Muere una mujer detenida hace seis meses después de caer en coma en una prisión de Irán

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Una mujer encarcelada en Irán desde hace seis meses ha muerto tras ser hospitalizada de urgencia después de caer en coma en prisión, según han confirmado las autoridades, en lo que varias ONG han vinculado con una negativa a darle la atención médica que necesitaba cuando estaba bajo custodia.

Las autoridades iraníes han señalado que la fallecida, identificada como Somayé Rashidi, de 42 años, habría muerto en el hospital a causa de problemas médicos previos a su detención en abril, si bien la organización no gubernamental Hengaw, con sede en Noruega, ha achacado el deterioro de su estado a la ausencia de atención médica.

Rashidi, quien ya había sido detenida en 2022 y 2023, estaba acusada de ser parte de la Organización de los Muyahidín del Pueblo de Irán (PMOI), considerada un grupo terrorista por Teherán, según ha recogido la agencia iraní de noticias Tasnim, que señala que las investigaciones sobre la detenida apuntan a que recibió dinero del grupo para llevar a cabo labores de "sabotaje".

Hengaw ha resaltado que la mujer murió en el Hospital Mufaté de Varamin "después de caer en coma por una enfermedad y la falta de tratamiento médico mientras estaba bajo custodia en la cárcel de Qarchak", situada cerca de la capital, Teherán, al tiempo que ha asegurado que fue detenida por "escribir eslóganes de protesta en el barrio de Javadiyé, en Teherán".

"Las fuerzas de seguridad la agredieron durante el arresto y la imputaron por 'propaganda contra el Estado'", ha manifestado la ONG, que ha señalado que la detenida estaba en la prisión de Evin, si bien tuvo que ser trasladada a la de Qarchak después del bombardeo israelí contra la citada cárcel durante su ofensiva militar en junio contra el país centroasiático.

Por su parte, la ONG Iran Human Rights (IHR) ha afirmado que Rashidi "cayó enferma de gravedad en prisión y, pese a las repetidas peticiones de otras presas para que fuera trasladada a un hospital, las autoridades carcelarias se negaron hasta que perdió la consciencia y cayó en coma", en lo que supone "la segunda mujer muerta por negligencia en esta prisión" en los últimos días.

"Pedimos que una comisión independiente de investigación analice las causas de la muerte de estas dos mujeres. La responsabilidad de salvaguardar la vida y la salud de los presos recae en la Organización de Prisiones, el jefe del poder judicial y, en última instancia, el líder supremo de la República Islámica", ha zanjado el director de IHR, Mahmud Amiri-Moqadam.

"Deben rendir cuentas", ha señalado, antes de denunciar que "la prisión de Qarchak es un símbolo de la flagrante negación de la humanidad y la dignidad humana". "El funcionamiento continuo de estas instalaciones es una mancha en la conciencia mundial", ha dicho Amiri-Moqadam, quien ha insistido en que "la comunidad internacional no debe permanecer en silencio ante estas violaciones generalizadas de los Derechos Humanos".