El primer ministro de Libia acusa al resto de partidos de "complot golpista" por pedir su dimisión

Guardar

El primer ministro del Gobierno de Unidad Nacional de Libia, Abdul Hamid Dbeibé, ha culpado a los partidos políticos de querer dejar en manos de la milicias la ciudad de Trípoli y de aprovechar las tensiones ocurridas durante los pasados días para promover un "complot golpista".

Este sábado, 26 formaciones políticas libias solicitaron la dimisión de Dbeibé por su incapacidad para llevar a buen puerto una transición democrática en el país y por el "deterioro de las condiciones de vida".

El mandatario libio ha señalado que los partidos son "bienvenidos" en caso de que apoyen "el proyecto del estado", pero que no tolerará a quienes "continúen corrompiendo y socavando la seguridad", en declaraciones realizadas en un discurso televisado a la nación este sábado que han sido recogidas por la agencia de noticias LANA.

Asimismo, ha justificado su tardanza para dirigirse a los ciudadanos libios asegurando que lo ha hecho "deliberadamente" para evitar que cualquier interpretación errónea diera lugar a "conflictos".

Dbeibé se encuentra en el punto de mira de las protestas que estallaron esta semana tras los combates registrados desde el martes en el barrio de Abu Salim entre milicias rivales, marcados por la muerte del líder de la milicia Aparato de Apoyo a la Estabilidad (SSA) --vinculada a las autoridades de Trípoli, reconocidas internacionalmente--, Abdelghani al Kikli, conocido como 'Gheniua'.

Las protestas se intensificaron y dirigieron hacia su Gobierno con disturbios y enfrentamientos entre la policía y los manifestantes en Trípoli que dejaron este viernes al menos un agente fallecido. Además, cinco ministros del Gobierno han dimitido en las últimas horas.

Al respecto de las manifestaciones, el primer ministro libio ha señalado que, a pesar de que algunas de las reivindicaciones de los ciudadanos son "legítimas", la gran parte de estas protestas fueron "financiadas" para "influir en la opinión pública".

En este sentido, ha argumentado que su actitud contra los manifestantes fue "mantener la paciencia y resistir la presión por respeto a la ciudadanía libia".

Sin embargo, la Misión de Apoyo de las Naciones Unidas en Libia (UNSMIL) exigió el sábado al país que respetara el derecho "a la libertad de expresión y de reunión pacífica sin temor a represalias", ante la preocupación por las informaciones "sobre el uso de munición real por parte de las fuerzas de seguridad para dispersar a los manifestantes".

Al mismo tiempo, activistas del barrio de Souq al Jumaa, uno de los epicentros de las protestas contra Dbeibé, han anunciado el comienzo de una sentada "abierta, pacífica e integral" en la capital "hasta que el primer ministro Dbeibé abandone el cargo", según recogió el portal de noticias 'Libya Update'.

Ante lo que el jefe del Gobierno ha afirmado que quien quiera enfrentarle con los ciudadanos de Souq al Jumaa "no tendrá éxito", destacando que el lema de su mandato es "no a la guerra entre libios".

RECONOCE ERRORES TRAS LAS PROTESTAS DE ABU SALIM

Tras los enfrentamientos que tuvieron lugar este martes en el barrio de Trípoli de Abu Salim, Dbeibé ha calificado de "error compartido" la prisa con la que se implementaron las medidas de seguridad, a pesar de las cuales continuaron los disturbios y al menos dejaron seis muertos.

"A la gente de Abu Salim, les digo que la injusticia que han sufrido ha sido levantada y que apoyaré a su zona con mayor firmeza que antes", ha sostenido el mandatario.

Entre las decisiones que el Gobierno ha tomado tras la escalada de violencia en las calles, el primer ministro libio ha anunciado que nombró a un nuevo jefe de los Servicios de Seguridad Interna "muy cualificado" que "no tolerará ninguna injusticia ni abuso".

"AMPLIO" APOYO INTERNACIONAL

Igualmente, ha manifestado que el apoyo internacional al Gobierno de Unidad Nacional y a su persona es "amplio" debido a que "desean una Libia estable", refiriéndose a las visitas recientes de delegaciones extranjeras y sus mensajes de apoyo.

Por último, ha concluido su mensaje diciendo que los libios están comenzado a ver "un rayo de esperanza al final de este período oscuro y el comienzo de un estado de derecho e instituciones".