Chipre condecora a Valentín Fuster con el título de doctor 'honoris causa' y el Premio Presidencial de Honor

Durante un acto celebrado en el marco del XIII Congreso Médico Internacional, el presidente de Chipre, Nikos Christodoulides, otorgó a Valentín Fuster, director general del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), la distinción de doctor ‘honoris causa’ de la Universidad Europea de Chipre. De acuerdo con la información publicada, este reconocimiento está destinado únicamente a figuras cuyas aportaciones científicas y dedicación han provocado un “profundo impacto” en la sociedad. Según detalló el medio, además de este título académico, Fuster recibió el Premio Presidencial de Honor como reconocimiento a su trayectoria en la lucha contra las enfermedades cardiovasculares y su compromiso sostenido con el progreso de la ciencia médica.

El medio reportó que Fuster, quien también se desempeña como presidente del Hospital Cardíaco Fuster Monte Sinaí y médico jefe en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York, manifestó durante la ceremonia que estos galardones constituyen un homenaje no solo a su labor personal, sino también al esfuerzo colectivo de la comunidad científica por mejorar la salud cardiovascular en la población global. El cardiólogo subrayó la importancia de la colaboración y la educación como pilares fundamentales para mantener un avance constante en el campo.

Según informó el medio, la carrera de Fuster incluye investigaciones de referencia sobre mecanismos cardiovasculares, innovaciones en diagnóstico y tratamiento, así como el desarrollo de estrategias efectivas para enfrentar el desafío que representan las enfermedades no transmisibles. El Congreso resaltó sus aportes a la prevención y el tratamiento asequible de estas enfermedades, considerados fundamentales en la transformación de la práctica clínica internacional.

Tal como consignó la fuente, las autoridades sanitarias presentes en el foro académico destacaron que los trabajos de Fuster han inspirado mejoras sustanciales en la prevención, el abordaje terapéutico y la difusión de prácticas educativas asociadas a la salud cardiovascular. El médico español, a lo largo de su carrera, ha impulsado la investigación aplicada, la transferencia de conocimiento y la implementación de programas centrados en educación para la salud, elementos que según los organizadores han motivado la concesión de los reconocimientos.

El Premio Presidencial de Honor y el doctorado ‘honoris causa’ recibidos por Fuster en Chipre se suman a una lista de distinciones acumuladas en décadas por su trabajo científico, que según el medio, han propiciado cambios en las políticas de salud y el manejo clínico de enfermedades cardiovasculares a escala internacional. Su liderazgo en el ámbito hospitalario y académico estadounidense, junto con los avances logrados en proyectos colaborativos internacionales, posicionan su labor como un referente destacado dentro de la medicina global.