La histórica Unión de Campesinos de EEUU denuncia heridos críticos y desaparecidos durante las redadas del ICE

Guardar

El histórico sindicato de la Unión de Campesinos de EEUU ha denunciado que un número no especificado de trabajadores del campo han resultado heridos en estado crítico crítico y varios se encuentran desaparecidos durante la gran redada efectuada el jueves por agentes del servicio migratorio y de aduanas (ICE) en las Granjas de Glass House, núcleo de la industria del cannabis legal de Califonia, en el condado de Ventura.

Existe al menos un herido crítico confirmado por el sindicato y por los hospitales: un trabajador que se precipitó desde el techo de un invernadero en Camarillo, en un incidente bajo investigación, según fuentes médicas y policiales al 'Los Angeles Times'.

El portavoz del Departamento de Bomberos del Condado de Ventura, Andrew Dowd, ha confirmado al mismo medio que ocho personas fueron trasladadas desde las instalaciones de Camarillo y sus alrededores el jueves por la tarde a hospitales locales por heridas, pero desconocía su gravedad. Dowd también ha indicado que otras cuatro personas fueron atendidas en el lugar por lesiones leves.

Las redadas se saldaron con al menos 200 arrestos tras uno de los incidentes más graves desde que comenzaron las operaciones del ICE contra los migrantes sin documentos en el país. Organizaciones civiles han denunciado como ilegales estas redadas, efectuadas por agentes no identificados y enmascarados que se niegan a proporcionar las órdenes judiciales de intervención bajo las que deberían actuar.

El opositor Partido Demócrata ha llegado a acusar al ICE de haberse convertido en una especie de "gestapo" (la policía secreta del régimen nazi) a las órdenes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha denunciado sobre las redadas de Ventura que grupos de "matones" atacaron con piedras a las fuerzas de seguridad cuando estaban realizando su trabajo.

En un comunicado publicado a última hora del viernes, la Unión de Campesinos condena que "muchos trabajadores, incluidos ciudadanos estadounidenses, fueron retenidos por las autoridades federales en las granjas durante ocho horas o más" y que "solo fueron liberados después de que se les obligó a borrar fotos y videos de la redada".

La Unión de Campesinos ha aprovechado para condenar el empleo de migrantes menores de edad en estas granjas. "Por desgracia no es raro que haya adolescentes trabajando en estos campos, pero detener y deportar a estos jóvenes no es la solución", ha manifestado el sindicato creado por César Chávez, Dolores Huerta hace ya más de medio siglo.

"Estas acciones federales violentas y crueles aterrorizan a las comunidades estadounidenses, interrumpen la cadena de suministro de alimentos, amenazan vidas y separan familias. No existe ninguna ciudad, estado o distrito federal donde sea legal aterrorizar y detener a personas por ser de piel oscura y trabajar en la agricultura. Estas redadas deben cesar de inmediato", concluye el sindicato.