La India niega objetivos civiles tras un ataque transfronterizo contra Pakistán

Guardar

Nueva Delhi/Srinagar, 7 may (EFE).- La India negó objetivo civiles en la operación de este miércoles dirigida contra nueve presuntas bases terroristas en Pakistán, realizado como represalia a un ataque armado contra turistas en la Cachemira administrada por la India hace dos semanas.

"Las acciones de la India han sido enfocadas y precisas. Fueron mesuradas, responsables y diseñadas para no provocar una escalada. Ningún objetivo civil, económico o militar paquistaní ha sido atacado. Solo se atacaron campamentos terroristas conocidos", aseguró en un comunicado.

Pakistán mantiene una versión diferente, asegurando que "se han llevado a cabo un total de 24 ataques en seis lugares, en los que ocho civiles han muerto, otros 35 han resultado heridos y dos están desaparecidos".

La operación, denominada "Operación Sindoor", fue anunciada en redes sociales por el Ejército Indio, que simplemente afirmó: "Se ha hecho justicia", sin ofrecer más detalles.

El Ministerio de Defensa indio describió el ataque como "una respuesta precisa y contenida" a la masacre del 22 de abril en la ciudad turística de Pahalgam, en la Cachemira administrada por la India, donde hombres armados mataron a 26 civiles, la mayoría turistas de la India.

"Se llevaron a cabo ataques focalizados contra nueve emplazamientos de infraestructura terrorista en Pakistán y en Jammu y Cachemira, ocupados por Pakistán, atacando las raíces de la planificación terrorista transfronteriza", declaró el Ministerio indio en otro un comunicado.

Sin embargo, el portavoz militar paquistaní, el teniente general Ahmed Sharif Chaudhry, aseguró las bajas y condenó el ataque indio como un acto “cobarde”. Añadió que Pakistán estaba llevando a cabo operaciones aéreas y terrestres en respuesta.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Pakistán calificó el ataque indio como “un acto de guerra flagrante y no provocado”, y se comprometió a responder “con férrea determinación para proteger y preservar la soberanía y la integridad territorial” del país.

En la Cachemira administrada por la India, los residentes dijeron que se despertaron sobresaltados por el rugido de los aviones, seguido del silbido de los misiles. Los ataques reavivaron el temor a una guerra a gran escala entre la India y Pakistán, profundizando el pánico en la ya tensa región.

Según Pakistán, la India lanzó los ataques permaneciendo dentro de su propio espacio aéreo, pero utilizó armas de distanciamiento para atacar zonas civiles.

Los objetivos reportados se encontraban repartidos por Muridke y Bahawalpur, en la provincia paquistaní de Punjab, y Bagh, Kotli y Muzaffarabad, en la Cachemira administrada por Pakistán, al otro lado de la frontera de facto, la Línea de Control.

El primer ministro de Pakistán, Shehbaz Sharif, afirmó que Pakistán tenía "todo el derecho a responder con contundencia a este acto de guerra ".

La India ha acusado a Pakistán de orquestar el ataque del 22 de abril contra civiles en Cachemira, pero no ha aportado pruebas públicas que respalden esta acusación. Pakistán ha negado categóricamente su implicación.

El ataque fue uno de los más mortíferos contra civiles en Cachemira en décadas y ha intensificado drásticamente las tensiones entre los vecinos, que poseen armas nucleares.

Tanto India como Pakistán reclaman Cachemira en su totalidad y han librado múltiples guerras por la región desde que obtuvieron su independencia del Reino Unido en 1947. EFE