El Gobierno actuará por filtración de mensajes de Sánchez si no hay investigación judicial

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Madrid, 13 may (EFE).- El Gobierno español considera que la filtración de mensajes privados del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, puede ser un comportamiento delictivo y da por hecho que se abrirá una investigación judicial, pero, si no la hay, emprenderá acciones legales.

"Queremos llegar hasta el final. Queremos conocer todo de la filtración: quién ha sido, por qué ha sido y qué otros mensajes privados, que nada tienen que ver con una causa judicial, están en poder de personas capaces de cometer delitos", ha manifestado este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros el titular de Presidencia, Justicia y Relaciones, Félix Bolaños.

El ministro se refería así a la polémica surgida por la difusión en medios de mensajes telefónicos privados que el presidente del Gobierno intercambió entre 2020 y 2021 con el exministro José Luis Ábalos, ahora investigado en un caso de corrupción.

Tanto Bolaños como la ministra portavoz, Pilar Alegría, han hecho hincapié en la "gravedad" de una filtración que vulnera la privacidad y el derecho a la intimidad del presidente del Gobierno y han asegurado que no prejuzgan quién puede estar detrás de esa filtración.

Los mensajes publicados, ha subrayado, son previos a la causa judicial que investiga a Ábalos, son "absolutamente intrascendentes" y están "absolutamente descontextualizados".

Preguntada sobre si la filtración de mensajes en los que, por ejemplo, Sánchez llama "pájara" a la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha afectado al ambiente del Consejo de Ministros, Alegría ha afirmado que ha sido una reunión "absolutamente ordinaria, con el buen clima que suele ser habitual".

Fuentes del Ejecutivo han insistido en la determinación del Gobierno de actuar judicialmente si no hay una investigación de oficio, que consideran que debería hacerse en una pieza separada.

Esa investigación la dan prácticamente por hecho sin necesidad de denuncia previa al señalar que es como actúa siempre el estado de derecho en estos casos.

Las fuentes citadas aseguran que, aunque la revelación de una conversación privada es muy grave, el presidente del Gobierno está muy tranquilo, porque afirma que no hay nada en los mensajes con Ábalos que pueda implicarle en algo delictivo.

Pero sí reconocen que a Sánchez le preocupa que se hagan públicas sus conversaciones privadas, como explican que puso de manifiesto en un mensaje que envió el pasado domingo a los miembros de la cúpula del Partido Socialista tras conocer las primeras informaciones al respecto.

Un mensaje en el que consideró que se están atropellando sus derechos al vulnerarse la privacidad de sus conversaciones. EFE