(Crónica) El Chelsea doblega al Benfica en el partido de las cinco horas

Guardar

El Chelsea se impuso (1-4) al Benfica en la prórroga después de casi cinco horas de un encuentro marcado por la suspensión por clima extremo en el Bank of America Stadium (Charlotte), y se medirá en cuartos de final del Mundial de Clubes con Palmeiras, que abrió los cruces eliminando a Botafogo también en el tiempo extra.

El cuadro inglés fue mejor que el portugués, pero la falta de puntería y las manos de Anatoliy Trubin impidieron que el Chelsea se adelantara desde los primeros minutos. El español Marc Cucurella fue un filón para los de azul y Cole Palmer también rondó el área rival con bastante peligro, pero no fue hasta el 64' cuando llegó el gol.

El capitán Reece James sorprendió a Trubin con una falta directa y el Benfica siguió con su incapacidad ofensiva en su intento de responder. Entonces, los nubarrones sobre la ciudad más grande de Carolina del Norte cambiaron el guion con una suspensión que se alargó a las dos horas. En la reanudación, con el oficio de Ángel di María, el Benfica logró el empate, del argentino, de penalti.

Sin embargo, al minuto del tiempo extra, el cuadro luso se quedó con diez por la segunda amarilla de Gianluca Prestianni. Los 'blue' aumentaron su dominio y, aunque a la contra pudo sorprender el equipo lisboeta, encontraron los goles de golpe con Christopher Nkunku, Pedro Neto y Kiernan Dewsbury-Hall para avanzar a cuartos de final casi cinco horas después del pitido inicial.

En el turno anterior, Paulinho, que saltó desde el banquillo en el segundo tiempo, marcó la diferencia en el Lincoln Financial Field de Filadelfia para decantar el choque brasileño de octavos en favor de Palmeiras. El atacante del 'Verdão' recortó con calidad y batió al meta rival por raso, como un pase a la red, en el minuto 100.

La chispa del ex del Bayer Leverkusen, clave contra el Inter Miami, iluminó un encuentro muy espeso. Palmeiras, que terminó con uno menos por la expulsión de Gustavo Gómez, se hizo con el dominio después de un primer tiempo de contención. Botafogo, vigente campeón de la Copa Liberatadores, se encomendó a Joaquín Correa pero solo se volcó tras encajar, y no pudo con el muro verde en la prórroga.