La Reina Sofía presume de su faceta más ecologista y se suma a la recogida de basuraleza

Demostrando una vez más su compromiso con la naturaleza, la Reina Sofía ha capitaneado este lunes la campaña de recogida de "basuraleza" promovida por la Fundación Reina Sofía, SEO/BirdLife y Ecoembes, "1m2 contra la basuraleza", en el Puente del Jarama en San Fernando de Henares, presumiendo de su faceta más ecologista como si de una voluntaria más se tratara.

Con unos guantes de plástico negros para protegerse las manos, la Emérita se ha encargado de recoger algunas ramas secas de los árboles caídos mientras portaba una bolsa de basura de gran tamaño, derrochando cercanía y sonrisas con todos aquellos que, al igual que ella, han realizado una batida por el paraje natural para limpiar la zona de basuraleza y con los que ha posado para el recuerdo.

Un acto en el que ha lucido un look veraniego muy similar a los que elige cuando se encuentra de vacaciones en Palma de Mallorca; pantalón de lino blanco, camisa larga a rayas celestes y blancas, unas alpargatas planas en color beige, y una chapa para concenciar sobre la importancia de combatir la basuraleza en la solapa, reafirmándose en su apoyo incondicional al mebio ambiente, una de las causas en las que está centrada desde que su hijo el Felipe VI ascendió al trono en 2014 y ella pasó a ocupar un discreto segundo plano en la agenda de la Casa Real.

Se trata de la reaparición de la Reina Sofía tras el plan 'secreto' del que ha disfrutado con motivo de su visita a Ourense el pasado jueves para inaugurar el XXVIII Congreso de los Bancos de Alimentos. Aprovechando su estancia en la ciudad, la abuela de la Princesa Leonor conoció los lugares más emblemáticos de un enclave único como la Ribeira Sacra, alojándose en el Parador de Santo Estevo -un monasterio benedictino del siglo X- y almorzando en uno de los restaurantes más populares de la zona, donde conquistó por su amabilidad y su cercanía, tras recorrer los cañones del Río Sil en un catamarán.