David Rodríguez, a la huída al preguntarle por el supuesto ultimátum a Anabel Pantoja

La pareja de la colaboradora televisiva evita dialogar con reporteros tras la polémica sobre cómo se celebrará la Navidad, mientras crecen versiones de un problema familiar que mantiene al círculo cercano sumido en una fuerte controversia

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Algunas fuentes implicadas han preferido mantenerse en silencio frente a las versiones circulantes respecto a un supuesto ultimátum familiar que afecta la dinámica en la familia Pantoja. Según reportó Lecturas, este clima de reserva se mantiene en el entorno más cercano de Anabel Pantoja y parece buscar evitar el incremento de la controversia, especialmente tras la reciente divulgación de presuntas exigencias en torno a la celebración de la Nochebuena.

Durante la mañana del miércoles, Europa Press captó la llegada de David Rodríguez, pareja de Anabel Pantoja, a su lugar de trabajo. Los reporteros presentes intentaron obtener declaraciones sobre los rumores que involucran a Merchi, madre de Anabel, y acerca del supuesto conflicto familiar. Rodríguez optó por aumentar la velocidad y alejarse del lugar en un patinete eléctrico frente a las cámaras, sin acceder a responder las preguntas. La reacción, difundida en video por Europa Press, intensificó la atención sobre el ambiente familiar de los Pantoja ante la proximidad de las festividades navideñas.

Las especulaciones han ganado fuerza en los últimos días debido al relato de Luis Pliego, director de la revista Lecturas, quien sostuvo en el programa ‘El tiempo justo’ que David Rodríguez habría dado un ultimátum a Anabel Pantoja para que no pasara la Nochebuena junto a su madre. Esta afirmación, difundida por Lecturas, introduce un nuevo matiz en la relación del entorno familiar, señalando una transición de la fría distancia existente desde hace tiempo hacia una hostilidad abierta que, según el medio, transformaría la convivencia en fechas señaladas.

Europa Press detalló que, a pesar de la magnitud mediática de la noticia, ni Anabel Pantoja ni David Rodríguez han confirmado ni desmentido públicamente las versiones sobre el desencuentro familiar. La ausencia de una postura clara ante los medios mantiene activo el interés informativo y fomenta la proliferación de hipótesis sobre el rumbo de las relaciones familiares y la organización de las celebraciones.

Según publicó Lecturas, antes de la aparición de estas versiones, las relaciones dentro de la familia Pantoja se describían como distantes y complicadas, sin llegar al nivel de confrontación directa. El medio precisa que el cambio llegó con la afirmación de Pliego respecto a que “la tensión da paso a una hostilidad manifiesta” tras la supuesta prohibición de Anabel para compartir la Nochebuena con Merchi. De acuerdo con Europa Press, esto posiciona nuevamente a Anabel ante una situación personal delicada, haciendo incierta la forma en que se desarrollarán los encuentros familiares en las próximas fechas.

Las fuentes alrededor de la colaboradora televisiva, consultadas por Lecturas, han preferido no intervenir públicamente ni para confirmar ni para rechazar el supuesto ultimátum. Esta opción refuerza el carácter reservado de la situación y, según Lecturas, busca evitar que la polémica escale entre el público y los medios.

Mientras tanto, David Rodríguez se ha mostrado evasivo ante la prensa, reforzando la imagen de que persiste un desacuerdo sin resolución visible. Europa Press indicó que la cobertura mediática sobre las próximas apariciones de la pareja será constante, especialmente a medida que se acerquen las fechas claves del calendario navideño, con el objetivo de captar cualquier señal que esclarezca el estado real de las relaciones familiares.

Hasta el momento, Luis Pliego, a través de Lecturas, ha sido el único en precisar el alcance del conflicto, insistiendo en que el paso de la tensión a la hostilidad constituye el elemento central de la situación que atraviesa actualmente la familia Pantoja. Europa Press observó que las consecuencias eventuales de este episodio podrían modificar la dinámica de las celebraciones familiares, ante la expectativa generada por el seguimiento que mantiene la prensa especializada sobre el caso.