Laboratorio OKC

Guardar

Andrea Montolivo

Chicago (EE.UU.), 30 may (EFE).- Del abismo a las Finales NBA en 3 años. Los Oklahoma City Thunder pasaron de las 58 derrotas de 2022 a ser los favoritos para el anillo en 2025. Sacrificaron a Paul George y Russell Westbrook en 2019 para apostar por el futuro. Elecciones de draft y desarrollo de talento. Shai Gilgeous Alexander es el MVP de la NBA. Chet Holmgren y Jalen Williams, los complementos perfectos. Así es el laboratorio OKC.

Los Thunder son finalistas de la NBA. Sentenciaron el miércoles a los Minnesota Timberwolves y esperan a Indiana Pacers o New York Knicks. Tendrán ventaja de campo en las Finales. El director general Sam Presti apostó por un arsenal de elecciones del draft y por un crecimiento sostenible para reconstruir en OKC.

Envió a Paul George a los Clippers a cambio de Gilgeous Alexander y cinco 'picks' de primera ronda. Recibió cuatro elecciones de primera ronda y Chris Paul desde los Houston Rockets por Russell Westbrook. El propio Paul o el dominicano Al Horford también pasaron por OKC y terminaron saliendo, a cambio bazas de draft.

El próximo 5 de junio, OKC volverá a pisar el escenario de unas Finales NBA por primera vez desde 2012. La refundación comenzó en 2019. Y requirió sufrir. En la temporada 2020-2021, los Thunder perdieron 50 partidos. Sufrieron la peor derrota en la historia de la liga, al caer 152-79 contra los Memphis Grizzlies. En la campaña siguiente, perdieron 58. También tuvieron balance negativo en la temporada 2022-2023 (40-42).

Pero lejos de los focos, Sam Presti movía sus cartas. Dio total confianza a Mark Daigneault, al que fichó como entrenador jefe en 2020 a los 35 años. En 2024, el preparador fue elegido como mejor de la temporada. En el draft de 2021 seleccionó a Josh Giddey, en el de 2022 eligió a Jalen Williams y a Chet Holmgren. Formó un grupo joven, ambicioso, humilde y unido.

Williams y Holmgren forman ahora el 'Big-3' de OKC junto al MVP Gilgeous Alexander. Giddey sirvió como baza para llegar a Alex Caruso el pasado verano. Una pieza clave, al igual que los centímetros del pívot Isaiah Hartenstein, para completar a un equipo decidido a ir a por todo.

Los Thunder firmaron una temporada regular de 68 victorias este año. Fue la quinta mejor marca en la historia de la NBA. No temblaron en los 'playoffs'. Arrollaron 4-0 a los Memphis Grizzlies en la primera ronda, doblegaron en siete partidos a los Denver Nuggets del triple MVP Nikola Jokic en la segunda, antes de dominar 4-1 las finales del Oeste contra los Wolves.

OKC llega a las Finales con un promedio de edad de 25.6 años. Es el equipo más joven en alcanzar la serie por el título en casi 50 años. Anteriormente, en la campaña 1976-1977, los Portland Trail Blazers fueron finalistas con un promedio de edad de 25 años.

La última vez que Oklahoma llegó a las Finales se remonta a 2012, cuando contaba con un trío estelar formado por Kevin Durant, James Harden y Russell Westbrook. Los Miami Heat de LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh les negaron el anillo.

Harden sería el primero en dejar OKC, con destino Houston Rockets. También saldría Kevin Durant, para ir a coronarse en Golden State junto a Steph Curry y, en 2019, llegó el adiós de Westbrook.

Trece años después, los Thunder vuelven a optar al trofeo Larry O'Brien. Lo hacen con otro MVP en su motor, Gilgeous Alexander, y con un proyecto deportivo sostenible que lo tiene todo para completar el trabajo. EFE