Un palestino muerto por disparos israelíes en el norte de la Franja de Gaza a pesar del alto el fuego

Fuentes médicas confirman el fallecimiento de un joven en Yabalia tras ser alcanzado por fuego de soldados israelíes, mientras crecen las hostilidades y se reportan bombardeos y destrucción de edificios en distintos puntos del enclave palestino

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Las recientes explosiones y daños en edificaciones al este de Jan Yunís y ataques en distintas zonas del enclave palestino marcan un aumento de las hostilidades en la región, superando los límites de la llamada Línea Amarilla establecida tras el inicio del alto el fuego en la Franja de Gaza. De acuerdo con la agencia de noticias WAFA, fuentes médicas confirmaron este sábado la muerte de un joven palestino identificado como Mohamed Sabri al Adham, de 19 años, en Yabalia al Nazla, después de recibir disparos efectuados por militares israelíes.

Según consignó WAFA, el incidente tuvo lugar en el norte de la Franja de Gaza en la mañana del sábado, cuando el joven cruzó la Línea Amarilla, demarcación instituida como límite durante la tregua que entró en vigencia el 11 de octubre. El medio detalló también que en las horas previas al asesinato se reportaron bombardeos en el barrio de Al Tuffá, al este de la ciudad de Gaza, y ataques en el norte de Rafá, identificando una intensificación de la violencia en diferentes núcleos urbanos del enclave.

De acuerdo con lo informado por las Fuerzas Armadas israelíes, un mensaje difundido en sus redes sociales confirmó la muerte de una persona en una operación ejecutada por la Séptima Brigada. El comunicado oficial señaló: "Dos terroristas cruzaron la Línea Amarilla y se acercaron a las fuerzas de una manera que representaba una amenaza inmediata. Inmediatamente después de la identificación, las fuerzas eliminaron a un terrorista para eliminar la amenaza". El informe del Ejército israelí se refirió así al incidente en el que perdió la vida Mohamed Sabri al Adham, atribuyendo la reacción militar a motivos de seguridad ante una supuesta amenaza.

La agencia WAFA detalló que desde la instauración del alto el fuego el 11 de octubre, al menos 386 civiles palestinos han perdido la vida y se han contabilizado 1.018 heridos en acciones vinculadas a la presencia militar de Israel en Gaza. Además, WAFA reportó la recuperación de 628 cuerpos de víctimas fallecidas en ocasiones previas pero cuyos restos no habían sido recuperados.

El balance total de víctimas, publicado por la agencia palestina WAFA tomando datos desde el inicio de la ofensiva militar israelí sobre Gaza el 7 de octubre de 2023, asciende a 70.654 muertos y 171.095 heridos. Estos balances reflejan la magnitud del impacto humanitario en la Franja, donde la población ha experimentado episodios repetidos de violencia, desplazamiento y destrucción de infraestructuras.

WAFA también informó sobre daños materiales considerables producto de los bombardeos recientes, incluyendo voladuras de edificios al este de Jan Yunís, además de las operaciones militares en curso en distintas áreas del enclave palestino. Los ataques en áreas densamente pobladas dificultan la atención médica y el rescate, incrementando la presión sobre los hospitales y centros de emergencia.

La continua inestabilidad y las operaciones militares han creado un entorno marcado por la inseguridad y el deterioro de las condiciones humanitarias, según la agencia palestina. Las cifras divulgadas por WAFA muestran un saldo humano significativo, no solo durante los combates activos sino también en el contexto de los altos el fuego que, aunque buscaban al menos una atenuación temporal de la violencia, no lograron detener las bajas y la escalada de tensiones en la región.

Las informaciones recopiladas por WAFA evidencian la persistente vulnerabilidad de la población civil de Gaza, que afronta tanto las consecuencias inmediatas de los bombardeos como las pérdidas humanas resultantes de los enfrentamientos. El cruce de la Línea Amarilla, la continuidad de las operaciones militares y la presencia de fuerzas israelíes han sostenido un clima de enfrentamiento en la Franja, donde la asistencia humanitaria y la seguridad de la población siguen siendo desafíos fundamentales.