Roberto Morales
Las Rozas (Madrid), 3 jun (EFE).- Hay momentos que quedan para la eternidad y el de Mikel Merino fue decisivo para impulsar a España a la conquista de la Eurocopa 2024. Regresa a Stuttgart, justo once meses después del testarazo que eliminó a la anfitriona Alemania, aún fresco en su memoria "el silencio". Historia de la selección. Un "momento mágico" que valora más con el paso del tiempo.
Stuttgart será eterna para Mikel Merino. Una ciudad clave en su carrera, donde debutó con España y cuatro años después dejó una estampa icónica. En el minuto 119, rompiendo con un testarazo la 'maldición del anfitrión' -ante quien la Roja nunca ganaba en el torneo continental- para hacer única a España. La primera en conquistar cuatro Eurocopas. Lo recuerda en una entrevista con EFE en la que enfoca un nuevo reto, la Francia de Mbappé. La de Dembélé y Doué, flamantes campeones de Europa con el PSG.
De su regreso a Stuttgart a la profunda admiración por la 'generación de oro' del fútbol español. Los Iker Casillas, Xavi Hernández, Andrés Iniesta y compañía a los que idolatró, por lo que considera una osadía que se pueda llegar a comparar con la nueva etapa, pese a que enlazan las conquistas de una Liga de Naciones, con el deseo de que el domingo sean dos, y una Eurocopa.
Pasando por el liderazgo natural de Lamine Yamal a sus 17 años, sin huir del foco y destacando cómo se crece ante la presión. El Balón de Oro. Su año de crecimiento en el Arsenal. De todo habla Mikel Merino sin prisa, disfrutando de la charla como hace del fútbol.
Pregunta: Nacido en Pamplona, ciudad adoptiva Stuttgart. Debutó con la absoluta allí, marcó el gol de su carrera...
Respuesta: (risas) Debute allí y siempre es muy especial volver, sobre todo por recuerdos a nivel personal, por haber podido ayudar al equipo con aquel gol en una noche tan mágica, por ganar y por todo lo que pasó ante Alemania. Y a nivel familia es curioso jugar en el mismo estadio donde lo hizo mi padre y marcar como él.
P: ¿Aún recuerda ese momento de silencio que se creo en lo que era una olla a presión? Desde el gol de Andrés Iniesta en Johannesburgo no había vivido nada igual.
R: Por supuesto que lo recuerdo, lo escuché desde el momento en el que impacto con el balón, hasta que entra en la red. Fue un segundo que se me hicieron tres o cuatro. Ese silencio en el viaje del balón hasta que entra en la portería, en un campo lleno de alemanes, con su selección en inercia positiva y animando sin parar. Y, de repente, escuchar el grito de nuestros fans. Fue un momento mágico que recordaré para siempre.
P: Cuartos de final de la Eurocopa 2024. Prórroga. Una imagen icónica el salto con las piernas abiertas para sostenerse en el aire. Un gol para la eternidad del fútbol español. En el minuto 119, para enterrar la maldición del anfitrión.
R: Yo sí voy a recordar para siempre esa acción. Es algo que la selección nunca en la historia había conseguido, ganar al anfitrión, en un partido que enfrentaba a las dos mejores selecciones del torneo, una final anticipada, y lograrlo en el último minuto es algo único, que con el tiempo lo voy valorando más. Cuando pasen los años le daré un valor mayor aún.
P: Regresa España al mismo escenario para uno de esos grandes partidos de selecciones, ante Francia, que bien puede ser final de Eurocopa o Mundial.
R: Exactamente, es otro de los valores que tiene una competición como la Nations League. Mucha gente no la valora lo suficiente pero los rivales ante los que juegas como Francia, y si ganas un rival de máximo nivel. Es como una Eurocopa pero más alargada en el tiempo. Es un partido durísimo. Sabemos que para ganar cualquier título tienes que jugar contra los mejores y últimamente lo estamos haciendo muy bien. Queremos seguir por esa línea, compitiendo con todo el respeto a Francia, pero sabiendo que ya les hemos ganado y queremos volver a hacerlo.
P: Ganas de revancha francesas, por lo ocurrido en la Eurocopa, pero también de España por aquella final de la Liga de Naciones que se marchó por un tanto de Mbappé que provocó posteriormente un cambio de norma...
R: El fútbol tiene esto que al final vuelves a cruzar caminos y es curioso que aquella final de Nations fuera contra Francia. Ahora volvemos a jugar contra ellos y cuando estás en torneos de este nivel, te mides a selecciones de un nivel altísimo en partidos bonitos, de mucha rivalidad.
P: Lo primero que se viene a la cabeza al nombrar a Francia es su poderío físico, ¿se está imponiendo en el fútbol actual?
R: Se impone buscar al jugador lo más completo posible. Siempre hay momentos en los que el físico va hacia arriba, pero a nivel técnico las selecciones son buenísimas. Ahora se busca el jugador que es capaz de darte todo, nivel físico, técnico, que entienda el juego y son partidos atractivos de jugadores que están llamados a marcar el futuro.
P: A nivel de clubes se vio en la eliminatoria del Arsenal ante el Real Madrid, la forma en la que enterraron cualquier esperanza de remontada en el Bernabéu...
R: Hoy en día es lo que marca el camino, ser un equipo en el que los once van a muerte y físicamente son máquinas. No hay más que ver nuestra eliminatoria contra el PSG, dos partidos de tú a tú con los jugadores dándolo todo. Con Luis Enrique a la cabeza han demostrado lo que funciona hoy en día y lo que te da títulos.
P: ¿Le ha dejado una espinita esta 'Champions'?
R: Sí (suspira), el otro día me dolió ver la final tras sentirte tan cerca de verte ahí. Creo, personalmente, que el Arsenal por los dos partidos que hizo en semifinales podía merecer estar ahí. Al final son detalles que deciden, brillantez individual, en este caso Donnarumma salva dos manos a manos y los primeros quince minutos de París que pudieron darnos la eliminatoria, pero es el fútbol de hoy en día a día, que aún siendo perfectos como equipo, se decide por detalles.
P: ¿En qué le ha mejorado emigrar al fútbol inglés?
R: Soy alguien más maduro todavía, las experiencias, el cambio de aires, salir de tu zona de confort te endurece, te hace crecer. Pasar por momentos duros, darte cuenta de lo que tienes y lo que no, ver lo que tienes que mejorar. Este año ha sido distinto, he aprendido mucho de un grupo con distintas nacionalidades, de una cultura distinta en el país que me hace más maduro.
P: En lo personal ha tenido una evolución en su demarcación para acabar como 9 con Mikel Arteta
R: Yo siempre me veía en la zona de peligro, siempre he sido muy llegador y he estado cerca del área rival. No lo he explotado a nivel de números, de meter goles, tanto como podría pero me encontraba cómodo cerca del área. Tengo poderío físico que a la hora de rematar genera problemas a los centrales y es peligroso, pero es verdad que nunca me había visto de delantero centro. Este año he tenido la oportunidad de evolucionar y es un nivel más que desarrollo en mi juego que me va a venir muy bien.
P: Hablando de nueves, ¿se mantiene el factor temible que generaba Mbappé o se ha perdido con el tiempo?
R: Eso lo podéis decir vosotros, dentro del terreno de juego tenemos el factor respeto, sabemos que es un jugador muy bueno. Le respetamos, pero tenemos en mente que es un jugador y le jugamos de tú a tú como a cualquier rival. Sabemos de sus capacidades pero todos somos humanos, cometemos errores y aciertos.
P: ¿Es el mejor delantero centro del mundo?
R: Es difícil valorarlo como delantero centro porque tiene tanto potencial que puede jugar en muchas demarcaciones distintas. Se siente muy cómodo pegado a banda, no es un punta al uso porque sale mucho de la posición para asociarse. Sin duda, es de los mejores del mundo.
P: Integra un ataque con nombres como Dembélé y Doué que dan mucho respeto por su temporada.
R: Nombres magníficos que han hecho un temporadón, jugadores de una calidad enorme, muy rápidos, desequilibrantes. Francia tiene una selección espectacular, ya lo demostró en la Eurocopa y por algo llegan a fases finales con la regularidad que lo están haciendo.
P: ¿Quién merece para Mikel Merino el Balón de Oro?
R: Ojalá lo gane Lamine Yamal o Pedri, jugadores que tenemos en la selección que han hecho una temporada increíble. No han llegado a ganar la Champions pero han demostrado durante todo el año que están al nivel de los mejores. Ojalá ganemos la Nations League y les impulse, también la queremos ganar por dar otro título al país y por ambición personal.
P: Nos ha acostumbrado Lamine a algo que no es normal de un chico de 17 años, con una madurez impropia y un descaro en el campo que deja con la boca abierta...
R: Tiene un talento espectacular. Es muy difícil verlo desde tan niño, y luego mentalmente está muy preparado para asumir este tipo de retos. No le puede la presión, el miedo al foco que es algo de joven e incluso de veterano sueles tener, la presión de que todo el mundo esté pendiente de ti. A él no solamente se siente cómodo sino que se viene arriba con esa presión, que los rivales vayan a por él. Es lo que más destaco de Lamine, luego cada uno tiene su camino y alguno gana como Modric el Balón de Oro siendo muy veterano, otros muy jóvenes. No hay que compararle con nadie porque cada uno hace su propio camino, pero sin duda alguna no es algo normal.
P: España busca repetir éxito sin dos de sus grandes referentes, Rodri y Dani Carvajal
R: Todos tenemos que dar un paso adelante porque tanto Rodri como Carva son piezas fundamentales que llevan muchos partidos en la selección. En la última Eurocopa demostraron que son líderes dentro del campo con su experiencia clave en una selección tan joven, pero todos nos hacemos mayores, vamos ganando experiencia y cada uno tiene que dar un paso adelante para suplir a esas dos figuras.
P: Se ha pasado de once años de sequía de títulos a la posibilidad de ganar el tercero consecutivo...
R: Son procesos, etapas. Lo bueno de esta generación es que tiene hambre. Ha ganado cosas pero tiene la intención de seguir ganándolas. Se ha perdido ese miedo de ver imposible ganar un título. Sabemos que es muy difícil porque el nivel de las selecciones es enorme pero el complejo no está ahí, somos valientes, ya lo hemos conseguido y sabemos que podemos volver a hacerlo trabajando duro y compitiendo.
P: Tras una Liga de Naciones, que podrían ser dos, y una Eurocopa, con el Mundial 2026 asomando con España en la terna de favoritas, ¿se puede llegar a equiparar a esta generación con la dorada de los Casillas, Xavi, Iniesta, Ramos, Villa, Torres...?
R: Compararnos con esa generación no tiene sentido a día de hoy por todo lo que significa. Ya no solamente en número de títulos, sino lo que significa ser los primeros en hacerlo y la forma como lo hicieron. Yo tengo un pedacito de corazón en ellos. Fui un niño cuando les vi crecer y esa ilusión de crío, con esas emociones que te hicieron vivir, se quedan ahí. No hay nada comparable con esa generación. EFE
(foto) (vídeo)