El Cairo, 8 may (EFE).- Amnistía Internacional (AI) denunció este jueves que Emiratos Árabes Unidos (EAU) está reexportando armas avanzadas de China para las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) en Sudán, grupo que ha utilizado este armamento en Darfur pese al embargo de armas de la ONU en esta región occidental sudanesa.
La ONG analizó imágenes y vídeos de las FAR en los que pudo identificar bombas guiadas GB50A y obuses AH-4 de 155 milímetros fabricadas por la empresa estatal de defensa Grupo Norinco, también conocida como China North Industries Group Corporation Limited.
De acuerdo con Amnistía, "el único país del mundo que ha importado obuses AH-4 de China es Emiratos", una transferencia que según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo ocurrió en 2019.
"Es casi seguro que las armas fueron reexportadas a Sudán por Emiratos", afirmó AI, que denunció que es "la primera vez que se documenta el uso activo de bombas GB50A en un conflicto a nivel mundial".
La organización confirmó la presencia de estas armas chinas de reciente fabricación en Darfur Norte, algo que constituye "una clara violación del embargo de armas por parte de Emiratos", mientras que el hallazgo de obuses AH-4 en Jartum "refuerza aún más la creciente evidencia que demuestra el amplio apoyo" de EAU a las FAR.
"Emiratos debe detener inmediatamente sus transferencias de armas a las FAR. Hasta que lo hagan, también deben cesar todas las transferencias internacionales de armas a EAU", denunció Amnistía, que pidió a China, como Estado parte del Tratado sobre el Comercio de Armas (TCA), que tome "medidas urgentes" para prevenir el desvío de sus armas a Sudán.
En este sentido, acusó a Emiratos de "menoscabar sistemáticamente" el objeto y propósito del TCA, del que es signatario.
"Esto indica que EAU continúa brindando apoyo a las FAR, tras hallazgos similares del Panel de Expertos de la ONU sobre Sudán y otros informes", dijo AI, que recordó que ha publicado evidencia de violaciones de embargo similares por parte del país árabe, como el suministro de drones Wing Loong en Libia.
Por otra parte, la organización afirmó que el Grupo Norinco tiene la responsabilidad de respetar los derechos humanos en todas sus operaciones globales, lo que "le exige llevar a cabo la debida diligencia en materia de derechos humanos a lo largo de toda su cadena de valor para identificar, prevenir y mitigar cualquier participación real o potencial en abusos contra los derechos humanos".
La guerra en Sudán entre el Ejército y las FAR estalló el 15 de abril de 2025 y, desde entonces, han perdido la vida decenas de miles de personas, mientras que otras más de 12,5 millones se han visto obligadas a abandonar sus hogares.
Varias organizaciones y países, así como el propio Gobierno de Sudán, han denunciado el apoyo logístico, armamentístico y económico que Emiratos ha brindado a los paramilitares desde el inicio del conflicto, pese a que el país del golfo Pérsico niega estas acusaciones. EFE