Irun (Gipuzkoa), 17 may (EFE).- El Irudek Bidasoa-Irun defiende este domingo su privilegiada segunda plaza en la cancha más inexpugnable de la Liga Asobal esta temporada, la del Balonmano Valladolid, que no ha perdido en casa ningún partido.
El objetivo del conjunto vasco, que no estará solo en el Huerta del Rey porque habrá una nutrida presencia de seguidores, es repetir el subcampeonato de la pasada campaña y todo pasa por no caer ante el batallador conjunto pucelano.
Luego quedarán otros dos partidos, en casa ante el emergente Balonmano Logroño, el equipo más en forma en los dos últimos meses, y la siempre peligrosa salida a Puente Genil, pero Álex Mozas, técnico bidasotarra, tiene marcado con un círculo rojo la fecha de este mañana.
Bidasoa-Irun está avisado, sobre todo después de que los pucelanos derrotaran con solvencia al poderoso Barcelona hace unas semanas, y no podrá tomar como referencia el choque de ida en Artaleku, donde los guipuzcoanos fueron superiores a los de David Pisonero, aunque sudando la gota gorda (32-27).
Los antecedentes en Valladolid son no obstante positivos para un equipo de Irun que no pierde desde el año 2017, aunque todo indica que en esta temporada la dificultad va a ser máxima.
Bidasoa tiene una sensible baja para este encuentro, ya que el central brasileño Pedro Pacheco se pierde lo que queda de temporada por operación de menisco, si bien sí podrá contar con el lateral Tito Díaz, cada día más integrado en el equipo tras su larga lesión de rodilla que le tuvo casi ocho meses en el dique seco.EFE
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