
Con fuerzas renovadas y mensajes tanto a la clase política como a la Casa Real para dar a la danza y a las artes escénicas el lugar que les corresponde, Nacho Duato regresa a Madrid con su nueva compañía de baile, formada por 30 bailarines, de los cuales reconoce que hay pocos españoles por la falta de ayudas públicas, tras 15 años de ausencia. Será del 12 al 15 de junio cuando represente en el Teatro Albéniz algunas de sus obras más emblemáticas, como 'Gnawa, Liberté' y 'Duende', además de su última creación coreográfica, 'Cantus'.
Una reaparición en la que el bailarín se ha mostrado muy molesto con los dirigentes políticos, 'denunciando' públicamente la falta de apoyos a la danza en nuestro país: "No quiero a los políticos ni a 20 kilómetros. Si tenemos un ministro que no sabe sobre las artes escénicas y sobre la música, poco vamos a hacer" ha denunciado, lamentándose de que la danza "no despunta en España porque si no les interesa a los políticos, no le va a interesar a nadie".
"No tenemos un duro, pero estamos contentos porque tenemos libertad de movimiento y hacemos lo que queremos" ha sentenciado, tachando de "vergüenza" que "tenemos aquí una compañía que no tiene sede propia, que está dos días en el Canal, es una vergüenza dos días en el Real, que tiene que ir como el circo de Manolita Chen de un lado a otro con la compañía de los 60 o 80 bailarines en lugar de tener una sede propia para poder crear un repertorio como cualquier otra ciudad europea bueno, del mundo". "No es que me den la espalda, simplemente no les interesa. Es como si les hablas de una cosa que no entienden. La danza no interesa" se lamenta.
Hace algún tiempo se especuló con que la Infanta Sofía podría convertirse en embajadora del Ballet Nacional; algo que no se materializó, como nos ha contado Nacho, que no ha dudado en mandar un mensaje a la Casa Real para dar importancia institucional a la hija menor de los Reyes Felipe y Letizia ahora que ha cumplido la mayoría de edad.
"Quería que fuese, pero no me escribió nunca la Casa Real. Me decían que estaban buscando un hueco, pero a los 15 meses ya no me encontraba el hueco, dije pues ya vamos a dejarlo. Y bueno, no pasó nada. Hubiese sido bonito, pero como tampoco tenemos aquí un teatro con compañía, no hay una compañía con teatro propio, pues... Y es muy importante porque se le da valor a la danza, y hubiese sido bonito que ella, además como siempre va detrás de Leonor ahí como despistada, que no sabe qué hacer, por lo menos de madrina de la danza hubiese estado bonito" asegura, dejando en el 'tejado' de Zarzuela la posibilidad de que la Infanta Sofía se convierta en el apoyo institucional de la danza en nuestro país.