El gobernador de São Paulo asegura que "jamás" escuchó a Bolsonaro hablar de un golpe

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Brasilia, 30 may (EFE).- El gobernador de São Paulo, Tarcísio de Freitas, declaró este viernes como testigo en el juicio por golpismo contra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro y aseguró que "jamás" escuchó del líder de la ultraderecha alguna mención a una posible "ruptura democrática".

Freitas, quien fue ministro de Infraestructura durante la gestión de Bolsonaro (2019-2023), testimonió ante la Primera Sala del Supremo, que juzga a Bolsonaro y treinta de sus más cercanos colaboradores por un supuesto plan para impedir la toma de posesión del actual mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva, tras las elecciones de 2022.

El gobernador dijo que, después de los comicios en que Bolsonaro perdió frente a Lula, visitó varias veces al líder de la extrema derecha y siempre le vio "triste y resignado", así como "preocupado" por "el futuro del país" con el Gobierno progresista elegido en las urnas.

Freitas fue citado como testigo por la defensa de Bolsonaro, con quien mantiene una muy estrecha relación política y de amistad desde hace años.

De hecho, es barajado como posible candidato presidencial de la extrema derecha para el año próximo en representación de Bolsonaro, quien no podrá postularse pues fue inhabilitado por la Justicia debido a abusos de poder político y económico en los que incurrió en la campaña de 2022.

Según la acusación formulada por la Fiscalía, tras esas elecciones, Bolsonaro y su entorno íntimo tejieron diversos planes para impedir que Lula asumiera el poder.

La conspiración habría desembocado en la asonada del 8 de enero de 2023, una semana después de la investidura de Lula, cuando miles de bolsonaristas destrozaron las sedes del Supremo, el Congreso y la Presidencia con la intención de incitar una intervención militar que derrocara al nuevo Gobierno.

Los planes golpistas fueron confirmados en parte ante la Primera Sala del Supremo por el general Marco Antonio Freire Gomes, entonces comandante del Ejército, quien declaró que Bolsonaro llegó a reunir a los jefes militares y planteó la posibilidad de impedir la investidura de Lula.

"Expuse la importancia de evaluar todas las consecuencias", dijo Freire Gomes, quien agregó que además le aclaró a Bolsonaro que "no tendría apoyo" de las Fuerzas Armadas y que, si insistiera en su tesis golpista, "podría ser encuadrado jurídicamente".

Esa reunión fue confirmada también por el exjefe de la Fuerza Aérea Carlos Baptista Júnior, quien aseguró ante el tribunal que, en diciembre de 2022 y aún en su condición de jefe de Estado, el líder de la ultraderecha le presentó a los militares unas "propuestas" que "atentaban contra el régimen democrático".

La Primera Sala de la Corte Suprema terminará de escuchar a los testigos de acusación y defensa la próxima semana, tras lo cual deberá fijar una fecha para comenzar los interrogatorios al propio Bolsonaro y a los otros treinta imputados en el proceso. EFE

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