aire, las imágenes del lugar muestran un enorme agujero donde colapsó el techo del local nocturno.

Frente a la morgue forense, una multitud permanece desde hace días en espera de noticias, mientras un listado con los nombres de los fallecidos fue colocado sobre una lona improvisada.

El ministro de Salud, Víctor Atallah, aseguró que el Instituto de Medicina Legal trabaja a su máxima capacidad: “No va a quedar nadie sin identificar y nadie sin tener una respuesta. Vamos a mover hasta la última piedra que haya que mover”.

El Gobierno dominicano decretó tres días adicionales de duelo nacional, los días 11, 12 y 13 de abril, durante los cuales la bandera nacional deberá ondear a media asta en edificios públicos y recintos militares.

La medida fue oficializada mediante un decreto firmado por el presidente Luis Abinader, quien además acompañó el funeral del cantante Rubby Pérez en el Teatro Nacional, donde se instaló una capilla ardiente.

En el exterior del recinto, familiares y seguidores de Rubby Pérez soltaron globos blancos en señal de homenaje. Sobre el ataúd reposaban las banderas de República Dominicana y Venezuela, país donde el intérprete también alcanzó un alto reconocimiento.

Durante el homenaje, su hija, Zulinka Pérez, interpretó fragmentos de sus canciones, mientras decenas de personas entonaban letras como “¡Volveré... serás mi estrella, si tú me esperas, volveré!”.

En paralelo, en la localidad de Haina, se celebró un funeral colectivo en una cancha de baloncesto, donde fueron velados al menos veinte cuerpos en ataúdes alineados uno al lado del otro mientras familiares se despedían.

El director de Estrategia y Comunicación Gubernamental, Homero Figueroa, anunció el fin de la fase de rescate y el inicio de una nueva etapa centrada en esclarecer los hechos.

“Las brigadas que trabajaron descansarán por primera vez y comenzarán a compartir la tristeza colectiva. Ahora toca entender y explicar lo que pasó, sin caer en juicios apresurados”, señaló.

“Debemos aceptar que todos somos víctimas de esta tragedia: quienes la vivieron, quienes perdieron a alguien, quienes todavía sufren en los hospitales, quienes hoy la sienten como propia desde la distancia. Y también nosotros, como Estado, como gobierno, como dominicanos”, agregó.

El Ejecutivo dominicano ordenó la conformación de un equipo técnico integrado por expertos nacionales e internacionales para investigar las causas del derrumbe. “Ese estudio técnico se hará con total apertura”, subrayó Figueroa. Según el gobierno, no se adelantará ninguna hipótesis hasta tener conclusiones verificadas.

(Con información de EP y AFP)