Riga, 19 may (EFE).- El Gobierno de Lituania se ha querellado este lunes contra Bielorrusia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por el presunto papel del Estado bielorruso a la hora de organizar y facilitar el tráfico de migrantes a gran escala a través de la frontera del país báltico.
Según anunció en un comunicado el Ministerio de Justicia de Lituania, el caso se centra en la supuesta violación de Bielorrusia de sus obligaciones bajo el Protocolo contra el Tráfico de Migrantes por Tierra, Mar y Aire que completa la convención de Naciones Unidas contra la criminalidad organizada transnacional.
Según declaró el ministro de Justicia, Rimantas Mockus, se trata de un "paso histórico", puesto que es el primer caso trasnacional presentado por el país báltico ante la CIJ, que da fe del compromiso lituano con el uso de los sistemas globales de justicia para defender intereses nacionales y lograr que se respete el derecho.
"El régimen bielorruso debe rendir cuentas legalmente por orquestar la oleada de migración ilegal y los consiguientes abusos de derechos humanos", afirmó Mockus, que manifestó la esperanza de que el caso sirva para disuadir a Bielorrusia y otros países de actos similares en el futuro.
"Ningún Estado puede usar a personas vulnerables como peones políticos sin enfrentarse a consecuencias", remachó.
El comunicado destacó que Lituania exige además una compensación económica de Bielorrusia, puesto que el "ataque híbrido" ha causado retos financieros, institucionales y operativos sustanciales.
En verano de 2021 el Gobierno bielorruso eliminó los requisitos de visado hasta entonces existentes para una serie de países de Oriente Próximo, lo que resultó en el influjo de un gran número de migrantes y solicitantes de asilo que posteriormente intentaban cruzar las fronteras hacia la Unión Europea (UE).
Aunque el fenómeno migratorio se redujo tras la crisis de 2021, los países bálticos y Polonia han denunciado desde entonces la continuación de una "guerra híbrida", con la que Minsk trata de desestabilizar a la UE facilitando la llegada de migrantes a la frontera. EFE