El secretario de Defensa ataca la diversidad en el Ejército: "No más hombres con vestidos ni delirios de género"

Guardar

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, ha atacado este martes la diversidad racial y sexual en el Ejército y ha abogado por cumplir con estándares estrictos que acaben con las barbas largas de los militares, así como con el sobrepeso.

"No más meses en conmemoración de la identidad, oficinas de diversidad, equidad e inclusión; hombres con vestidos. No más culto al cambio climático. No más división, distracción ni delirios de género", ha subrayado durante un evento con militares celebrado en la ciudad de Quantico, ubicada en el estado de Virginia.

Hegseth ha asegurado que el Departamento de Defensa se ha convertido en el departamento de lo "woke" y que. "Durante demasiado tiempo, hemos promovido a demasiados uniformados por razones equivocadas: en función de su raza, en función de cuotas de género o en función de supuestos primeros logros históricos", ha dicho.

Asimismo, ha elogiado a la Administración liderada por el presidente Donald Trump por "eliminar la justicia social" y "la basura políticamente correcta". "Se acabaron las barbas, el pelo largo y las expresiones individuales superficiales", ha sentenciado.

En este sentido, ha abogado por adherirse a estándares estrictos y dejar de tener "un Ejército lleno de paganos nórdicos". "Todo empieza con la apariencia", ha resaltado, agregando que "es completamente inaceptable ver a generales gordos en los pasillos del Pentágono".

Hegseth también ha instado a todos aquellos que no comulguen con estas normas a abandonar la autoridad castrense. "No quiero que mi hijo sirva junto a tropas que no están en forma o en una unidad de combate con mujeres que no pueden cumplir con los mismos estándares físicos que los hombres", ha resaltado.

El secretario de Defensa estadounidense ha defendido que "no se trata de impedir que las mujeres" entren en el Ejército. "Valoramos mucho el impacto de las tropas femeninas, pero cuando se trata de cualquier trabajo que requiera fuerza física de combate, los estándares físicos deben ser altos y neutrales", ha argüido.

Poco después de llegar a la Casa Blanca, Trump firmó una serie de órdenes ejecutivas para reestructurar el Ejército estadounidense, incluida la prohibición de que los militares transgénero sirvan en las Fuerzas Armadas del país o la reincorporación con pago retroactivo de los miembros que fueron dados de baja por negarse a vacunarse contra la COVID-19.

La Administración Trump ha eliminado los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI, por sus siglas en inglés), al considerar que "socavan" la meritocracia y "las conciencias de los estadounidenses al participar en una discriminación racial y sexual odiosa".