Parlamento finlandés aprueba el abandono de la convención contra las minas antipersonales

Finlandia abandona el Tratado de Ottawa para reforzar su defensa en la frontera con Rusia, medida criticada por la ONU y que busca adaptarse a nuevas amenazas de seguridad en la región

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Helsinki, 19 jun (EFE).- El Parlamento finlandés (Eduskunta) aprobó este jueves por 157 votos a favor y 18 en contra la propuesta del Gobierno para que el país nórdico abandone el Tratado de Ottawa, la convención que prohíbe las minas antipersonales, una decisión motivada por la invasión rusa de Ucrania.

De este modo, Finlandia se suma a otros países de la región del mar Báltico, como Estonia, Letonia, Lituania y Polonia, que ya se han retirado del tratado o han iniciado el procedimiento para hacerlo, dado que consideran a Rusia una grave amenaza para su seguridad.

El Gobierno finlandés anunció el pasado mes de abril su intención de abandonar el Tratado de Ottawa, que prohíbe el uso, la producción y el almacenamiento de minas antipersonales, a fin de proteger mejor su frontera oriental con Rusia, la más extensa de un país de la OTAN con el país del presidente ruso, Vladímir Putin, pues totaliza 1.340 kilómetros.

"Finlandia no se enfrenta en estos momentos a una amenaza militar inmediata, pero retirarnos de la Convención de Ottawa nos permitirá prepararnos para los cambios en el entorno de seguridad de forma más flexible", dijo entonces el primer ministro finlandés, Petteri Orpo, en un comunicado.

El titular de Defensa, Antti Häkkänen, justificó esta decisión señalando que la reintroducción de las minas antipersonales permitirá aumentar la capacidad de defensa de Finlandia, ya que son un arma defensiva muy eficaz en caso de una invasión por tierra.

Durante la misma sesión parlamentaria, el Eduskunta aprobó también una declaración de la Comisión de Asuntos Exteriores en la que se afirma que Finlandia mantendrá su firme apoyo a la acción humanitaria contra las minas, incluida la retirada de minas en zonas de conflicto, una vez se concrete su salida de la convención.

Finlandia fue uno de los últimos países de Europa occidental en ratificar el Tratado de Ottawa en 2012, una decisión que le obligó a retirar las miles de minas antipersonales diseminadas a lo largo de la frontera con Rusia desde los tiempos de la Unión Soviética.

Antes de la ratificación, se calcula que las fuerzas armadas finlandesas disponían de cerca de un millón de este tipo de minas si se sumaban las instaladas en la línea fronteriza y las almacenadas en los arsenales.

El Tratado de Ottawa entró en vigor el 1 de marzo de 1999 y desde entonces lo han ratificado 164 países, de los cuales 157 -entre ellos Finlandia- han confirmado que ya no poseen este tipo de dispositivos almacenados.

El secretario general de la ONU, António Guterres, mostró su preocupación el pasado lunes por la decisión de Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania y Polonia de abandonar la convención, ya que -en su opinión- su renuncia amenaza con mermar la protección de los civiles y socavar dos décadas de trabajo en unas normas que "han salvado incontables vidas".

Guterres comunicó su intención de "lanzar una campaña global para reivindicar las normas del desarme humanitario", que durará seis meses y busca potenciar el apoyo del público hacia esta causa, así como facilitar acciones concretas de los estados. EFE