
La gobernación de San Pablo, el estado más poblado de Brasil con 46 millones de habitantes y el más afectado por la pandemia del COVID-19, publicó este martes un decreto que obliga a sus cerca de 570.000 empleados públicos a presentar certificado de vacunación contra el coronavirus.
El decreto determina que todos los funcionarios públicos vinculados directa o indirectamente a la gobernación de San Pablo o a órganos de la administración regional tienen plazo hasta el próximo domingo para presentar el certificado que compruebe que ya cuentan con el ciclo completo de inmunización (dos dosis o la vacuna de dosis única).
La gobernación solo admitirá como excepciones a los empleados públicos que presenten un comprobante médico en el que demuestren que tienen alguna condición que contraindica la vacuna.
“Quien viole el plazo fijado en el decreto estará sujeto a un proceso administrativo interno por eventual responsabilidad disciplinaria”, según un comunicado divulgado por la gobernación, que por ahora no estableció las posibles sanciones que serán impuestas a quien no presente el certificado.

El gobierno regional únicamente aclaró que las posibles sanciones están previstas en el Estatuto de los Funcionarios Públicos del Estado, en los Reglamentos Disciplinarios y en los respectivos códigos de conducta de las empresas públicas.
A nivel privado, algunas empresas brasileñas ya exigen el certificado de vacunación a sus empleados como condición para mantener sus contratos y hasta han despedido sin pagar indemnización a quienes se niegan a vacunarse.
El Gobierno del presidente Jair Bolsonaro, el líder de la negacionista ultraderecha brasileña, uno de los gobernantes más escépticos sobre la gravedad de la pandemia y un opositor al certificado de vacunación, hasta el punto que él no se ha vacunado, llegó a publicar un decreto por el que prohibía a las empresas privadas exigirle el comprobante a sus empleados.
Pero la Corte Suprema dejó sin efectos el decreto y autorizó a las empresas a exigir el comprobante y a despedir a quien no lo presente.

La alcaldía de San Pablo, capital regional y mayor ciudad de Brasil, ya exige el certificado de vacunación a sus empleados públicos pero hasta ahora no se lo pide a las personas que acceden a las edificaciones públicas.
El Concejo municipal de San Pablo, el Tribunal regional de Justicia y el Ministerio Público, en cambio, sí exigen el comprobante a las personas que necesitan acceder a sus predios administrativos.
Pero los casos de personas que se niegan a vacunarse son mínimos en San Pablo, estado en el que, según cifras oficiales, el 96% de los adultos ya cuenta con el ciclo completo de inmunización contra el COVID-19.
Brasil es uno de los países más castigados por la pandemia del COVID-19, el segundo en número de muertos por coronavirus detrás de Estados Unidos, con unos 619.000 víctimas, y el tercero en contagios después de EEUU e India, con unos 22,3 millones de casos.
(Con información de EFE)
SEGUIR LEYENDO:
Últimas Noticias
La Fiscalía de Costa Rica acusó al presidente Rodrigo Chaves de financiamiento político ilegal
Se presentó una acusación formal por presunta participación en delitos derivados de su campaña electoral de 2022

Daniel Noboa inició gira internacional con agenda marcada por el pragmatismo económico
La gira busca posicionar al Ecuador en escenarios clave de cooperación económica y política

Las monedas en América Latina resisten, pero las bolsas cayeron en medio de las tensiones en Medio Oriente
La cautela de los inversores prevaleció

César Siles, el séptimo ministro de Luis Arce bajo sospecha de corrupción en Bolivia
El ex ministro de Justicia fue enviado a prisión acusado de tráfico de influencias tras la filtración de un audio. Otros seis miembros del gabinete protagonizaron escándalos anteriormente

Robaron un auto con un bebé dentro y lo dejaron abandonado en Santiago de Chile
El menor de siete meses fue hallado en su silla de seguridad sano y salvo
