ONU alerta que el conflicto armado colombiano pone en riesgo la supervivencia de indígenas

Comunidades originarias y afrodescendientes, especialmente en Chocó, enfrentan amenazas crecientes por la expansión de grupos ilegales, hechos que generan desplazamientos forzados, reclutamiento infantil y ataques a defensores, según denuncia la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas

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Bogotá, 20 ago (EFE).- La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos manifestó este miércoles que la violencia de los grupos armados contra comunidades indígenas y afrodescendientes del departamento del Chocó (fronterizo con Panamá) pone en riesgo su supervivencia física y cultural.

"El futuro de la juventud colombiana y de comunidades enteras en Chocó se ve cada vez más asfixiado por el control brutal y creciente de los grupos armados no estatales, sobre todos los aspectos de la vida cotidiana", expresó en un comunicado el representante de la ONU en Colombia, Scott Campbell, tras visitar esa región.

Los afectados por estos ataques son los pueblos indígenas Emberá Dobida, Emberá Chami, Emberá Katío, Emberá Wounnan, Zenú, y Tule.

"Los grupos armados no estatales han ocupado el vacío devastador que dejó el Estado en la protección y en las oportunidades para los jóvenes, lo que ha dado lugar a una amplia gama de violaciones de los derechos humanos", expresó Campbell.

En ese sentido lamentó "el aumento del reclutamiento forzado y uso de niños y niñas de solo 10 años, y la falta de garantía de derechos", y señaló que les "han reportado también el aumento de suicidios entre los jóvenes".

"Las acciones de los grupos armados no estatales amenazan la vida y la labor de las personas defensoras y de líderes y lideresas. Estos grupos además extorsionan a las comunidades e instalan artefactos explosivos prohibidos por el DIH (derecho internacional humanitario)", precisó el representante.

Campbell manifestó además que le informaron de que en el Chocó hay "ocupación de varias escuelas por parte de grupos armados no estatales" y que los maestros y defensores de derechos humanos reciben amenazas por tratar "de impedir el reclutamiento de niñas, niños y adolescentes".

"Este crimen tiene un alto subregistro en Chocó debido al control territorial de los grupos armados no estatales. Reclutar niñas, niños y adolescentes afecta también y de forma directa la pervivencia física y cultura de los pueblos indígenas, y de las comunidades afrodescendientes porque cortan la cultura y el arraigo ancestral de estos pueblos", dijo.

En el Chocó operan, principalmente, la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo, la principal banda criminal del país.

En julio pasado, el ELN realizó un paro armado de 48 horas por la "grave situación humanitaria" y el supuesto avance del "terrorismo de Estado" en la región.

En los paros armados, este grupo armado ilegal suele restringir el desplazamiento de vehículos por carreteras y ríos, la movilidad de las personas e incluso ordena el cierre de comercios, además de cometer agresiones y amenazar a todo aquel que no cumpla estas restricciones. EFE