Roma, 19 may (EFE).- La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, afirmó que se ha considerado positivamente la disponibilidad expresada por el papa León XIV de que el Vaticano sea la sede de las posibles negociaciones entre Ucrania y Rusia tras la conversación telefónica que mantuvieron algunos líderes europeos con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y estadounidense, Donald Trump.
En la conversación participaron, además de Meloni, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula, Von der Leyen y Zelenski; el canciller alemán, Friedrich Merz y los presidentes de Francia y Finlandia, Emmanuel Macron y Alexander Stubb, respectivamente.
Se produjo después de que Trump hablase por teléfono con el presidente ruso, Vladímir Putin, sobre la guerra en Ucrania, y avanzaron que incrementarían la presión sobre Moscú por medio de sanciones.
En la conversación, Trump informó del contenido de su llamada con Putin y se debatió la pregunta de cómo se puede alcanzar un alto el fuego en Ucrania.
"Se está trabajando para el inicio inmediato de negociaciones entre las partes que puedan conducir a un alto el fuego lo antes posible y construir las condiciones para una paz justa y duradera en Ucrania", se lee en el comunicado del Gobierno italiano en el que se informó de la conversación
.A este respecto, añade, "se consideró positiva la disposición del Santo Padre a acoger las conversaciones en el Vaticano".
"Italia está dispuesta a poner de su parte para facilitar los contactos y trabajar por la paz", agrega la nota.
El viernes pasado se reunieron por primera vez en tres años representantes ucranianos y rusos en Turquía, pero el único acuerdo tangible fue el intercambio de un millar de prisioneros de guerra por cada bando y la promesa de intercambiar listas con condiciones para un eventual alto el fuego.
Está previsto que este martes los ministros de Defensa y Exteriores de la Unión Europea (UE) den luz verde en sendos Consejos en Bruselas al decimoséptimo paquete de sanciones contra Rusia, que incluye medidas restrictivas contra otras 75 personas o instituciones y cerca de 200 buques de la llamada flota fantasma de Rusia, que ayuda a que el país esquive las sanciones a su petróleo.
Además, varios líderes europeos han avanzado la necesidad de fortalecer aún más las sanciones para ejercer presión sobre Moscú en un momento crucial para el inicio de unas negociaciones para un alto el fuego. EFE